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Pidió en Facebook "un tiro en la nuca" a Estela Carlotto y a Hebe Bonafini y lo procesaron

Se trata de un médico que afirmó que las referentes de los DDHH "tendrían que haber sido torturadas y luego ejecutadas". Lo acusan de apología del delito
01/04/2015 - 21:54hs
Pidió en Facebook "un tiro en la nuca" a Estela Carlotto y a Hebe Bonafini y lo procesaron

El Juzgado Federal de Esquel informó el lunes que procesó al médico forense Daniel Oscar Roo (48), por sugerir en Facebook que Estela de Carlotto y Hebe de Bonafini, titulares de Abuelas y Madres de Plaza de Mayo, debieron ser "torturadas" y asesinadas de "un tiro en la nuca".

El forense, que también es funcionario público al pertenecer al Poder Judicial de Chubut, quedó procesado por la figura de apología al delito, que regula el artículo 213 del Código Penal, según indicó Infobae.

El 6 de agosto pasado, Roo publicó en su muro de Facebook un temerario y violento mensaje destinado contra las dos referentes de las organizaciones de defensa de los Derechos Humanos. Lo hizo cuando se conoció la recuperación de la identidad de Ignacio Guido Montoya Carlotto, nieto de la titular de Abuelas de Plaza de Mayo.

El juez federal Guido Otranto precisó que el contenido de la publicación fue el siguiente: "Bue desde radio insania se informa, cómo puede haber gente que esté feliz, porque esta chicha Carloto encontró a su nieto. No hubiese sido mejor que eduque a su hija, en su momento, de la manera correcta, para que no pase lo que le paso? Realmente no me causa ningún tipo de emoción que esta chica halla encontrado a su nieto. Creo que esta mujer junto con otras más, como la bonafini tendrían que haber sido torturadas y luego ejecutadas con un tiro en la nuca, No son buenos seres humanos, son seres malignos, poseen mucha maldad y resentimiento. Besos a la gente linda. El Gato (sic)".

La División de Delitos Tecnológicos de la Policía Federal Argentina comprobó que el médico se había conectado a su cuenta de Facebook desde su computadora personal el 6 de agosto cuatro veces, desde su domicilio de calle San Martín.

La testigo María Cecilia Bagnato declaró que su compañero de trabajo, Aramiz Ventura, le preguntó si había visto la publicación. "Le sorprendieron las manifestaciones, en particular que alguien que pertenece al Poder Judicial hiciera públicos esos comentarios en un medio social", se informó.

El comentario generó una discusión de Roo con otros once usuarios de Facebook. "Algunos apoyaban y otros repudiaban", señaló el juez Otranto. El 8 de agosto, un mail difundió el texto en el resto del Poder Judicial, al punto de haber llegado al gremio representativo de los trabajadores. El escándalo no se hizo esperar. Con una hora de diferencia y también por mail, Roo pidió disculpas: había sido todo "una broma" entre sus amigos.

De acuerdo con Infobae, la defensa buscó desinculpar al médico al argumentar que el comentario había sido "privado" y únicamente para sus contactos, por lo que "no se debe confundir con un anuncio público en Internet".

Además, agregó que condenarlo sería afectar su libertad de expresión, privacidad e intimidad. Para entonces, el acusado había recibido la "pena natural" del "estigma que genera haber sido declarado persona no grata por el Concejo Deliberante" de Esquel y la exposición mediática que tuvo.

Sin embargo, las autoridades judiciales comprobaron que el "post" de Roo fue público porque existía la posibilidad de que el destinatario fuera "indeterminado o alguien no personalmente convocado a recibirlo" y que tampoco hubo una humorada detrás del mensaje. Según el juez, el forense tendría que haber modificado las condiciones de privacidad de difusión de sus contenidos.

Además, al afirmar que Estela de Carlotto y de Hebe de Bonafini - referentes de la lucha contra las violaciones a los derechos humanos- también debieron haber sido torturadas y asesinadas, "es posible deducir que se realizó una alabanza, elogio y aprobación del plan sistemático de represión y eliminación de personas". Es por estos motivos que Roo quedó imputado por apología al delito.

Según informó el diario El Jornal de Chubut, el juez federal Guido Otranto fijó un embargo de cinco mil pesos al médico forense de 48 años de edad por considerar que la afirmación "no es una mera expresión de deseo de algo que no sucedió".

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