El Banco Central de Argentina evalúa lanzar nuevas medidas para que los bancos remuneren mejor a los ahorristas y, de este modo, lograr que su política monetaria se transmita de manera más efectiva al resto de la economía.

Funcionarios del Comité de Política Monetaria (Copom) del organismo estiman que el nivel de tasas que las entidades financieras pagan a sus clientes es aún demasiado bajo con relación a la actual tasa de política, según información brindada por Bloomberg.

Una de las normas que el Banco Central estaría estudiando es permitir a las entidades invertir en sus letras de deuda (Leliq) una mayor proporción de los encajes que deben hacer con sus depósitos a plazo fijo. Del encaje de 35%, actualmente los bancos pueden utilizar hasta 18% para colocar en dichos títulos.

La medida, que ya fue conversada en el Copom, está lista para ser anunciada cuando sea necesario, aunque no sería la única sobre la mesa.

 

Desde el inicio del plan monetario en octubre, el presidente del BCRA, Guido Sandleris, busca fomentar la competencia entre las entidades para que suban sus tasas pasivas y reforzar así el sesgo contractivo de la política. A diferencia de instrumentos usados por el BCRA previamente, solo los bancos pueden comprar Leliq.

En el último mes, y luego de que el organismo habilitara la posibilidad de que los argentinos pudieran hacer plazos fijos en cualquier entidad sin necesidad de ser clientes, los bancos locales subieron en torno a 4 puntos porcentuales las tasas que pagan a ahorristas privados por un depósito a 30 días, señala Bloomberg.

Esto llevó a que el diferencial entre la tasa que los bancos obtienen como remuneración al prestar su dinero al Banco Central por 7 días, que actualmente está en 70,53% anual, y la que pagan a sus ahorristas privados por un depósito a 30 días, hoy en 51,1% anual, bajara 7 puntos porcentuales hasta 19,6 puntos porcentuales.