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La previa del Mundial, tibia: se acerca Brasil y la compra de electro no repunta

La mayor cautela de los argentinos y bolsillos más apretados, producto de subas salariales que corren por debajo de la inflación, se sienten en comercios
19/04/2014 - 08:07hs
La previa del Mundial, tibia: se acerca Brasil y la compra de electro no repunta

Falta muy poco para el Mundial de Fútbol y el "espíritu" de Brasil ya se siente de lleno en los medios, donde las marcas y empresas aprovechan "la previa" para quedar asociadas al evento deportivo más importante del año a nivel internacional.

Es por eso que compañías como Quilmes, McDonald's, Samsung, Nokia, Cablevisión, Claro y Coca-Cola, entre muchas otras, ponen en marcha acciones de marketing para "subirse" al clima mundialista.

Sin embargo, por el momento, esta "fiebre" está lejos de generar un efecto derrame en las cadenas de electrodomésticos, que apoyan parte de sus expectativas en el Mundial para intentar revertir un año que se perfila muy complicado en cuanto a nivel de demanda.

La cautela es más que evidente si se tiene en cuenta que las ventas en comercios minoristas cayeron 7% en marzo en relación al mismo mes del año pasado, según un relevamiento de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).

El dato no es menor: el informe advierte que se trata del desplome más fuerte de los últimos cinco años.

"Hay que remontarse a octubre de 2009 para encontrar una tasa de caída anual mayor a la actual", apunta el documento.

Al trazar una radiografía y analizar cuáles fueron los rubros más afectados, se destaca el de electrodomésticos.

El relevamiento de la entidad indica que en esta categoría se produjo un derrumbe del 16% frente a marzo del año pasado, medido en volúmenes.

Cabe destacar que, para ese mismo mes de 2010, es decir, en momentos previos al Mundial de Sudáfrica, las ventas de electro habían crecido un 5%, para luego dispararse en abril.

Argentinos, más cautos

La explicación que dan los expertos es clara: el enfriamiento del consumo está pegando con fuerza en las casas de artículos del hogar, de la mano de más argentinos que deciden postergar compras.

Al respecto, un informe sobre las expectativas de los consumidores realizado en conjunto por la UCA y la consultora TNS Gallup advierte que "se observa un mayor pesimismo en relación a la situación actual y futura de la economía y, particularmente, para la compra de bienes durables".

De hecho, cerca de 6 de cada 10 personas consideran que es un "mal" o "muy mal" momento para adquirir este tipo de artículos, según se desprende del mismo estudio.

Otro factor que está desalentando la compra de electrodomésticos es el recorte en las opciones de financiamiento que tuvo lugar a partir de enero.

"Si bien algunos comercios y tarjetas volvieron a ofrecer cuotas, los plazos no resultaron del todo atractivos para un consumidor que, expectante de la evolución económica y financiera, eligió esperar", destaca el informe.

En este escenario, los especialistas coinciden en indicar que existe una marcada diferencia con el "boom" de ventas de 2010 en el rubro. Y remarcan el contraste con el Mundial anterior, recordando aquellos tiempos en los que era común ver planes de pago a 50 meses y sin interés.

Otra variable que explica por qué esta previa del Mundial se muestra tan fría es que parte de los argentinos ya venían de aprovechar la última tanda de promos que tuvo lugar antes de la devaluación.

"Muchos todavía están cancelando pagos mensuales por compras realizadas en los dos últimos años", confirma Vicente Lourenzo, desde la CAME.

Paralelamente, un factor extra que también pesa en estos momentos es la variable precios.

Sucede que, tras la fuerte suba del dólar oficial, los valores de algunos productos se dispararon, lo cual funcionó como un claro desincentivo a la compra de estos artículos.

Si bien el Gobierno intentó imponer un techo de suba del 7,5% respecto a los niveles de diciembre, para Carolina Yellati, socia de Wonder Consultora, en algunos casos esto no se cumplió: "La devaluación del peso tuvo un gran impacto en gran parte de los productos que están atados a la cotización del dólar".

Para Soledad Pérez Duhalde, de la consultora Abeceb, luego de los incrementos de precios, "era esperable que cayeran las ventas en este rubro", especialmente porque el salto del tipo de cambio contribuyó a la pérdida del poder adquisitivo.

