Un tercio de la fuerza laboral no está registrada y la calidad del empleo empeoró entre el primer trimestre de 2014 e igual período de 2013, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).

El organismo indicó que al 31 de enero de este año el 32,8 por ciento de los trabajadores no estaba inscripto, lo que refleja una pérdida de calidad laboral dado que un año atrás era de 32 por ciento. 

Este proceso se produjo en medio de un deterioro de la economía, que sufrió una marcada desaceleración en su ritmo de crecimiento.

Por otra parte, pese a los distintos planes anunciados para combatir el trabajo en negro, desde hace al menos siete años la tercera parte de los trabajadores no trabaja en condición regular. Esto implica la ausencia de beneficios sociales y de aportes jubilatorios.

También se repite como norma que las peores condiciones se encuentran en el norte del país. De acuerdo con las cifras oficiales, sobre una población

económicamente activa de 18 millones de personas y una tasa de desocupación de 7,1 por ciento, cerca de 4,2 millones de trabajadores tiene un empleo "en negro".

Según el INDEC, la situación más precaria se observa en el Noroeste, donde el 40,6 por ciento de los trabajadores no está inscripto. Luego aparece la región Noreste con 35,1 por ciento y Cuyo con 35 por ciento. 

En el Gran Buenos Aires el 32,5 por ciento de los empleados no está anotado y en la región Pampeana el porcentaje se ubica en 31,6 por ciento.

La mejor situación aparece en la región Patagónica, donde el 20,1 por ciento de los empleados trabaja de manera informal. Comparando con el primer trimestre de 2013, se observa que el deterioro de la calidad del empleo se notó con mayor fuerza en los aglomerados de más de 500 mil habitantes y en especial en el Gran Buenos Aires, según informó DyN.