Como si el territorio nacional fuera un tablero de TEG y cada provincia fuera un objetivo a conquistar, los tres candidatos presidenciales más favorecidos con las encuestas, Daniel Scioli, Mauricio Macri y Sergio Massa, siguen el minuto a minuto de las elecciones primarias en el interior del país para asegurarse el propio triunfo.

Este domingo, más de un millón de ciudadanos en Mendoza y dos millones de personas en Santa Fe, acudirán a las urnas y su decisión tendrá influencia en las elecciones de octubre.

Luego de la "sorpresa salteña", donde el candidato afín al sciolismo, Juan Manuel Urtubey -contra todos los pronósticos- se quedó con la gobernación, ahora los dados giran para determinar qué es lo que sucede en Mendoza y Santa Fe.

Un triunfo en alguna de estas provincias puede aumentar las chances electorales de cualquiera de los candidatos presidenciables.

Scioli tiene más chances de obtener un resultado favorable en Mendoza, en tanto que corre con cierta desventaja en territorio santafecino. 

Macri, en tanto, espera ansioso que las urnas acompañen a su candidato, Miguel del Sel, como una prueba de fuego que garantice su representatividad federal.

En cambio en Mendoza si su delfín, el radical Alfredo Cornejo, resulta vencedor, deberá compartir la victoria con su rival del Frente Renovador, Sergio Massa.

Mendoza: acuerdos y divisiónSegún un informe del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (CIPPEC), las elecciones en Mendoza tienen una particularidad y es que es la primera vez en la historia que esa provincia elige candidaturas provinciales a través del sistema de primarias. 

Está en juego qué candidatos aspirarán a suceder al gobernador justicialista Francisco Pérez, un ex aliado de la presidenta Cristina Kirchner, recientemente alineado con Scioli. 

A pesar de liderar la provincia desde hace 8 años, las elecciones del domingo presentan un panorama dudoso para el Frente para la Victoria, que llega a la urna con tres fórmulas electorales distintas: 

• La primera lista la encabeza el senador nacional Adolfo Bermejo, quien cuenta con el respaldo de sectores mayoritarios del partido, incluidos el gobernador Pérez y el vice Carlos Ciurca y respalda a nivel nacional la candidatura de Daniel Scioli.

• También se presentan el diputado nacional Guillermo Carmona y la ex senadora provincial, Alejandra Naman. La lista cuenta con el apoyo de Cristina Kirchner. De hecho, en la semana, distintos funcionarios del Gobierno viajaron a la provincia para apuntalar a esta pareja: desde Axel Kicillof hasta Florencio Randazzo.

• La tercera fórmula del FPV, la de Matías Roby-Ariel Pringles, fue motivo de controversia. Roby era ministro de Salud de Pérez, además de amigo personal del mandatario, pero éste le pidió la renuncia tras la negativa a bajarse de la candidatura. Ahora Roby cuenta con el respaldo del moyanismo. 

El resto de las alianzas o partidos presenta listas únicas de precandidatos a gobernador (el FIT, el MST, Cambia Mendoza, Es Posible y Partido Federal).

Esta circunstancia intensificó la competencia entre ellos y puso al descubierto  la incógnita de quién será el candidato que capture los votos de quienes no logren pasar el umbral electoral de la primaria.

Frente a este escenario fragmentado, el arco opositor se alineó en general detrás de una única alternativa: el radical Alfredo Cornejo y la senadora Laura Montero, de la alianza Cambia Mendoza. 

Un análisis de Laura Fiochetta para el CIPPEC destaca que Cornejo "cuenta con el apoyo de fuerzas ideológicamente disímiles (Partido Socialista, Libres del Sur, el PRO, y el PD) y recibió el respaldo durante la campaña tanto de Ernesto Sanz como de Mauricio Macri. Esta alianza está integrada por una vasta cantidad de partidos, pero eso no se refleja en la cantidad de listas legislativas en competencia". 

Las encuestas favorecen a Cornejo -está arriba de los 40 puntos- y esto entusiasman a Macri, que esta semana visitó las tierras mendocinas y prometió: "El domingo vuelvo para festejar".

Pero el actual gobernador mendocino Paco Pérez recordó: "No se anticipen con tanta seguridad, no vaya a ser que pase lo de Salta".

Según Fiochetta, en estas elecciones se dará la particularidad de que habrá departamentos -como Guaymallén o Luján de Cuyo- donde los votantes encontrarán una oferta electoral muy voluminosa -con hasta cerca de 50 boletas en el cuarto oscuro-, ya que la competencia para las candidaturas a intendente y concejales es muy intensa. 

"La estrategia de presentar muchas listas es impulsada por la lista oficialista del Frente para la Victoriacon el objetivo de ´departamentalizar´ la elección debido a que posee figuras fuertes en las comunas que podrían sumarles votos. Por el contrario, su principal opositor, del Frente Cambia Mendoza, apuesta a centralizar la elección en la figura del precandidato a gobernador", destaca la analista. 

