iProfesionaliProfesional

Las "cuevas" festejan: ganan fortunas por descontar cheques

Ventas en baja, costos en alza y clientes que se demoran en cancelar sus facturas hace que muchos deban buscar alternativas para financiarse
23/04/2014 - 11:14hs
Las "cuevas" festejan: ganan fortunas por descontar cheques

En épocas de vacas flacas, con ventas en baja, tasas de interés por las nubes, demoras en la cadena de pagos y descubiertos bancarios "al rojo vivo", hacerse de dinero cash se ha convertido en una misión tan difícil como costosa.

"Patear" proveedores o entregar cheques "a los premios" -como suelen decir los gerentes administrativos- se han convertido en una práctica habitual, que se traduce en plazos que llegan a duplicar el acordado inicialmente entre las partes.

En tanto, los bancos no están siendo de gran ayuda, tanto por las tasas de interés que ofrecen como también por los recortes que están aplicando en el financiamiento a empresas, ya sea para el uso del descubierto como para la compra de cheques.

Esta situación, signada por préstamos más caros y complicados de obtener en el ámbito formal -en un contexto de alta presión impositiva- complica por demás a particulares y empresas.

Como contrapartida, deja como grandes beneficiadas a las "cuevas" que se encargan de descontar cheques y documentos a cambio de proporcionar ese "cash tan preciado", requerido para apagar el rojo en la cuenta bancaria.

"Estamos haciendo muy buenas diferencias y el volumen de negocios creció considerablemente", reconoce uno de los "cueveros" consultados.

La fuente señala que muchos de los que se acercan les comentan que se encuentran frente a la situación de clientes que antes les pagaban en tiempo y forma y que ahora les ofrecen cheques de terceros a 60, 90 y 120 días.

El tesorero de una de esas financieras confió que "quienes recurren a nosotros lo hacen porque encuentran pocas alternativas para financiarse o deben afrontar la exigencia del banco de achicar el descubierto".

¿Cuánto cuesta descontar un cheque?

Quienes se ven obligados a recurrir a una "cueva", es muy probable que se sorprendan al ver el alto costo del "peaje" que deberán abonar para hacerse de pesos en forma anticipada.

Disponer de ese "cash" para cubrir el banco, o para cumplir con el compromiso asumido con un tercero, implica resignar hasta casi un 20% del valor nominal del cheque.

Cuando va a la cueva a descontarlo, lo primero que allí hacen es identificar quién lo libró. En función de ello, se establece la tasa de descuento.

Por lo pronto, existe una enorme variación en los costos que se aplican por realizar la operación ya que éstos básicamente dependen de la categoría del firmante.

Si se trata de un documento librado por una empresa reconocida, la financiera cobrará una muy baja tasa, por la mayor seguridad que ofrece. Ese cargo irá subiendo si éste proviene de una pequeña firma o de un individuo, dependiendo de la calidad crediticia.

Pero, en todos los casos, se deberá pagar un porcentaje por la gestión del operador, que puede llegar a ser del 5%, si se trata de un cliente nuevo o que opera poco volumen.

"Las tasas varían dependiendo del firmante y de los plazos. Como referencia, se puede decir que se cobra entre el 6% y el 15% mensual más un 3% fijo de gestión", informan desde una financiera que funciona en el barrio de Belgrano, ante la consulta de iProfesional.

Estos porcentajes fueron retocados recientemente a la suba, siguiendo el recorrido alcista que impulsó el Banco Central para el costo del dinero.

Hablando "en plata", si se necesita descontar un cheque de $30.000 a 30 días, se recibirá en mano una cifra que -con la tasa más cara- será de $24.600. Y, en el mejor de los casos, subirá hasta los $27.300.

El plazo mencionado no es arbitrario, ya que prácticamente es el tiempo máximo que se están negociando por estos días para este tipo de transacciones. Y dista mucho de los 90 (días) que se solía operar hasta diciembre pasado.

En cuanto a los cheques de pago diferido, la tasa que se cobra para un plazo de 30 días ronda el 7,5%, aunque aquí también existe una notoria dispersión en los cargos.

