Comenzó vendiendo copias en las calles de Manhattan y ahora es el director de operaciones de Metropolis Collectibles, el mayor distribuidor de cómics vintage del mundo. Sus empresas Collectibles Inc. y ComicConnect.com negociaron las tres ventas de historietas más altas de todos los tiempos, empezando con una copia, conservada casi en condiciones perfectas, de la primera aparición de Superman que alcanzó más de u$s2,1 millones en una subasta en diciembre de 2011.

El especialista en estas publicaciones está convencido de que los cómics son casi la mejor inversión que existe y brindó sus razones al diario El País de España:

1. ¿Qué otra cosa podría comprar alguien por 10 centavos de dólar en 1938 que valga u$s2,1 millones hoy?

La copia comercializada en 2011 se dice que pertenecía al actor Nicholas Cage.

Él la compró en 1997 por unos u$s150.000. Fue robada de su casa en 2000 pero fue devuelta después de que la policía de Los Ángeles la descubriera en un casillero abandonado.

Su condición recibió la calificación 9 en una escala de 10 puntos y sigue siendo el cómic más caro vendido hasta la fecha.

2. Un cómic podría pagar su casa.

En junio, Zurzolo subastó otra copia de Action Comics No. 1 a nombre de un hombre de Minnesota que la encontró en la pared de una casa que estaba remodelando.

La historieta había sido insertada como aislamiento y estaba en mal estado, por lo que consiguió una calificación de solo 1,5.

"El tipo compró la casa por u$s10.100, encontró un cómic que se vendió por u$s175.000, y yo recaudé una comisión de 10% sobre esto", contó Zurzolo.

3. Un cómic podría salvar su casa de un embargo hipotecario.

Una pareja anónima que vivía en el sur de Estados Unidos estaba limpiando el sótano de la casa en la que habían vivido desde los años 50, ya que el banco estaba a punto de quitársela.

Encontraron una copia de Action Comics No. 1 en una caja vieja y la llevaron a Zurzolo. "El titular (de los diarios) fue 'Superman saves the day' (Superman salva el día) y eso fue absolutamente cierto", afirmó el hombre de negocios. La vendieron por u$s436.000.

4. Los cómics son a prueba de recesión.

La única vez que el negocio de este empresario se desaceleró fue justo después del colapso de la burbuja de las .com, pero pronto volvió a subir.

"Cuando la economía anda mal, la gente busca formas alternativas de inversión", explicó Zurzolo y agregó que "cuando la situación va muy bien tienen más ingresos discrecionales y compran cómics".

5. La creciente brecha entre ricos y pobres sólo excluyó a las masas de inversionistas de algunos números, como Action Comics No. 1. "Hay un cómic para cada presupuesto y un presupuesto para cada cómic", aseguró.

6. Las valoraciones de cómics aún no han caído.

En los duros meses después de la crisis financiera, Zurzolo vendió una copia de Action Comics No. 1 por u$s317.200, que fue récord en ese entonces.

"Había mucha gente con dinero que no quería comprar bienes raíces y estaban aterrados de la bolsa de valores", recordó.

7. Muchas veces las inversiones de historietas son más liquidas que los bienes raíces.

Las convenciones de cómics en todo el mundo constantemente atraen a muchedumbres de entre 30.000 y 150.000 personas. "La gente con cuentas bancarias muy grandes está asistiendo disfrazada", afirmó el empresario y consideró: "Ahora es 'cool' ser nerd".

8. Las inversiones en cómics son más predecibles que las acciones.

El Promedio Industrial Dow Jones podría llegar a 20.000 o 5.000, pero Zurzolo predice que los cómics seguirán captando nuevos compradores.

"En las convenciones, la gente ve mis cómics en el estante y dicen, ¿cuánto cuesta ese? Y digo u$s100.000 o u$s500.000 o u$s700.000 o u$s1 millón. Y no pueden creer que tengo una historieta que vale más que una casa".

9. Están imprimiendo más dinero; no están imprimiendo más cómics clásicos.

Ocasionalmente alguien encuentra una copia desconocida en una caja y eso eleva la cantidad en circulación, pero no se compara a cuando la Fed imprime u$s85.000 millones al mes.

Los cómics no son tan susceptibles a las burbujas como por ejemplo, los peluches Beanie Babies, que eran un producto fabricado, y que aunque hoy en día no se siguen produciendo, continúa habiendo una gran cantidad de gente dispuesta a comprarlos.

10. Es más entretenido investigar un cómic que un bono o una empresa.

En lugar de seguirle la pista a un aburrido presidente ejecutivo, puede mantenerse al tanto de los personajes de cómics que están surgiendo en las películas.

"Le puedo contar más de lo que está pasándole al Hombre Araña que sobre una empresa "Fortune 500" con 10.000 empleados, en la que si uno de ellos hace algo estúpido, el precio de la acción cae u$s5 en un día", afirmó. "No hay nada que usted pueda decirme que va a causar que no quiera a Superman, el Hombre Araña o Batman", agregó.

Un consejo

Al ser consultado por el sitio Marketwatch.com sobre un buen tip para una persona con u$s5.000 o u$s20.000, Zurzolo ofreció una respuesta bastante particular:

"Yo simplemente compraría la primera aparición del Hombre Araña en Amazing Fantasy No. 15", dijo. "Eso casi siempre es garantía. Podría tener que mantenerla de un año a tres años, pero seguirá viendo crecimiento en ese cómic como en ningún otro cómic en el mercado".

Una copia en excelente estado se vendió por u$s1,1 millones en 2011 pero hay muchos otros ejemplares de menor calificación en el mercado que están valuados en miles de dólares, según comentó Zurzolo.

"El Hombre Araña es el superhéroe más altamente recaudado en el mundo de cómics. Hace cinco años, Amazing Fantasy 15 se vendió en unos u$s2.500 a u$s3.000. El mismo cómic hoy está en unos u$s7.000. Si me está preguntando en qué pondría yo mi dinero, lo pondría en ese cómic".