Boom de ventas y lanzamientos de nuevos modelos. Restylings, ediciones especiales y creación de nichos de mercado que rápidamente conquistaron clientes. 

Así era la dinámica imperante hasta 2013 para el mercado automotriz, el gran símbolo del modelo K, con un récord de ventas que incluso hacía soñar con cruzar las frontera del millón de unidades. 

Sin embargo, en 2014 todos los planes que se habían trazado finalmente fueron tirados por la borda. 

Las condiciones de la industria automotriz cambiaron y el nivel de patentamientos quedó muy lejos de las proyecciones trazadas, de la mano de una caída cercana al 30%. Traducido en números concretos, el mercado se achicó en más de 270.000 unidades.  

Sin embargo, los resultados no fueron iguales para todos los jugadores. De hecho, hubo marcas y segmentos que se posicionaron en un lugar de privilegio, habiendo logrado incluso concluir un fatídico 2014 con tasas positivas en el nivel de ventas. 

En este lugar destacado se ubicaron las pick-ups y los vehículos comerciales, que definitivamente se consagraron como las grandes ganadoras del año. 

Si bien el segmento experimentó una baja del 17%, esta caída fue motivo de festejo si se tiene en cuenta que la categoría de autos de alta gama sufrió un derrumbe histórico de más del 70%, o que el mercado en general se desplomó 31%. 

Las "chatas", grandes estrellasA la hora de analizar por qué el segmento de los vehículos comerciales livianos es el que en los últimos meses sufrió las menores caídas, hay una variable determinante en su evolución.

Sucede que, por ser vehículos destinados al trabajo, no fueron impactado por el impuesto interno, si bien es cierto que el precio también se elevó por la inflación.

La contracara fueron las 4x4, especialmente las importadas, que sí se vieron duramente golpeadas por el tributo, lo que derivó en un derrumbe en el nivel de ventas. 

Este encarecimiento de precios provocó un corrimiento de la demanda, dado que muchos compradores que se vieron imposibilitados de acceder a una 4x4, terminaron volcándose por una pick up. 

Al trazar un análisis por marcas, la Hilux de Toyota se vuelve a posicionar como la camioneta más vendida de la Argentina. Durante los últimos doce meses acumuló casi 27.700 unidades patentadas, con un incremento cercano al 1% respecto del mismo período anterior. 

La Amarok de Volkswagen, en tanto, concluyó el 2014 en el segundo lugar -compartiendo lugar con la Ford Ranger-, tras lograr un crecimiento en ventas del 5%, con un acumulado de 16.500 unidades.

La "chata" de Ford, en tanto, compartió el mismo escalón con igual nivel de ventas, si bien sufrió una  con más de 15.500 pick ups comercializadas, si bien sufrió una caída de 19% en comparación con el mismo período de 2013. 

Cabe recalcar que, dentro del segmento, la pick up RAM fue una de las que descolló, de la mano de un salto del 600% en el nivel de patentamientos.

Pese a que su participación en el mercado aun es pequeña (entre enero y diciembre apenas superó las 1.200 camionetas vendidas), 2014 significó, sin dudas, un punto de inflexión para la marca en el mercado local. 

RAM, que funciona bajo el paraguas del grupo Fiat Chrysler Automobiles, fue relanzada en la Argentina de manera escalonada.

En septiembre de 2013, había sido puesta a la venta la versión 1500 naftera. En mayo del año pasado, en tanto, se presentó la 2500 turbodiesel. Finalmente, en junio último, tuvo lugar el lanzamiento oficial de la marca en el país. 

Los perdedoresEl segmento que más viene resignando ventas es el de los automóviles, con una baja del 30%. 

Pese al contexto de menor poder de compra que afectó los argentinos, los autos económicos no sólo no crecieron sino que fueron los que más cayeron después de los del segmento de alta gama. 

Al analizar el podio, se observa que el VW Gol nuevamente se consolidó como el 0Km más vendido, pese a haber sufrido un desplome de más del 40% a lo largo del año pasado. 

Un factor clave que sirve para explicar esta dura caída -tanto de este como de otros modelos-, está en los problemas que la industria en general tuvo para acceder a dólares y así costear operaciones de importación. 

En el caso del Gol, que proviene de Brasil, los volúmenes ingresados por Aduana se derrumbaron casi 60%, lo que afectó los niveles de stock. 

Renault, en tanto, ocupó el segundo lugar con el Clio Mio, que durante los últimos doce meses sufrió una caída de casi 20%, con 6.500 unidades menos. 

A pesar de que este modelo formó parte de las dos ediciones del Plan ProCreAuto, las ventas nunca despegaron. Por el contrario, 2014 significó un mal añopara este vehículo entry level

En el tercer puesto, en tanto, se ubicó el Fiat Palio. Este vehículo fue una de las grandes excepciones, dado que concluyó el año pasado con un incremento en las ventas del orden del 19%.  

Otro modelo que durante largo tiempo supo ubicarse en la cúspide como uno de los autos más exitosos pero que ahora atraviesa momentos difíciles, es el Classic, de General Motors. 

