Emprendedores argentinos captaron en las últimas semanas por separado inversiones para desarrollos propios con los que buscan revolucionar el transporte de personas, con vehículos híbridos y bicicletas eléctricas.

Uno de los proyectos consiste en una solución combinada de software y hardware que mediante la inteligencia artificial decide cuándo utilizar cada motor de una mejor manera.  

Permite que el vehículo se convierta en híbrido, optimizando el consumo de combustible de un 30 por ciento.

Su tecnología abre los caminos de nuevas versiones de movilidad al alcance de cualquier usuario.

El empresario bahiense Leonardo Valente pidió ayuda para construir este automóvil híbrido como parte de su trabajo final en la Singularity University, en el Research Park de la agencia nacional estadounidense para el aeroespacio (NASA) en el Silicon Valley californiano.

La idea consistía en lograr en muy poco tiempo la conversión de un vehículo normal en un híbrido con tracción eléctrica en sus ruedas traseras.

El proyecto incluía la compra de un automóvil, motores y baterías, así como la instalación y pruebas de todo el conjunto, en sólo doce días.

Valente realizó los primeros testeos de este prototipo, que resultaron exitosos. Usando un desarrollo electrónico que permite manejar de manera inteligente el tipo de tracción que impulsa al auto en cada momento, el veterano Hyundai Accent 2004 intervenido para llevar a cabo las pruebas logró desplazarse en las calles internas del Research Park y recargar sus baterías con la energía del frenado del vehículo.

El total invertido sólo en partes fue menor a 2.900 dólares, lo cual avala la idea de que es posible fabricar en masa un kit de conversión por debajo de los 1.500 dólares. 

La inversión conjunta incluyó el auto y muchas herramientas (ningún miembro del equipo es mecánico), lo que hizo que el gasto fuera ampliamente superior.

La campaña de “crowdfunding” en Indiegogo superó ampliamente los 7 mil dólares solicitados. Valente y sus compañeros de equipo, el chileno Christian Henríquez y el mexicano Javier Rincón, evalúan propuestas de inversión y vínculos técnicos para que esta idea pueda seguir adelante. 

“Lo que empezó como una locura, hoy es una realidad que nos asegura que un enfoque práctico y pragmático es la mejor manera de que la revolución de autos verdes llegue a los países en desarrollo”, dijo Valente.

El innovador argentino consiguió clasificarse a la final del certamen de empresas que se disputará en Washington en mayo, gracias a este kit.

Y junto a su empresa Exponential Motor Company, también se clasificó a la final de la Challenge Cup de Startups realizada en México de la mano de la incubadora internacional 1776. 

La competencia reunió 35 nuevas empresas que presentaron sus innovaciones y proyectos en el marco de la energía, educación, salud, transporte y ciudades.

De estas compañías surgieron cuatro finalistas que viajarán a Washington. Entre ellas se encuentran Modebo, Unima, Leaducate y Exponential Motor Company.

Estas empresas competirán con las ganadoras de otras 16 ciudades por un premio de 650 mil dólares.

En marzo de 2014 Valente resultó ganador del Concurso ImpacTec 2, por su desarrollo Social Pos, una plataforma de inclusión no bancaria de comercios barriales al sistema de tarjetas sociales.

Bajo la consigna “una idea tecnológica que beneficie a un millón de argentinos”, este certamen organizado por el Gobierno porteño lo premió con una beca que lo llevó a Singularity University.

También encabeza otros proyectos como Eloda, una plataforma de gestión inteligente de flotas, y Meetit, una herramienta de recursos humanos.

Bicicleta eléctricaEl otro proyecto que captó inversores se llama Gi Bike y es de origen cordobés. Incutex, una compañía que ayuda a construir negocios iniciales (“startups”), anunció que captó un millón de dólares de un grupo de fondos y de la propia empresa, para invertir en la primera ronda de capital externa de esta firma de la provincia mediterránea, creadora de una bicicleta eléctrica innovadora.

Lucas Toledo, Agustín Augustinoy y Eric Sevillia crearon este prototipo de rodado inteligente, antirrobo y plegable en un solo movimiento, con el doble objetivo de implementar un sistema de transporte ecológico, saludable y que al mismo tiempo ayude a resolver el problema de tráfico que sufren las grandes urbes del mundo.

Los fondos de la inversión serán destinados a la finalización del desarrollo técnico de Gi Bike, que incluye software y hardware, avanzar en la producción masiva del equipamiento con una de las fábricas de tecnología más grandes del mundo y al lanzamiento del producto en Europa, Estados Unidos y parte de Asia, según informó Incutex.

Toledo, director general ejecutivo (CEO) de Gi Bike, explicó que cuando crearon el prototipo decidieron “utilizar como proceso de validación una campaña de ‘crowdfunding’ en Kickstarter donde Gi Bike estuvo publicado durante 30 días”.

“Logramos recaudar 116 mil dólares de 180 ‘backers’, más de 300 medios de todo el mundo replicaron a Gi Bike. Durante este proceso, se contactaron con nosotros 5.000 personas queriendo comprar Gi Bike y más de 80 distribuidores de todo el mundo interesados en importarlo en sus respectivos mercados”.

También dijo que están “en contacto con automotrices como BMW y Ford", y recordó que ganaron el premio “Futuro de la movilidad 2014″ de la segunda de esas compañías.

En el siguiente video de la cadena de TV CNN, Sevillia explica el funcionamiento de la Gi Bike:

Expertos de Santex, una empresa de software y socio de Incutex, trabajarán en una solución de alto estándar que permitirá manejar todos los comandos de la bicicleta inteligente desde un "smartphone”.

La aplicación, desarrollada para los sistemas operativos iOS y Android, estará disponible en el mercado a mediados de 2015.

Gi Bike es una bicicleta de aluminio eléctrica, de rodado normal –26”-, inteligente y plegable en un movimiento, y llega a quedar del tamaño de una de sus ruedas.

Cuenta con un diseño y un concepto “todo en uno” que incluye tecnologías como ruedas sin aire (antipinchaduras) o transmisión por correa dentada, sin suciedad ni necesidad de mantenimiento.

Interactúa con el teléfono móvil de forma inalámbrica a través de una aplicación gratuita.

Toledo explicó que la aplicación permite regular los niveles de asistencia del motor eléctrico; comandar las luces de forma manual o automática; activar los frenos regenerativos; chequear los niveles de batería, la velocidad, los tramos recorridos, el impacto ambiental y hasta posee un sistema de seguridad que, "si te alejás más de 10 pasos, se bloquean automáticamente el sistema de frenos”.

Juan Santiago, cofundador de Incutex, explicó que Gi Bike “tiene un gran componente tecnológico, es ecológicamente amigable mientras crea hábitos saludables. Puede hacer una diferencia real en la forma en que la sociedad se relaciona con los espacios urbanos”.

Incutex es una compañía constructora (“company builder”), de origen cordobés, que busca crear negocios de base tecnológica con impacto a largo plazo. Selecciona e invierte en sólo tres o cuatro “startups” por año, lo que permite trabajar más intensamente en la formación de los emprendedores, la consolidación de los equipos y el éxito de los proyectos.

Además, esta firma asume el rol de cofundador junto a los equipos de las “startups”, involucrándose como un socio más. El acompañamiento de cada proyecto es “uno a uno” y es realizado por un grupo de emprendedores experimentados.