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Moyano y Micheli analizan sumarse al paro nacional del 31 de marzo

La CGT y la CTA opositoras evaluarán esta tarde si participan de la huelga convocada por los gremios del transporte en rechazo del Impuesto a las Ganancias
03/03/2015 - 11:12hs
Moyano y Micheli analizan sumarse al paro nacional del 31 de marzo

La CGT de Hugo Moyano y la CTA de Pablo Micheli reúnen a sus tropas para definir si se suman al paro nacional del 31 de marzo convocado por los gremios del transporte y le dan poder de fuego a la medida de fuerza para reclamar por el Impuesto a las Ganancias.

El camionero reunirá esta tarde el consejo directivo de su central obrera. En su entorno dieron por hecho que los sindicatos que le responden y que no pertenecen al ámbito del transporte votarán por sumarse a la huelga de la actividad. El propio Moyano ya estaba involucrado en la medida de fuerza de los transportistas a través de su sindicato, en una acción coordinada con los colectiveros de la UTA y los ferroviarios de La Fraternidad, entre otras organizaciones.

La duda que subsiste en todas las agrupaciones sindicales es si el paro del 31 será cumplido por sus convocantes originales, informó Ambito Financiero. Es que la medida fue resuelta a mediados de febrero con el propósito de darle tiempo al Gobierno a negociar un sendero para las paritarias del sector, y de paso una respuesta por Ganancias.

Esa incertidumbre hacía titubear hasta anoche a los jefes gremiales que acompañan a Luis Barrionuevo en la CGT Azul y Blanca. Habitual fogonero de protestas nacionales, el gastronómico y sus aliados temen dar un paso en falso si adhieren a una huelga que termina por ser levantada por sus organizadores primigenios.

Otra organización que se debate qué hacer es la CTA de Micheli. La central opositora convocó a su propia jornada de protesta contra el Gobierno para el 17 de marzo, con paros y movilizaciones, y con un temario que abarca desde "la inmediata apertura del Consejo del Salario" para fijar un piso de $12.000, la "derogación del impuesto al salario", la aplicación del 82% móvil para todos los jubilados, el "cese de los despidos y suspensiones" y la "derogación de la ley antiterrorista".

"Si me preguntan, no tengo dudas de que tenemos que ir a una huelga nacional", dijo al matutino, Gerónimo "Momo" Venegas, líder de los peones rurales de UATRE.

En todo el arco opositor quedó en suspenso un paro a fin de año, que fue levantado luego que Cristina Kirchner denunciara maniobras "desestabilizadoras" por parte de los gremios opositores y anunciara la exención en el pago de Ganancias de la segunda cuota del aguinaldo, como un gesto hacia las centrales obreras. 

Pero en este caso, ni los gremios más alejados del Gobierno ni los más afines esperan novedades sobre el impuesto. Al menos, no lo esperan hasta después de mitad de año.  Y esa única certeza le da más chances al paro de ser cumplido.

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