En 2014 el mercado definitivamente no estuvo de su lado. Al igual que en el caso del Clio Mio, haber participado del plan oficial de 60 cuotas no redundó en grandes beneficios, dado que el Classic cerró el año con un derrumbe de más del 30%. 

Dentro del portfolio de GM, peor le fue al Agile, que durante un buen tiempo supo ubicarse en el top 10 entre los más vendidos, pero ahora está a punto de quedar fuera de listado de los 20 primeros, tras haber sufrido un desplome cercano al 50%. 

En la pulseada entre marcas, una de las grandes excepciones fue Toyota, de la mano de su modelo Etios que, a poco de haberlo lanzado, logró posicionarse entre los 10 más comercializados del país.

Su crecimiento, por cierto, fue explosivo, con un alza de más del 600% en 2014, si bien es necesario aclarar que esta tasa de variación responde a que este vehículo recién había llegado al mercado a fines de 2013. 

En el caso de los medianos, tampoco fue un buen año para las automotrices. Cabe recordar que en 2013 había sido uno de los segmentos protagonistas del negocio, consecuencia de una demanda pujante. 

Sin embargo, en 2014 el mercado de los medianos experimentó un fuerte retroceso, con una caída general para la categoría cercana al 30%.

A la hora de trazar una radiografía por modelo se observa la mala performance de, por ejemplo, el Volkswagen Vento, cuyas ventas se desplomaron casi 50%, en gran medida por los problemas para acceder a las divisas.

De hecho, según datos de Aduana, entre enero y octubre habían entrado al país menos de 3.000 unidades, lo que implicó una caída estrepitosa de casi 70% en el nivel de importaciones. 

Pero no sólo los modelos importados de marcas generalistas sufrieron por el achicamiento de la demanda.

En el caso del Peugeot 408, producido por la marca del león en la Argentina, la caída en ventas también se hizo sentir: durante los últimos doce meses se patentaron apenas 6.200 unidades, con una baja del 42% respecto al mismo período del año pasado. 

El Renault Fluence, también de fabricación nacional, fue otro de los medianos que no logró escapar de la tendencia negativa, acumulando una contracción del 34%, que lo hizo descender al puesto 28. 

Cabe destacar que estos últimos dos modelos corrieron la misma suerte pese a haber formado parte del ProCreAuto.  

En el segmento de los vehículos grandes, aquellos pertenecientes a marcas masivas también se vieron duramente golpeados por el impuesto y por la falta de dólares. 

Modelos como el Volkswagen Passat incrementaron su valor hasta los casi $900.000, y sus ventas prácticamente se redujeron a cero. Esto llevó a que la automotriz, según registros de Aduana a los que accedió iProfesional, haya importado una sola unidad hasta octubre de 2014, frente a las casi 1.100 del 2013. 

El Ford Mondeo fue otro de los que sufrió un fuerte aumento de precios y quedó en "stand by". Por eso, la marca del óvalo, de acuerdo con los últimos datos oficiales disponibles, decidió ingresar al país menos de 50 autos en 2014. 

Los importadosSegún Abeceb, el impuestazo en primer lugar (que encareció el precio de las unidades del segmento Premium en casi 125%), sumado a la devaluación de enero (que disparó los valores en pesos) provocó prácticamente la "eliminación" de este nicho de mercado.

Así es como para la mayoría de estas firmas, 2014 fue el peor año en materia de ventas en más de una década.

Si se analiza el nivel de patentamientos, se observa que compañías de renombre como Mercedes Benz, BMW, Volvo y Subaru concluyeron el peor período en patentamientos desde 2003.

En el caso de Audi, Mitsubishi y Porsche, hay que retrotraerse hasta el 2004 para encontrar registros de ventas más bajos.

El otro pelotón estuvo conformado por Hyundai, Jeep y Mini Cooper. En esos tres casos, recién en 2005 se encuentran marcas más flojas que las del fatídico 2014.

En definitiva, todo este negocio se achicó hasta alcanzar una dimensión similar a la que tenía cuando el país recién estaba dando sus primeros pasos tras la megacrisis de 2001.

Para este 2015, las perspectivas no lucen muy optimistas: en el caso del mercado interno, tanto desde Abeceb como desde la Cámara del Comercio Automotor, prevén una leve caída en el nivel de patentamientos respecto de 2014.

Esto, básicamente porque en diciembre de 2013 se había dado un "boom" de reservas por parte de particulares que preveían un salto del dólar. Y estas operaciones se terminaron plasmando en las estadísticas de enero de 2014.

Como contrapartida, diciembre último vino flojo y no dejó un gran "efecto arrastre" para este arranque del 2015. Por el contrario, se prevé un desplome de más del 30% respecto a enero de 2014. 

Además, los recientes cambios en el impuestazo realizados por el Gobierno, que elevó el piso a partir del cual los vehículos se ven alcanzados por el tributo, no hizo más que alentar subas de precios, especialmente de aquellos modelos que estaban al filo del "golpe impositivo".