Disfrutar en vivo la magia de Lionel Messi, con la camiseta argentina y en un torneo internacional, es un plan soñado para el común de los futboleros.

Pero si a eso se le suma la chance de equiparse con la última tecnología a mitad de precio, se hace directamente irresistible.

Así lo piensan, al menos, miles de familias argentinas que ya reservaron su viaje a Chile para alentar a la Selección en la Copa América. Con tal masividad que, a seis semanas del debut, buena parte de los lugares quedaron agotados.

El equipo del "Tata" Martino debuta el 13 de junio contra Paraguay en La Serena, casi 500 kilómetros al norte de Santiago. Allí, tres días después, enfrenta a Uruguay. Y el 20 de junio cierra la fase de grupos contra Jamaica en Viña del Mar.

En el sitio oficial ya no quedan entradas para esos partidos: salieron a la venta el 31 de marzo y se agotaron en menos de 36 horas.

Así, hoy, sólo se consiguen tickets en reventa a precios que multiplican hasta por 30 los oficiales. O bien incluidos en paquetes con aéreo y alojamiento de agencias como Lantours, Almundo.com o Atrápalo que, aunque salen entre $15.000 y $22.000 por persona, ya están cerca de agotarse.

En LAN Argentina, empresa que vuela a La Serena con escala en Santiago, contaron que las consultas y las ventas arrancaron en abril, apenas la gente consiguió las entradas. La demanda va creciendo a medida que nos acercamos al evento. Hasta ahora, el partido más buscado es el de Argentina contra Uruguay.

Ni en esa compañía ni en Aerolíneas Argentinas quedan ya los pasajes de menor precio para los vuelos desde Buenos Aires más próximos a cada partido. Y los asientos más baratos en oferta pueden hasta triplicar el costo habitual. Esta semana, para un viaje relámpago, el precio ida y vuelta arrancaba en $3.700 y hasta en $10.300, según el partido. Y para estadías más amplias, podía bajar a entre $ 2.500 y $ 6.000.

"Los paquetes de primera fase están casi agotados, sólo quedan algunos para el partido con Jamaica. Y hay sedes como La Serena donde los alojamientos disponibles no logran cubrir la demanda", comentó a Clarín Martín Romano, gerente de Atrápalo en Argentina.

Algunos clientes, optimistas, hasta compraron vuelos para los cuartos de final.

"Todavía nos quedan algunos cupos, pero la demanda y las consultas aumentan con el correr de las semanas", coincidió Diego García, country manager de Almundo.com, y señaló que las compras se dividen por igual entre quienes planean un viaje con ida y vuelta en el día, y los que planean estadías más extensas.

En Turismocity, una web que compara tarifas de más de un centenar de agencias de turismo, la estadía más solicitada fue del 11 al 22 de junio. O sea, para toda la primera fase. "Incluso gente sin entradas aseguradas para los tres partidos va a aprovechar para vivir el clima de la Copa allá, pasear y por supuesto hacer compras a bajo precio, especialmente de tecnología y calzado deportivo", detalló Julián Gurfinkiel, co-fundador del sitio al matutino.

El incentivo es que el ya clásico "viaje de compras" a Chile se volvió aún más conveniente. En el último año, la moneda chilena se depreció un 10% frente al dólar. Y hoy cada peso argentino equivale a 70 chilenos, igual que en mayo de 2014, pese a la muy alta inflación registrada de este lado de la cordillera.

En este contexto, aún con el 35% de recargo impuesto por la AFIP a las compras en el exterior, productos como smartphones, tablets, notebooks, televisores y consolas ya resultan en Chile entre 30 y 50% más baratos.

Un smartphone Samsung Galaxy S5 Mini de $9.000, por ejemplo, se consigue allá por $5.211. Un SmartTV Sony de 50 pulgadas que en Buenos Aires está a $22.000 se compra por menos de $ 11.600. Son diferencias que, por sí solas, llegan a cubrir por completo el costo de los pasajes aéreos.

Con este anzuelo, según estadísticas oficiales, casi medio millón de argentinos cruzaron a Chile sólo en enero y febrero, y volvieron con valijas cargadas: 24% más que un año antes. Ahora, con plus de la Copa América, todo indica que la tendencia va a profundizarse.