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Recrudece la guerra del "canuto": octubre apunta a ser el peor mes en ventas de 0Km en dos años

ProCreAuto Fase II se lanzó en medio del fuego cruzado entre la Presidenta y directivos de automotrices. Cifras de un mes clave 
17/10/2014 - 10:05hs
Recrudece la guerra del "canuto": octubre apunta a ser el peor mes en ventas de 0Km en dos años

Con un ProCreAuto fase II que recién está arrancando, luego de más de 20 días de demoras desde su anuncio oficial hasta su implementación, octubre va camino a convertirse en un gran dolor de cabeza para la ministra Débora Giorgi y en uno de los meses más flojos para la industria automotriz.

En medio de una guerra cruzada con el Gobierno, todos los jugadores del sector advierten sobre el pésimo escenario que están atravesando y que podría agravarse en el corto plazo, en un marco signado por la escasez de dólares.

Los dueños de concesionarios se quejan de que, por falta de stock, es imposible lograr una recuperación de las ventas, situación que está forzando al cierre de más agencias y a la destrucción de puestos de trabajo. Por lo bajo, apuntan contra las terminales, que no estarían cumpliendo con las entregas.

Las automotrices, en tanto, advierten que por la falta de divisas tuvieron que disminuir o directamente anular las importaciones de vehículos terminados, que llegan en mayor medida desde Brasil. También, disparan contra el Banco Central, dado que el cupo de dólares que les están autorizando no alcanza para traer autopartes y cumplir con los planes de producción.

El Gobierno, por su parte, sigue acusando tanto a concesionarios como a terminales de estar stockeando autos -especulando con un futuro salto del tipo de cambio- y de estar boicoteando el plan oficial que permite financiar la compra de un 0Km hasta en 60 cuotas.

En esta guerra del tipo "todos contra todos" y con un ProCreAuto fase II que no sólo se demoró en poner primera, sino que además hizo su debut con precios más elevados, la mitad de versiones y menos marcas que en su primera etapa, los patentamientos en lo que va de octubre están mostrando su peor cara.

De acuerdo con datos anticipados por la Asociación de Concesionarios (ACARA) a iProfesional, el promedio diario de ventas durante las dos primeras semanas del mes, acumula una caída cercana al 15% respecto a septiembre pasado.

Con estas perspectivas en carpeta, desde la entidad señalaron que están proyectando un octubre con menos de 50.000 unidades patentadas. De acuerdo con el ritmo de comercialización, "estimamos que serán unos 48.000 vehículos", destacaron. 

Desde ACARA prefieren no trazar comparativos con 2013. El argumento que esgrimen es que se trató de un año en el que se rompieron todos los moldes y se batieron todos los récords.

Sin embargo, no deja de ser relevante que -de confirmarse las 48.000 unidades vendidas para este mes-, esto implicaría un derrumbe de casi 50% respecto a octubre de 2013 (ver gráfico).

Si bien es cierto que a partir de esta época históricamente comienza a declinar el ritmo de ventas, debido a que los compradores prefieren esperar hasta enero y patentar un vehículo "más nuevo", no es menor el detalle de que octubre se encamina a ser el peor mes en casi dos años.

En efecto, habría que retrotraerse hasta diciembre de 2012 para encontrar un nivel más bajo de patentamientos que el que ACARA proyecta para este mes en curso.

Año negro para casi todas las marcas

Al analizar el ranking de alzas y bajas, prácticamente ninguna automotriz está logrando capear el temporal.

Salvo Toyota, gracias a la buena demanda que logró con su entry level Etios, el resto de las marcas está trabajando con tasas negativas desde que arrancó el año.

Entre las más perjudicadas por el combo que conjuga disparada de precios, impuestazo, caída del poder adquisitivo y falta de dólares para importaciones, hay once automotrices que registran desplomes superiores al 60%.

Las más golpeadas son BMW (-85%), Audi (-84%), Subaru (-80%), Dodge (-79%) y Alfa Romeo (-77%), entre otras.

Entre las generalistas, si bien el panorama no es tan dramático como el que se plantea para las marcas de lujo, la situación no deja de ser preocupante: Chevrolet encabeza las caídas, con un derrumbe del 36%. Le siguen Renault (-32%), Volkswagen (-31%), Citroën (-29%) y Peugeot (-27%), entre otras (ver cuadro).

¿Faltan autos?

El empeoramiento de las perspectivas económicas -que deriva en consumidores más cautelosos-, sumado a la pérdida de poder adquisitivo en términos relativos, están impactando en el ritmo de ventas.

No es menor el dato de que en la actualidad pasaron a requerirse de 11 ingresos promedio para poder subirse a uno de los modelos más económicos del mercado, cuando hasta el año pasado se requerían menos de 9 salarios, marcando así el primer cambio de tendencia ocurrido en los últimos diez años (ver cuadro). 

Pero también hay otra realidad concreta que afecta al negocio: en los concesionarios faltan autos.

De hecho, esta situación de supuesto "encanutamiento" la denunció desde la propia presidenta Cristina Kichner, hasta la ministra Giorgi, pasando por el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich.

Incluso, el secretario general de ACARA, Rubén Beato, confirmó a iProfesional que se está dando un dramático achicamiento del stock de unidades en poder de los concesionarios, lo que está obligando a las agencias a rechazar clientes.