¿En cuánto difieren estas tasas de las que cobran los bancos? Mucho menos de lo que uno pudiese imaginar. Una Pyme con buen balance debe afrontar un costo financiero total (esto es tasa de interés más comisiones y gastos) que se puede elevar hasta un 6% mensual.

"La razón del por qué es tan costoso es que, con el freno en la actividad, trepó en forma significativa el número de cheques que vienen de vuelta y esto complica la cobranza", afirma el ejecutivo de un banco privado.

Fuentes del sector señalan que "el mayor desafío que deben enfrentar las entidades financieras es el de una morosidad creciente, que si no se maneja adecuadamente termina convirtiéndose en incobrabilidad lisa y llana. Y eso se paga".

Negocio cuevero

Como en todo mercado, existen nichos que son atendidos por las distintas financieras.

Por un lado, están las que se dedican exclusivamente a negociar cheques de terceros, en poder de compañías con buen "récord bancario", que recurren a sus servicios por haber cubierto los márgenes que les otorgan los bancos.

A esta modalidad se pueden sumar las siguientes:

Compra de cheques: para quienes tienen en su poder cheques de terceros al día y buscan hacerse del efectivo en forma inmediata, para evitar la espera del clearing bancario.

El costo de la operación subió en los últimos días del 2,5% al 3% para aquellos valores emitidos al portador, y al 4% para los "no a la orden".

De esta manera, en el primer caso, con una tasa de 3%, por esos mismos $30.000 se recibirán $29.100 y, en el segundo, unos $28.800.

Lo más usual es que el cliente se haga de los fondos una vez que los mismos son acreditados en su banco. Pero existe una variante que consiste en adelantar el cobro y hacerse de los billetes al instante de recibir el documento.

Claro está que esto tiene su precio: un 5% mensual, que se prorratea en función de los días que restan hasta el momento en el que aparecen los fondos en la cuenta, al que se debe sumar el costo fijo de la operación.

Entonces, para un plazo normal de 48 horas, dicho costo asciende al 3,3%. Pero si esa operación se realiza un jueves o viernes (antes del fin de semana), ascenderá al 3,7%.

Este descuento será mayor si se está en vísperas de un feriado puente ya que, en tal caso, se adelantarían fondos por un total de seis, por lo que el mismo ascendería al 4%.

Préstamos con cheques personales: es una de las alternativas más difundidas para quienes necesitan dinero y disponen de una cuenta corriente habilitada.

En estos casos, las cuevas cobran una tasa que parte de un piso del 9% mensual a un máximo del 12%.

En general, ofrecen préstamos que van desde los $10.000 a los $50.000, que son devueltos en plazos que suelen rondar las doce cuotas.

A manera de ejemplo, por $30.000, a 12 meses de plazo, con una tasa del 12% mensual, se debe emitir esa misma cantidad de cheques propios, cada uno por $4.843. De esta manera, al fin de la operación se estará devolviendo prácticamente el doble de lo solicitado.

Cable: es otra de las transacciones muy requeridas por los clientes de las cuevas. Se trata de transferir dólares a cuentas establecidas en el exterior.

Por lo general, el cliente se presenta con pesos, que la propia cueva transforma en billetes verdes, que quedan en "custodia" hasta que se confirme la operación. Se trata de una transacción donde el principal resguardo es la confianza.

Curiosamente, en vez de pagar una comisión, el cliente se ve "beneficiado" con un descuento sobre el precio del blue, que puede rondar, según el momento, entre el 1,5% y el 2%.

El volumen del mercado

Al tratarse de un segmento que se mueve en la informalidad, no existen cifras precisas que permitan determinar la real dimensión en este tipo de circuito.

No obstante, los operadores señalan que el volumen no es para nada despreciable, habida cuenta de que un 30% de la economía opera por fuera de los andariveles formales.

Este es uno de los motivos que alientan el crecimiento y uso de de esta operatoria, que se potencia en momentos en los que la cadena de pagos se resiente.

Algunas fuentes señalan que en total operan unas 250 cuevas sólo en la Ciudad de Buenos Aires.

De ellas, las de mayor envergadura se estima que pueden mover entre $500.000 y $1.000.0000 diarios, de los cuales la mayor parte proviene del descuento de cheques.

Para el resto, el monto se reduce a unos $150.000. Una cifra nada despreciable y que explica la expansión del negocio.