Así, tras un primer trimestre "caliente" en materia inflacionaria y con mejoras salariales que corren por detrás, el escenario no es el más propicio para que las cadenas de retail puedan sacarle más provecho al "efecto Mundial".

Respecto a este punto, el informe de CAME señala que la demanda "muestra síntomas de debilitamiento" y apunta que "los consumidores se mantienen expectantes esperando que los precios de algunos productos se acomoden o que haya mayores facilidades de financiamiento".

Postergar lo que no es urgente

Hasta el año pasado, los "anabólicos" que impulsaban la demanda -planes de pago a largo plazo y descuentos-, sumado a las escasas alternativas de refugio que le ganaran a la inflación, determinaron que los argentinos continuaran practicando lo que el economista Carlos Melconian definió como "fuga al consumo".

Al respecto, Yellati destaca que "hasta 2013, debido a las complicaciones para acceder a la compra de moneda extranjera y el bajo atractivo de los plazos fijos, la gente gastaba ese excedente", para luego recalcar que "algunos de los rubros que se vieron favorecidos por la coyuntura fueron viajes, esparcimiento, autos y electro".

Pero este 2014 claramente se presenta muy diferente.

Como se mencionó anteriormente, el escenario actual se caracteriza por un comportamiento más cauto por parte de los consumidores. Así, lejos de aquellos tiempos del "boom" de compras, el cuidado del bolsillo lleva a dejar de lado algunos gastos no esenciales.

En este punto, Pérez Duhalde señala que "lo primero que la gente ajusta, en un escenario como el que estamos transitando, es todo aquello que sea prescindible. Y esto impacta especialmente en los gastos asociados a electrodomésticos".

En el mismo sentido, un informe de Wonder Consultora arroja que "un 74% de los argentinos sostiene que es poco probable que compre artículos del hogar en los próximos meses".

Perspectivas de empleo

Otra de las variables que influye en la decisión de los argentinos de postergar los gastos asociados con la "fiebre del Mundial" es la percepción de que este año el escenario laboral presentará algunas complicaciones.

De hecho, uno de cada dos argentinos asegura que actualmente "hay pocos o muy pocos puestos de trabajo disponibles", según lo revela la encuesta conjunta entre TNS Gallup y la UCA.

En la misma línea, al ser consultadas sobre las perspectivas del empleo para los próximos seis meses, una de cada tres personas cree que habrá menos trabajo.

A su vez, también pesa el hecho de que los argentinos comienzan a ver afectadas sus finanzas personales.

De hecho, el informe de Wonder Consultora destaca que casi el 50% de los encuestados considera que, en materia económica, le va peor que el año pasado.

En palabras de Yellati, es un hecho que "se está deteriorando la capacidad de consumo de los hogares".

Lejos de 2010

Los expertos coinciden en señalar que es posible que, a medida que se acerque el inicio del Mundial de Fútbol, las ventas de electrodomésticos exhiban una leve mejoría.

Sin embargo, aclaran que no se tratará de un fuerte repunte de la demanda con tasas de variación positiva, sino que lo más probable que suceda es una desaceleración de la caída.

"Va a caer menos la venta, pero no va a ser realmente un repunte", aclara Pérez Duhalde.

En tanto, Lourenzo marca un punto no menor, vinculado con el drástico cambio de escenario en los últimos cuatro años: "Respecto del Mundial 2010 hay una gran diferencia. En ese momento se ofrecían 50 cuotas y hoy lo máximo a lo que se puede apuntar son 12 y en determinados productos y fechas".

En este contexto, existe preocupación en el sector por la baja demanda.

Es por eso que en estos días es posible ver un "aluvión" de publicidades que apunta a estimular la compra de cara a "la previa" mundialista.

"Hay una sobreoferta de anuncios que dejan en claro que las cadenas tienen mercadería de más y que necesitan vender", dice el ejecutivo de CAME.

Es por eso que para las próximas semanas se espera un mayor incentivo vía promociones, con el objetivo de vender todos aquellos productos que descansan en las góndolas, a la espera de la demanda habitual que genera este tipo de eventos deportivos. 

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