La siguiente infografía de Isonomía presenta un resumen de los precandidatos a gobernador y algunos números para la elección de este domingo en Mendoza: 

Santa Fe: con el eje puesto en la inseguridadSegún el CIPPEC, en la carrera por la gobernación se presentan 10 listas de precandidatos que pertenecen a siete alianzas y un partido.

Solamente en dos alianzas habrá competencia, al presentarse más de una lista de precandidatos: una es la del oficialista Frente Progresista Cívico y Social (FPCyS) y la otra es la del Frente Renovador de la Esperanza –FR-.

"En estos comicios hay varias cuestiones en juego, tanto entre las alianzas como al interior de ellas. En primer lugar, estas PASO harán de gran medidor de fuerzas a nivel provincial y posicionarán a los actores de cara a las generales, considerando especialmente que el FPCyS pone en juego el único distrito gobernado por el progresismo y, por ende, su proyecto político nacional", considera la analista Mariana Prats. 

"La pelea clave está dada por el caudal de votos que obtengan el PRO y el FPCyS. Pero la gran paradoja al respecto es que, a nivel nacional, dos de los tres actores clave que se enfrentan en estas alianzas son socios: el PRO y la Unión Cívica Radical", agrega la experta en un informe para el CIPPEC. 

Mauricio Macri se juega todo por una victoria en Santa Fe; mientras que Scioli intensificó su actividad en esta provincia para darle respaldo a su candidato, Omar Perotti.

El ex motonauta sabe que en Santa Fe el escenario para el Frente para la Victoria es áspero, y aparece en el tercer lugar en las encuestas, detrás del PRO y del Frente Socialista. También tiene claro que, como es el cuarto distrito electoral del país, el resultado de los comicios de este domingo va a tener un fuerte impacto en el resto del territorio.

Según Prats, "el Frente Para la Victoria, no tiene mayor expectativa que la de un tercer lugar y la esperanza, aunque sea, de alcanzar el piso del 20% que tuvo Agustín Rossi en las últimas elecciones". 

Para la analista, "el FPV parece haber entendido que la peor estrategia para el peronismo en la provincia es presentarse dividido. Si bien aún los peronistas santafesinos siguen dispersos bajo diferentes etiquetas que después de la ley de lemas nada pudo aglutinar, ahora presenta un solo precandidato a gobernador, Omar Perotti, bajo la idea de mostrar un frente unido y fuerte al interior". 

Por su parte, Massa apunta a repetir lo logrado en Salta, donde el Frente Renovador resultó vencedor por la capital, y planea ir por la intendencia de la mano de Alejandro Grandinetti.

Sin embargo, Massa prefirió no viajar a Santa Fe para respaldar a los dos aspirantes a la gobernación: Oscar "Cachi" Martínez y Eduardo Buzzi.

La siguiente infografía de Isonomía presenta un resumen de los precandidatos a gobernador y algunos números para la elección de este domingo en Santa Fe: 

Sin importar los colores políticos, los principales precandidatos que compiten por la provincia, enarbolan la misma bandera: "contra la inseguridad".

Según el análisis de Prats, "los principales temas en discusión durante la campaña y que han puesto en jaque la gestión del Frente Progresista, fueron la inseguridad y el narcotráfico. Pese a la reforma judicial y al proceso de reforma policial, la falta de cambios inmediatos hace que muchos de los santafesinos vean en esta agenda parte de la explicación del avance del PRO". 

En este contexto, Miguel Del Sel salió a criticar al Frente Progresista: "La sociedad está desencantada con un socialismo que se ha ido agotando. El tema inseguridad es relevante y los ha ido perjudicando, pero va a llevar mucho trabajo, porque esta realidad se cambia entre todos".

El oficialismo, en tanto, "orgulloso de las tasas de mortalidad infantil más bajas del país y de ser una de las provincias con mejor calidad educativa, reconoce el disgusto del electorado y promete reforzar ymejorar los proyectos en marcha", acota Prats. 

Uno de los candidatos a nivel nacional que insistió con el tema de la inseguridad fue Massa, quien se declaró partidario de "la pena con cadena perpetua al narcotraficante", al tiempo que reclamó la creación de una policía autónoma en Rosario.

El Frente para la Victoria también eligió hacer foco en las carencias en esta materia: "El socialismo corre de atrás a la inseguridad. El que no entiende esta prioridad está mirando otra película".

Respecto a las chances de que los precandidatos que impulsa el kirchnerismo se impongan en Mendoza y Santa Fe, el analista político Rosendo Fraga aseguró que lo "sorprendería si el oficialismo nacional gana las PASO en esas dos provincias", al tiempo que sumó las primarias en la Capital Federal y la elección de gobernador en Neuquén como otras instancias donde podría imponerse la oposición.