A poco más de un mes de la implementación de los controles sobre la compra de dólares, los efectos de la medida se hacen sentir de manera notoria en algunas de las principales ramas de actividad.

Tras superar una primera etapa dominada por la incertidumbre, en la que se advirtió un freno a la hora de definir compras de propiedades o autos 0 km, entre otras cosas, lo cierto es que, poco a poco, se han aquietado las aguas.

Y hoy resulta muy raro encontrar quien afirme que no se ha adaptado a las nuevas reglas de juego impuestas por el Gobierno.

En este sentido, podría decirse que, en términos comerciales, el escenario se ha visto sustancialmente alterado.

Sucede que, hubo "alguien" que tomó un rol privilegiado cuando hasta hace poco no se presentaba como "el protagonista" a la hora de cerrar operaciones económicas de envergadura. ¿De quién se trata?: del peso argentino.

Así las cosas, y prácticamente de un día para el otro, la divisa local comenzó a cobrar significancia y a resultar determinante en transacciones inmobiliarias, adquisiciones de vehículos importados o en la compra de paquetes turísticos para las próximas vacaciones de verano.

Diego Migliorisi, socio gerente de Migliorisi Propiedades, explicó la situación en estos términos: "Hace unos meses, la moneda local prácticamente no era considerada. Ahora, es raro que alguien la rechace como forma de pago".

De esta forma, muchos de los que antes negociaban solamente en dólares, en las últimas semanas comenzaron a incluir la opción de pago en pesos.

"Aunque ya había muchas concesionarias que venían trabajando parte en moneda local, en el caso de los importados, ahora son muchas más las que la utilizan como alternativa para hacer reservas. La medida oficial, al principio, puso un poco de freno a las operaciones, pero después todo se recuperó", comentó a iProfesional.com Dante Álvarez, presidente de la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (ACARA).

Una visión similar tienen numerosos agentes del sector turismo y esparcimiento. Así, una manera que encontraron varios interesados en viajar a destinos como Brasil, Miami, México o el Caribe, pero sin sacrificar divisas norteamericanas, consiste, precisamente, en pesificar viajes.

Ahí es donde se impone el uso de tarjetas de crédito y la demanda de planes que puedan pagarse en cuotas fijas en pesos.

"La demanda de las alternativas de viaje en moneda local aumentó exponencialmente el último mes. El grueso de los argentinos quiere pagar en pesos. Entonces, lo que hacen las agencias es establecer los precios de los paquetes en dólares, pero luego te permiten cancelarlos en moneda local. La conversión ahora es automática", aseguró a este medio una agente de ventas de Despegar.com.

El peso en los ladrillos

Otro de los testigos de este renovado protagonismo del peso argentino es el segmento de real estate.

Una muestra de ello es que, para el caso de las obras desde boca de pozo, "varios emprendimientos se están proyectando con cuotas en pesos, indexadas según el índice de la CAC (Costo Argentino de la Construcción)", señaló Luis Ramos, presidente de LJ Ramos.

En tanto, Maximiliano Bravo, gerente de Tizado Propiedades, aseguró: "Lo que se está viendo para los nuevos desarrollos es una especie de migración de los valores fijos en dólares a los fidecomisos al costo en pesos".

Bajo esta modalidad, los desarrolladores abren la posibilidad a nuevos inversores de sumarse a un proyecto utilizando la misma moneda en la que reciben sus ingresos aunque, por otro lado, se transfiere la inflación que se acumula mes a mes.

"Ahora, se está optando por la cancelación en dólares del terreno y, para el desarrollo, se aceptan cuotas en pesos que se van actualizando. Antes de las medidas cambiarias, lo normal era todo en billetes verdes", afirmó a iProfesional.com Jorge González, presidente de la desarrolladora Baresa.

Desde el estudio desarrollador Dactivo, uno de sus socios, Pablo Lapieza, insistió respecto del buen momento que exhiben los fideicomisos en pesos tras la decisión oficial.

