La Policía Metropolitana prueba un metrocóptero, un dispositivo experimental de vuelo, diseñado y construido por personal de la fuerza de seguridad, a partir de recursos propios.

Según explicó a iProfesional un vocero policial, se estudiaron los aspectos más relevantes de los diseños comerciales, como también los utilizados en las fuerzas de seguridad y militares, que se emplean en países donde la vanguardia de la tecnología aporta un valor agregado al servicio y la comunidad.

Se evitó así "la sobreexposición de las personas en sitios o lugares donde el riesgo y el peligro podrían afectar la vida del personal policial o de emergencias, protegiéndolos de accidentes fatales".

Este fue el punto de partida para una investigación de todos los aspectos que involucran a este sistema, como su arquitectura, materiales, componentes, electrónica, que fueron la clave del diseño.

Los objetivos estratégicos para la obtención del prototipo son los siguientes: "Obtener la autonomía tecnológica en el desarrollo, el control del mínimo costo y manejar la dinámica de utilización adaptándolo a diversas necesidades que se puedan presentar".

Desde la fuerza de seguridad resaltaron que "el gran valor agregado que aporta un dispositivo de estas características, de construcción propia, es sin ningún lugar a dudas, en primer lugar, el económico ya que se logra construir con un presupuesto que representa solo una fracción de su valor comercial.

En segundo aspecto favorable es "la dependencia y disponibilidad de su modificación, y en tercer lugar resalta que su mantenimiento se logra con muy poca cantidad de recursos y tiempo, por lo cual y para tener una idea de magnitud, la construcción de un dispositivo se logra en un período de 15 a 20 días previa adquisición de todos los materiales necesarios".

Esto se logró con el aporte de conocimientos de un pequeño grupo de profesionales multidisciplinarios.

"Encabezados por un inspector, ingeniero en telecomunicaciones que es el responsable del Área División Laboratorio Electrónico y otros profesionales en electrónica y mecánica, que tomaron este desafío como propio, para proveer sus conocimientos técnicos y policiales en post de una mejora a los servicios de seguridad y emergencias que devienen en una mejora a la comunidad", resaltaron desde la fuerza de seguridad.

"La capacidad de un dispositivo de estas características son sólo los límites de las propias necesidades y la imaginación de quienes lo construyen", sostuvo el vocero policial.

Posee dos cámaras, una de ellas transmite video en tiempo real con el objetivo de observar situaciones puntuales.

Si se lo requiere esta información puede ser enviada al destino que se desee, como por ejemplo al Centro de Monitoreo Urbano.

La otra cámara posee una calidad y resolución de imagen en Full HD 1080p, como la que se reproduce desde un Blu-Ray en un televisor de ultima generación, y con el potencial de tomar imágenes en la reciente resolución de 4K (cuatro veces Full HD) para un estudio pormenorizado según su necesidad específica.

Orígenes y desarrolloEste proyecto (la foto es de un hexacóptero, aunque la fuerza de seguridad porteña por ahora no difunde fotos de su desarrollo) nació a partir de un viaje que realizó la jefatura de la Policía Metropolitana a Israel, donde observaron, entre otras cosas, la tecnología que aplican las fuerzas de seguridad.

Esto motivó en el Superintendente de Comunicaciones y Servicios Técnicos, Eduardo Martino, "la idea de la gran utilidad que podría producir un drone de estas características aplicado al tratamiento de distintas situaciones en el ámbito de la emergencia donde el acceso no fuera posible ó se pondría en riesgo la integridad o la vida del personal".

La idea de incorporar los beneficios de estas tecnologías a las fuerzas de seguridad y emergencias recayó en el Área División Laboratorio Electrónico perteneciente a esa superintendencia.

Este dispositivo, como la propia tecnología, puede ser mejorado de forma continua y permanente, para lo cual solo se debe cumplir un plan de continuidad.

Se encuentra en estudio fortalecer los sistemas de comunicaciones y telecomandos reduciendo aún más los costos de fabricación.

También se considera de gran importancia la incorporación de telemetría que está en desarrollo, que permitiría sumar más información tanto del drone como de su entorno.

La Policía Metropolitana estudia otros dispositivos basados en robótica y otros elementos que puedan incluir sobre tecnologías de avanzada.

Características técnicasLas características de estos drones son, en esencia, acceder a sitios específicos y proveer las imágenes que se requieran según cada necesidad.

"Ese es en la actualidad el recurso que puede proveer este dispositivo, pero no existe un límite de posibilidad al cual debamos referirnos ya que esto es tecnología y con recursos suficientes podrían brindar un sinfín de propósitos. Sólo nos limita nuestra capacidad, imaginación y recursos", destacó el vocero.

Los fines son muy específicos porque estos equipos tienen ciertas limitaciones de autonomía, ya que existe una relación de carga útil a transportar, y una relación de peso-potencia. De esos enfoques y características surge y se sustenta el estudio para las mejoras de autonomía, estabilidad y potenciales a ser utilizados.

Cada batería puede producir en la mejor de las situaciones una autonomía de 15-20 minutos de vuelo y este puede aumentar en directa relación de la cantidad de baterías que se posea, siempre entendiendo que el dispositivo debe regresar para ser reemplazada por otra totalmente cargada, para luego proseguir su vuelo.

Estas baterías poseen una característica muy particular que permiten suministrar una gran cantidad de energía por unidad de tiempo, lo que confiere al dispositivo una gran potencia de reacción.

"Pensar que se puede realizar un patrullaje aéreo para la prevención del delito por ahora se ve como algo lejano", concluyó el vocero.

Así, el drone "sólo tiene por objeto intervenir en casos específicos donde se requiera evaluar una situación de riesgo inminente".

Por ejemplo, un derrumbe, una inundación, un incendio o cualquier otro tipo de eventos donde los riesgos deben ser contemplados de forma veloz y con la mayor exactitud posible, que permita evitar finalizar en una elección de estrategias comprometidas y que finalicen con la vida de un ser humano.

"Este fin, es muy particular y especifico, por lo que 15-20 minutos de vuelo resultan suficientes para evaluar y ponderar situaciones complejas", señaló la fuente.

Para analizar el potencial del drone se pondera y cuantifica los beneficios de obtener imágenes con dispositivos de estas características con su predecesor, un helicóptero.

En la comparación el drone resulta "muchísimo más económico y con la operatividad de salir desde cualquier punto de forma casi instantánea, pudiendo lograr una altura de 100 metros en sólo algunos segundos. Tanto los riesgos como los costos asociados son insignificantes en comparativa. Estas razones son muy evidentes con tan solo ver los potenciales usos tanto aquí como en cualquier parte del mundo", destacó.