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Game over: en el último mes, las ventas de 0km tocan su peor registro en cinco años

Con un cierre de año tan flojo, se espera un pobre "efecto arrastre" para enero, un mes que debería ser récord. Expectativa por cambios en el impuesto
19/12/2014 - 14:10hs
Game over: en el último mes, las ventas de 0km tocan su peor registro en cinco años

Para las automotrices y concesionarias, el 2014 ya está jugado. Y el balance, por cierto, no es el más positivo. 

Si bien en los despachos se suele repetir que el récord de ventas de 2013 era una situación inédita, dado que el mercado se encontraba "recalentado" (por la brecha cambiaria y los precios retrasados de los autos frente a la inflación), en general, todos esperaban un mejor cierre de 2014.

Sucede que, a inicios del segundo semestre, la industria apuntaba a una lenta y paulatina recuperación, luego del sacudón que había impactado en el negocio, allá por enero.

Las expectativas estaban puestas en una estabilización de los precios de los 0Km y en el empuje que podía llegar a generar el plan ProCreAuto, en cualquiera de sus dos versiones.

Sin embargo, los problemas burocráticos y la falta de stock, terminaron condenando la iniciativa oficial. Según el Banco Nación, ya se gestionaron más de 40.000 solicitudes de préstamos por un valor superior a los $3.300 millones.

Pese a lo positivo de estos números, la realidad es que un importante porcentaje de las unidades todavía no aparecen. 

"Si los autos se hubieran entregado en tiempo y forma, las cifras de noviembre hubiesen sido muy buenas", se lamentó Rubén Beato, presidente de la Asociación de Concesionarios (ACARA).

Así, el mes pasado estuvo lejos de ser bueno: los patentamientos se derrumbaron casi 38% y se profundizó la crisis para un sector que aspiraba a entrar en una senda de estabilidad, con un piso de caídas menor al 30 por ciento.

Para empañar aun más el cierre de año, los datos anticipados de diciembre marcan un deterioro aun mayor en el ritmo de comercialización.

Según datos de ACARA, a los que accedió iProfesional, en las dos primeras semanas se comercializaron unas 15.500 unidades, lo que marcó un desplome del 40% respecto del mismo período de 2013.

El dato más relevante es que el segmento que viene liderando los derrumbes es, justamente, el de los autos, con una fuerte caída del 45%. En tanto, otras categorías, como los comerciales livianos y pesados registran bajas menores. 

Si bien diciembre es un mes tradicionalmente flojo para el sector, dado que muchos compradores prefieren posponer la operación hasta enero y así "ganarle" un año al vehículo una vez que se patenta, en el sector preocupa un nivel tan bajo de ventas como el actual. 

De acuerdo con los datos provistos por la entidad, los concesionarios apuntan a vender unas 25.000 unidades a lo largo de diciembre, una cifra muy magra frente a las casi 50.000 que se habían logrado patentar al cierre del año pasado.

Además, de no mediar cambios, este número se ubicará por debajo del registro del 2010, cuando las ventas alcanzaron las 37.000 unidades.

Para encontrar un resultado similar hay que remontarse a diciembre de 2009, momento en el que fueron patentados 23.400 0Km.

Cabe recordar que ese pobre registro había sido consecuencia del momento de crisis que atravesaba la industria y la economía argentina en general, como consecuencia del crac financiero.

El otro problema que afecta a las terminales está dado por las limitaciones a las importaciones por falta de dólares, que complicó el ingreso de vehículos y de autopartes principalmente desde Brasil, el mayor proveedor del mercado argentino. 

Para los directivos de concesionarios, en general, se perdieron muchas oportunidades para apuntalar las ventas por la falta de entregas.

Esto llevó a que las agencias fueran consumiendo su propio stock, perdiendo 40.000 unidades en el año por las largas demoras registradas en las terminales

En diálogo con iProfesional, Alberto Príncipe, presidente de la Cámara del Comercio Automotor (CCA), afirmó que "los problemas por la lentitud en el ritmo de entregas de unidades son reales".

"La situación, para algunas marcas sigue igual. En otros casos incluso han empeorado. Todo está vinculado con los inconvenientes que tuvieron las automotrices por la falta de insumos debido a la escasez de dólares", recalcó el directivo.

¿Un 2015 más flojo?

Hasta el 15 de diciembre, se llevaban patentados unos 670.000 vehículos

Así, se prevé que en todo el año el mercado totalice ventas por 685.000 unidades, lo que implicaría una fuerte caída de casi 30% respecto del 2013.

Cabe recordar que, hace algunas semanas, el presidente de Fiat Argentina, Cristiano Rattazzi, había afirmado que "este año está entre los tres mejores de la historia".

Sin embargo, las estadísticas no dicen eso: con este nivel de ventas, el 2014 finalizará como el cuarto mejor período. Además, considerando variables como producción y exportaciones, entonces éste sería el quinto mejor año. 

Para Guillermo Dietrich, CEO de la red de concesionarios oficiales VW y Ford que llevan su nombre, "no es un número muy malo, pero no hay que perder de perspectiva que, como tenemos un parque automotor de 10 millones de unidades, en realidad deberíamos estar comercializando 1 millón de 0Km anuales".

Según el empresario, "un mercado sano y que funciona bien tendría que renovar la totalidad del parque cada 10 años. Pero con cifras por debajo de las 700.000 unidades, como la de este 2014, esta meta claramente está muy lejos de poder lograrse".

El problema, agregan desde el sector, es que el nivel de patentamientos esperado para el año próximo podría ser incluso más bajo que el de éste que está por concluir.