"Son los que más atraen la atención por estos días, en detrimento de las opciones que siguen apelando al dólar. Los clientes observan que meterse en algo nuevo, tasado en dólares, es algo muy riesgoso. El que no cambie la forma de vender y no apueste al peso, lamentablemente, corre el riesgo de quedar fuera del negocio", sostuvo a iProfesional.com.

Por otra parte, Néstor Walenten, presidente de la Cámara Argentina Inmobiliaria, planteó cautela más allá de este cambio en la tendencia.

"Que no se piense que el mercado inmobiliario se va a pesificar de la noche a la mañana después de 40 años de dolarización. Pero la inversión en pesos es una buena noticia para el sector porque, de alguna manera, comenzamos a olvidarnos un poco del tema de la devaluación", aseguró.Venta y alquiler

Por fuera de la postura de los desarrolladores, en lo que se refiere a compraventa de unidades terminadas también se destaca el surgimiento del peso como una opción de pago que goza, cada vez, de mayor presencia en la plaza local.

"Los propietarios ahora lo ven de las dos maneras. El vendedor individual, es decir, quien tiene una vivienda para comercializar, sigue queriendo vender en dólares. Y el que ofrece muchas unidades acepta comercializar en pesos", comentó a iProfesional.com Daniel Salaya, presidente de la inmobiliaria Salaya Romera.

"De cara a lo que viene, es de suponer que la tendencia a vender en pesos se irá afirmando. Es cierto que no se generalizará en un 100% en el corto plazo, pero el número de operaciones en moneda local se elevará", agregó.

No obstante, Roberto Ledo, director de Bullrich, puso algunos reparos en cuanto a esta expansión de la moneda nacional dentro de la escena inmobiliaria.

"El argentino es un mercado históricamente dolarizado. Y eso es algo que no se abandonará de un día para el otro. Hoy es cierto que se toma cada vez más al peso como materia prima de pago, pero siempre en equivalencia con el dólar", aseveró.

"La presencia más fuerte de los billetes argentinos se da, sin dudas, en los fideicomisos de costo abierto. Siempre ajustándose a través del índice de la CAC. Esto abre otras posibilidades en un mercado en el que los salarios se abonan en pesos, al igual que la mano de obra y los costos en general", agregó.

El nuevo rol de la moneda local se ha vuelto tan relevante que, incluso, esta consecuencia del control oficial se está haciendo sentir en alquileres, como aquellos que se concentran en la Costa Atlántica.

Según trascendió, localidades como Cariló, Mar de las Pampas o Mar Azul, debieron reconvertir su estrategia tradicional de cotizar las propiedades en dólares, y comenzaron a aceptar también pesos.

En promedio, en las localidades más "top" de la costa argentina, la oferta de unidades que habitualmente está dolarizada varía entre un 20% y un 25% del total disponible.

"En las casas más caras, la moneda fuerte siempre fue el dólar. Históricamente, esas viviendas se alquilaron así. Ahora la cosa cambió y la divisa norteamericana quedó como un punto de referencia, ya que buena parte de las operaciones se cierran en pesos", declaró Jorge Santamarina, titular de la inmobiliaria homónima.

Efecto cuatro ruedas

En cuanto al negocio de la comercialización de automóviles, el peso argentino ganó una fuerte presencia, sobre todo en las últimas semanas, en lo que hace al pago de reservas para la compra de vehículos importados.

Alberto Príncipe, presidente de la Cámara del Comercio Automotor (CCA), y titular de una agencia Hyundai, afirmó a iProfesional.com que "en este último tiempo ganó mucha más presencia el peso y es así como estamos llevando a cabo la comercialización".

"Transcurridas las primeras semanas desde la implementación de los controles, se empezaron a notar los cambios en lo que hace al predominio del peso por sobre el dólar para realizar pagos. Las consultas aumentaron. En nuestro caso, quien puede paga en dólares, pero si no también aceptamos el peso para la compra de un importado", añadió.

