La procuradora general de la Nación, Alejandra Gils Carbó, decidió a último momento ir al velatorio del fiscal Alberto Nisman y la pasó mal: recibió insultos y hasta le destrozaron la corona de flores que había mandado para despedir los restos del funcionario judicial.

Cuando las personas que se acercaron a dar el último adiós al fiscal especial del caso AMIA notaron la presencia de la funcionaria, comenzaron a insultarla e incluso patearon el auto que la transportaba.

Pero este no fue el único episodio que sufrió Gils Carbó el miércoles.

Durante la tarde, los participantes de la ceremonia para darle el último adiós a Nisman se sobresaltaron con una especie de pelea que había a media cuadra de la casa velatoria.

La disputa no era entre personas, sino de algunos hombres que que se habían acercado al velatorio contra la corona de flores enviada por la procuradora.

En un primer momento, un hombre se acercó al personal que transportaba la ofrenda floral y arrancó el cartel del Ministerio Público Fiscal de la Nación. Luego, los restos de la corona fueron pisoteados por otras personas. Minutos después, la calma volvió al lugar, que es fuertemente custodiado por personal de la Policía Federal.

Una de las primeras en llegar fue Sara Garfunkel, la madre del fiscal. La mujer ingresó en un automóvil, por la esquina de la calle Congreso, y se tapó el rostro para evitar las fotografías. 

También se acercó el embajador de los Estados Unidos, Noah Mamet, el ministro de Justicia y Seguridad porteño, Guillermo Montenegro y los principales dirigentes de la comunidad judía.

En la zona hay un fuerte operativo policial y está cortado el tránsito de la calle O'Higgins, entre Quesada y Congreso.

El fiscal Nisman fue hallado muerto con un tiro en la cabeza en su departamento del Le Parc de Puerto Madero el lunes 18 de enero, un día antes de que tuviera que presentarse ante el Congreso para ampliar su denuncia contra la presidenta Cristina Kirchner por "encubrimiento" en el atentado a la mutual judía AMIA en el que murieron 84 personas en 1994.