Los técnicos aeronáuticos denunciaron al Gobierno por la seguridad aérea
El sindicalista Ricardo Cirielli denunció ante la Justicia al ministro de Defensa, Arturo Puricelli, y al titular de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), Alejandro Granados, a quienes acusó de "poner en riesgo la seguridad aérea".
Fuentes judiciales informaron que Cirielli acusó a ambos funcionarios por designar en el Centro de Control de Aérea de Ezeiza "personal inidóneo y no capacitado para dicha tarea e impedir el ingreso al área a supervisores cuya labor resulta esencial para garantizar la seguridad aérea".
Tras la presentación y el sorteo correspondiente, la causa recayó en el juzgado federal N° 7 que subroga el juez federal Norberto Oyarbide.
En el escrito. el secretario general de la Asociación de Personal Técnico Aeronáutico (APTA), con el patrocinio de los abogados Mariano Pinciroli y Nelson Vicente, acusó a Puricelli y Granados de "incumplimiento de los deberes de funcionario público" y "haber puesto en peligro la seguridad aeroportuaria".
Tal cual expuso en su presentación el sindicalista, las operaciones quedaron a cargo de "personal militar que estuvo fuera de servicio entre dos y ocho años, sin la práctica laboral y sin las habilidades profesionales indispensables para ocupar dichos
cargos".
"El escaso personal designado (insuficiente para controlar eficazmente un aeropuerto) había ingresado a laborar a las 12 horas y siendo las 20 horas continuaban prestando servicios. Los controladores aéreos -debido al inmenso stress que genera su labor y la especial atención que deben prestar ya que cualquier distracción podría provocar un accidente- poseen una jornada reducida de seis horas diarias", sostuvo Cirielli en su denuncia.
"La obligación de quedarse después de dicho horario puso en peligro efectivo y concreto la seguridad aérea del Aeropuerto de
Ezeiza", agregó.