Desde la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (ACARA) su titular, Dante Álvarez, sostuvo que "la modalidad de pesos ya pasó a ser normal para muchas agencias".

"En mi caso, soy concesionario Peugeot y los importados los ofrezco en valores que siempre están en pesos. Incluida la reserva, claro. Muchos de los que estaban dando señas en otra moneda cambiaron de modalidad. Otros, como en mi caso, siempre dejamos espacio a la moneda local", puntualizó.

En los últimos días, varios dueños de concesionarias que tienen en sus vidrieras vehículos importados señalaron que las operaciones están aumentando, justamente, entre quienes venden sus dólares en el mercado paralelo.

Sucede que obtienen una cotización más alta por la moneda estadounidense y luego compran autos premium en pesos.

"Quienes tienen dólares sienten que es el mejor momento para comprar un auto. El oficial no llegará, ni siquiera en marzo, a la valuación que tiene hoy el blue", sostuvo una fuente empresarial del sector.

"Como tuvimos una demanda acumulada por la falta de autos, hoy tenemos más compradores que unidades. La realidad es que elegimos a quienes se muestran interesados", completó Leopoldo Ferro, del concesionario oficial BMW Autoferro. De esta forma, el empresario reconoció el protagonismo del peso a partir de la nueva normativa.

Turismo diferente

Los viajes y el turismo aparecen también como un espacio en el que se observa una injerencia cada vez mayor del peso argentino en las ofertas.

En ese sentido, la venta de paquetes turísticos se está reactivando, impulsada en gran medida por la posibilidad de pagar en moneda local y en cuotas.

"Con cuotas fijas de $400 mensuales podés irte de vacaciones al Caribe. Muchos lo analizan así. La inflación se come ese costo", comentó a este medio un ejecutivo que ya diagrama sus vacaciones para principios del año próximo.

Al amparo de las tarjetas de crédito, los destinos que ofrecen servicio all inclusive, es decir, comidas y bebidas pagas, ahora son observados como una alternativa muy adecuada para vacacionar en el exterior abonando en pesos.

Así, esta opción, que antes era valorada sobre todo por los grupos familiares, hoy también es tenida en cuenta por solteros y parejas.

"Durante la primera semana posterior a las trabas para comprar dólares, se sintió un parate en la decisión de saldar viajes. Pero ya está reactivándose, sobre todo, a partir de la posibilidad de cancelar en 12 cuotas fijas y en pesos porque así se está congelando a futuro el valor del dólar", declaró Martín Lan, de Lan & Kramer, una agencia de viajes que ofrece todos sus paquetes en 12 cuotas fijas en moneda local.

La mayoría de las agencias trabajan con un máximo de 12, pero hay algunas que ofrecen, con determinadas tarjetas, 18 y hasta 24 cuotas sin interés.

Por su parte, Marcelo Gallucci, gerente comercial de Les Amis Viajes, señaló que las cuotas fijas en moneda local reactivaron el sector, que sufrió inicialmente con las restricciones a la compra de dólares, dado que la gente prefirió no usar los billetes verdes que tenían guardados.

"Los paquetes al exterior ahora se están pesificando en su totalidad. Para ello, se toma el precio oficial del dólar. Si bien hay que ver cuestiones como la disponibilidad y demás, lo cierto es que todo está pasándose a pesos", confirmaron a iProfesional.com desde Les Amis.

En tanto, desde Despegar.com, la respuesta a este medio resultó ser prácticamente la misma.

"Todo se está ofreciendo para ser abonado en moneda local. Si bien se mantiene la cotización en dólares, por tratarse del parámetro del turismo para el mundo, los precios se pesifican. La tendencia que se está viendo en el grueso de las agencias es ir hacia ese lado. Y parece que este camino seguirá profundizándose con el correr de los meses", concluyó un representante de la compañía.