Muchas marcas consideran que "cuantos más anuncios mejor".

Con esa lógica aprovechan cualquier esquina, cualquier ventana y cualquier invento para "meter" un nuevo aviso que poder vender y hacer caja.

Sin embargo, conocer los límites resulta esencial a la hora de diseñar un buen plan de Marketing.

"La publicidad online tiene un límite, pero las alternativas y métodos que están adoptando algunos medios son como un crimen", apunta Andrés Toledo, el CEO de Puro Marketing.

Entre las prácticas que se están "poniendo de moda" entre las empresas en los últimos meses está la de "asaltar" a los consumidores con anuncios de video.

La razón es clara: este tipo de publicidad está creciendo de forma más rápida en la red, con una demanda cada vez mayor por parte de los anunciantes.

Esto se hace aún más evidente en canales de video como YouTube.

Sin embargo, es importante saber algo sobre este tipo de avisos: los consumidores los odian (solo el 6% de los usuarios los soporta y los demás buscan fórmulas para saltárselos haciendo lo que sea). ¿Está ya el consumidor saturado?

La tendencia al "on demand"Una de las preguntas que ayuda a entender la nueva tendencia es la siguiente: ¿por qué ven los usuarios contenidos bajo demanda?

Hay muchas razones: prefieren usar sus ocomputadoras, no quieren estar limitados a los horarios o, simplemente, están hartos de cómo ofrecen los contenidos la televisión con pausas infinitas publicitarias o que llegan en momentos álgidos para dejar sólo dos minutos de programa tras la pausa publicitaria.

Internet puede ser la solución a ese problema, informa Puro Marketing.

Además, las cadenas de televisión se han quejado poderosamente en los últimos años del hecho de que los usuarios estén usando plataformas que no respetan el copyright de sus productos para acceder a sus contenidos.

Las series se han ido a manos de Internet y las cadenas tradicionales tienen que remontar a la hora de ofrecer facilidades en el consumo de contenidos.

Videos que molestanMuchas veces el contenido es cortado sin ningún sentido para meter un anuncio en el medio.

En algunos casos, no se ha hecho un trabajo previo para determinar dónde debe ir el anuncio online y, por lo tanto, muchas veces se rompe el ritmo del contenido para pegar un anuncio, lo que resulta terriblemente molesto.

Además, tampoco se tiene muy en cuenta quién está viendo qué y los anuncios se repiten de forma masiva y recurrente, lo que resulta cansador para el espectador y, al final, desgasta a la marca que se está anunciando.