"Ya se consumieron 40.000 vehículos del inventario, lo cual es una grave señal porque los puntos de venta no pueden quedarse sin unidades. Esto deriva en que, en muchos casos, se estén suspendiendo las ventas", sostuvo el directivo.

A la hora de señalar las causas, Beato advirtió que la falta de stock se da "tanto en los vehículos que vienen de Brasil, por la imposibilidad de las automotrices para cumplir con los pagos en dólares, como así también entre los fabricados en la Argentina, porque las terminales tienen los mismos problemas para comprar autopartes".

En un recorrido por agencias oficiales de diversas marcas, iProfesional pudo comprobar que los faltantes están a la orden del día, especialmente cuando se trata de modelos producidos en el país vecino, muchos de los cuales ocupan los primeros puestos en ventas en el plano local. 

En el caso de Renault, según las consultas realizadas en cinco puntos de venta de la Ciudad de Buenos Aires, directamente no hay entregas programadas para el Sandero hasta el 2015.

En cuanto al Clio Mio, fabricado en Córdoba y que participa con dos versiones en el ProCreAuto fase II, recién habrá disponibilidad en diciembre.

En el caso de Chevrolet, uno de las principales faltantes se da con Tracker, la SUV del segmento chico.

Si bien es un hecho que faltan unidades, el debate actual es por qué: las automotrices se escudan en la falta de acceso a los dólares para importar autos y componentes. 

Al respecto, argumentan que los u$s100 millones habilitados por mes por el BCRA no son suficientes. En 2013, se destinaron cerca de u$s700 millones promedio cada 30 días para la compra de autopartes en el exterior.

Si bien es cierto que se trató de un año récord y ahora la demanda es menor, la diferencia es de siete veces, con lo cual, evidentemente los dólares no están alcanzando para contar con partes y piezas en tiempo y forma.

Paralelamente, las terminales aseguran que no es posible guardar indefinidamente determinados modelos, dado que esto implicaría quedarse con un sobrestock de versiones que suelen reemplazarse cuando se inicia un nuevo año.

De este modo, argumentan que podrían producirse desfasajes entre un inventario que queda "viejo" y los planes de producción, fijados de antemano.

Sin embargo, en el Gobierno están convencidos de que las automotrices están "encanutando" vehículos y especulando con un salto del tipo de cambio. Es por eso que, en el marco del reciente lanzamiento de la fase II del plan oficial, el secretario de Comercio Interior, Augusto Costa, anticipó que iba a haber fiscalizaciones para controlar que no haya movimientos especulativos.

Si bien es cierto que el ritmo de importaciones se achicó por falta de dólares -Renault y GM, de hecho, anunciaron que frenaron la compra de determinados modelos brasileños- y que esto está pegando de lleno en el nivel de stock, también es verdad que algunas marcas, especialmente las de alta gama, no están cómodas con el actual valor del dólar.

En este sentido, el gerente de ventas de una agencia oficial de una automotriz premium de origen europeo, confió bajo estricto off the record que la orden es la de "regular" las ventas. 

Según explicó, hay agencias que están comercializando vehículos como para hacerse de cash y así poder bancar los costos fijos.

Pero, en momentos en que hay consultoras que están proyectando un billete verde a más de $10 para fin de año, los empresarios temen desprenderse de modelos en los que hay un muy bajo nivel de stock -por los cuales reciben pesos y al tipo de cambio oficial-.

El miedo es que, al querer reponerlos, se encuentren con que una eventual  devaluación les consuma toda la rentabilidad o, peor incluso, que directamente hayan trabajado a pérdida.

Flojo 2014... ¿peor 2015?Bajo la óptica del economista Gonzalo Dalmasso, de Abeceb, las perspectivas se han deteriorado considerablemente en los últimos meses: "La complicación del litigio con los holdouts y el alejamiento del acceso a los mercados internacionales de crédito, además de la fuerte caída del precio de la soja que reduce la entrada de dólares, auguran mayores complicaciones en el frente externo".

Además, consideró que "el aumento del déficit público no contribuye a impulsar al sector automotriz, sino que más bien agrega inestabilidad e incertidumbre". 

Así las cosas, según Dalmasso, "para dejar atrás la crisis, el sector no necesita créditos públicos. Requiere dólares".

De esta manera, las intenciones del Gobierno de incentivar el consumo privado en un contexto recesivo, se enfrentan con la cruda realidad de la falta de divisas.

En este escenario, la fase II del plan oficial, con menos empresas y modelos involucrados y sin autos de origen brasileño, como se barajaba en un principio, poco podrá ayudar para traccionar ventas. El siguiente cuadro muestra los modelos que participan de la iniciativa del Gobierno en su segunda etapa:

Así, ya en la recta final del año y en un período en la cual estacionalmente se registran los menores niveles de patentamientos, desde Abeceb ajustaron las proyecciones a la baja y ahora estiman que 2014 cerrará con 685.000 unidades vendidas. 

De concretarse esta cifra, esto implicará que el mercado se achicará en 270.000 unidades respecto de 2013 (caída del casi el 30%), tocándose además el registro más bajo desde el año 2010.

Desde Abeceb alertan que, de no resolverse el conflicto con los holdouts y de no abrirse el acceso al crédito internacional, la falta de divisas le pondrá un techo más bajo a la industria automotriz para 2015.

Así, lejos de prever una recuperación, estiman que el año próximo las ventas de este sector, que supo ser la "locomotora" del Made in Argentina y emblema del modelo K, acompañarán el último año del mandato de Cristina con una caída del 10 por ciento. 

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