En medio de las denuncias de corrupción que salpican a exfuncionarios y a muchos de los principales empresarios del país, desde la Asociación Empresaria Argentina (AEA) decidieron abrir una discusión de alto nivel: cómo avanzar para reducir los altos niveles de informalidad de la economía argentina.

Uno de los principales impulsores es el ex titular de la AFIP, Alberto Abad, quien desde su cargo fue uno de los que más trabajó para blanquear la economía en todas sus formas. Hoy ocupa el directorio del banco Santander Río. Durante el encuentro de AEA compartió mesa con el titular de la entidad bacnaria, Enrique Cristofani.

El tema surgió en las conversaciones entre ejecutivos luego del encuentro en el que se abordó su rol en los pagos de coimas y la necesidad de llevar adelante un profundo cambio, publicó Infobae.

No es casual que esta propuesta aparezca en medio del escándalo desatado por las revelaciones de los cuadernos del chofer del Ministerio de Planificación, Oscar Centeno.

La intención es mostrar que además de mirar hacia atrás y revisar qué es lo que se hizo, también se pretenden cambios a futuro.

Mayor protagonismo

Está claro que la decisión que tomaron en AEA es adoptar un rol de mayor protagonismo, en un momento en que varias cámaras empresarias se ven afectadas por escándalos de corrupción.

El caso más fuerte es sin duda el de la Cámara Argentina de la Construcción, donde la mayoría de sus miembros actuales y pasados pagaron coimas para adjudicarse obra pública. Por caso, Carlos Wagner quedó en el centro de la tormenta.

En pos de reomtar la iniciativa, uno de los temas que aparece en la agenda es el del proyecto de blanqueo laboral, para facilitar que decenas de miles de personas que están trabajando en negro (se estima que la informalidad laboral llega al 35% del total de los trabajadores activos) puedan comenzar a hacerlo de manera formal. La iniciativa está parada en el Senado.

La iniciativa es además una suerte de excusa para sentar a los tres grandes protagonistas de la actividad económica (Estado, empresarios y sindicalistas) y lograr una foto inédita en los últimos años. Claro que la proximidad del año electoral seguramente complicará los planes para que se pueda dar este diálogo.