"En 2015, el volumen de ventas va a ser bastante menor", anticipó Príncipe.

¿La razón? Según el directivo, "en el mes de diciembre de 2013, previendo dificultades, los clientes comenzaron a cerrar operaciones de compra que finalmente se vieron plasmadas en enero, que fue muy positivo".

"Este diciembre, en cambio, no se está viendo ese mismo ritmo, así que sin un número de patentamientos tan elevado en enero próximo, va a ser difícil alcanzar las 685.000 que se lograron este año", apuntó Príncipe.

Cabe destacar que en enero de 2014, la industria había logrado comercializar cerca de 110.000 unidades. Es decir que cerca del 20% de las ventas de todo este año se condensaron en esos 30 días. 

Sin embargo, para el arranque de 2015, los empresarios descartan que el nivel de patentamientos pueda alcanzar los seis dígitos.

El fantasma de los dólares

Gonzalo Dalmasso, economista de Abeceb, destacó que "2014 fue un año difícil pero pudo haber sido incluso peor porque gran parte de los autos que fueron llegando del exterior se trajeron con endeudamiento del sector privado".

El experto así hizo referencia al "pasivo" de más de u$s2.500 millones que las terminales locales mantienen con otras filiales, dadas las restricciones que impuso el Banco Central a la hora de habilitar dólares para el pago de importaciones.

"Esto complica las perspectivas para el año próximo. Porque las casas matrices van a estar mucho menos predispuestas a seguir dándole crédito a las terminales de la Argentina, lo que podría resentir aun más el nivel de stock", sostuvo Dalmasso.

En función de estas restricciones, el economista estimó que los patentamientos en 2015 podrían caer hasta los 630.000 frente a los 685.000 previstos para este año.

"La evolución de la industria depende de la cantidad de dólares disponibles para importar", confirmó Rubén Beato, secretario de ACARA.

En tanto, bajo la óptica de Dietrich, "el piso para 2015 es de 600.000 unidades. Para que las proyecciones mejoren, entonces, además de dólares, va a hacer falta otra cosa: que en los próximos meses haya mayor seguridad laboral. Con buenas perspectivas de empleo por delante, entonces la cifra podría subir".

Palpitando cambios en el impuestazo El impuesto interno a los 0Km no sólo "barrió" con numerosos modelos, que debieron discontinuarse por haber sufrido una disparada de precios, sino que también afectó negativamente la rentabilidad de las automotrices.

Según un informe de Abeceb, "actualmente existen 82 versiones que se acumulan en el rango de entre $230.000 y $242.000 para evitar caer en el tributo".

En buen romance, las automotrices se vieron obligadas a congelar precios y resignar rentabilidad, porque de pasar el valor tope fijado por el Gobierno, entonces estos modelos sufrirían el golpe del impuesto y quedarían fuera del radar de los compradores.

Según la consultora, "el mercado de los autos premium es el de mayor rentabilidad", de modo que su derrumbe "impactó significativamente en las ecuaciones de las terminales y de los concesionarios".

Además, afectó la comercialización de modelos nacionales, como fue el caso de la Toyota SW4 o las versiones tope de gama del Citroën C4 Lounge o del Ford Focus.

Incluso, de persistir el tributo, también terminará complicando a modelos nacionales que están próximos a hacer su debut en el mercado, como es el caso de la Mercedes Benz Vito en su versión para pasajeros. La marca ya avisó que, si no hay modificaciones, entonces sólo se destinará a los mercados externos.

En este contexto, tal como diera cuenta iProfesional, la administración kirchnerista ya tiene decidido subir un 25% el piso a partir del cual los vehículos comercializados en el mercado interno son alcanzados por el impuestazocon el consecuente impacto en el precio final. 

Mientras que hasta ahora vienen siendo castigados con la alícuota del 30% todos aquellos modelos que salen de fábrica por encima de los $170.000, con la modificación que anunciará en breve el Gobierno, dicho tributo comenzará a correr cuando la unidad supere los $212.500 (de fábrica).

En tanto, la alícuota más elevada -la del 50%, que actualmente afecta a los de más de $210.000-, podría pasar a alcanzar sólo a las unidades que, de línea de producción, superen los $262.600.

Para los empresarios consultados, esta medida es positiva dado que, de no adecuarse los pisos, habrá cada vez más modelos que irán cayendo dentro del tributo, afectando aun más el ritmo de ventas.

Sin embargo, advierten que esta medida, por sí sola, no será suficiente para revertir la crisis. Sucede que las terminales en los últimos meses venían posponiendo aumentos de precios para evitar, justamente, que sus vehículos se vean alcanzados por el impuestazo.

Se espera que, una vez que se modifiquen los pisos a partir de los cuales se aplican las distintas alícuotas, haya un "sinceramiento" de precios en el mercado interno, dado que los cambios que planea el Gobierno les darán más margen para actualizar valores.

El problema, advierten, es que la propia inercia inflacionaria volvería la situación a "foja cero" en cuestión de meses.

Para Dietrich, "la única solución sería suprimir el impuesto definitivamente, porque quedó demostrado que no sirvió para nada, sólo para achicar el mercado".

Las claves para entender lo que viene en 2015, bajo la óptica de Dalmasso, pasan por dos aspectos: primero, que las compañías cuenten con dólares para "bancar" importaciones de vehículos y de autopartes. Y segundo, que no haya otra devaluación brusca que encarezca aun más los precios de los 0Km respecto de los salarios, como sucedió en enero. 

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