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Tablita de Machinea K: con igual salario, algunos pagan Ganancias y otros festejan estar exentos

Los especialistas consultados por iProfesional pusieron de manifiesto los problemas que trae aparejada la resolución general 3770 que modificó el gravamen
18/05/2015 - 14:05hs
Tablita de Machinea K: con igual salario, algunos pagan Ganancias y otros festejan estar exentos

Una semana pasó de la oficialización de la resolución general que modificó el Impuesto a las Ganancias, y los especialistas en impuestos continúan realizando críticas al "retoque" introducido por el Gobierno.

Es que no sólo la reforma se concentró en una parte de los empleados que en la actualidad deben pagar el tributo, sino que mantuvo las inequidades que se incluyeron con el decreto 1242, firmado en 2013 por la presidenta Cristina Kirchner.

En efecto, en aquella oportunidad, la mandataria creo cuatro categorías distintas de contribuyentes en base a los ingresos obtenidos entre enero y agosto de aquel año y sin considerar la evolución que tuvieron los salarios en etapas posteriores.

Así, mientras algunos trabajadores no se tuvieron que preocupar más por el impuesto (pese a que hoy multipliquen varias veces la remuneración recibida en aquel período), otros continúan cargando la "cruz" del gravamen.

Y si bien ahora el Gobierno consideró el caso de quienes disminuyeron sus ingresos a partir de aquel momento, lo cierto es que no termina de mejorar su situación. Más teniendo en cuenta que las deducciones siguen siendo bajas en términos reales.

El panorama no es mejor en la región patagónica, aunque los conceptos que pueden computar son mayores a los del resto del país. Al menos así lo manifestaron a iProfesional un grupo de profesionales que resaltaron el beneficio se aplicaría a muy pocas personas.

Por otro lado, los especialistas también coinciden en que estas medidas terminan generando una gran carga para las empresas, que deben lidiar con una normativa muy engorrosa a la hora de retener el impuesto de sus empleados.Una distorsión que continúaLos especialistas coinciden en que la medida adoptada por el Gobierno sigue generando distorsiones, debido a que los cambios introducidos no modificaron la metodología utilizada en el decreto 1242.

En este sentido, desde IDESA indicaron que "con el nuevo cambio, quienes en el año 2013 ganaban menos de $15.000 seguirán no pagando el impuesto, los que ganaban entre $15.000 y $25.000 serán beneficiados con una reducción y los que superaban los $25.000 soportarán el aumento derivado de la no actualización de los parámetros en los últimos 2 años".

Y remarcaron que "se llega al absurdo de que tres personas con el mismo salario -supóngase $30.000 mensuales- pueden no pagar el impuesto (porque cobraba menos de $15.000 en el año 2013), pagar un monto reducido (porque estaba en la banda de $15.000 a $25.000 en el 2013) o soportar un nuevo aumento del impuesto (porque en el año 2013 ganaba más de $25.000)".

Además, con el cambio introducido se generan nuevos puntos de "referencia" para determinar qué tipo de deducciones pueden computar los empleados en relación de dependencia, lo que complica aún más las cosas.

Al respecto, Fernando Álvarez, socio de ARV - Álvarez Roperti Venegas Consultores, explicó que la resolución general 3770 fija un nuevo parámetro de reencuadramiento para ser beneficiario (que aplica para aquellos que superaron los $15.000 entre enero y agosto de 2013): la remuneración percibida a partir del 1 de enero de este año.

Para graficarlo con un ejemplo, el especialista señaló que "si alguien que hasta la fecha había quedado afuera del decreto 1242 porque entre enero y agosto de 2013 ganaba unos $40.000 y a partir de enero de 2015 por un cambio de empleo (o por una modificación en las condiciones del mismo) gana menos de $25.000, gozará de los beneficios del mencionado decreto y desde enero 2015".

Dicho de otra manera, aquellos que antes no gozaban del incremento de sus deducciones por superar los $25.000 en el 2013, pero que al día de hoy redujeron sus ingresos por cualquier causa, podrán computar valores más altos a los que establece la ley (si obtienen entre $15.000 y $25.000) y hasta pueden quedar eximidos del pago (si ganan, por ejemplo, menos de $15.000 brutos desde enero de 2015).

Este "beneficio" también se les concede a los que iniciaron actividades desde septiembre de 2013. Vale recordar que para ellos, lo importante era su primer sueldo, que era lo que determinaba en qué categoría de contribuyente se encontraban.

"Ahora, con la nueva resolución, la condición del sujeto beneficiario de las rentas frente al régimen se determinará en función de la mayor remuneración percibida a partir del 1 de enero de 2015 y tendrá efectos exclusivamente para los sujetos cuyo mayor ingreso bruto mensual no supere la suma de $25.000", indicó Álvarez.

El especialista recordó que "para alguien que no hubiere trabajado en el período base e ingresaba al mercado laboral con posterioridad, la resolución general 3525 disponía que debía encuadrarse en el decreto 1242 con el salario de su primer mes de trabajo".

Así, si por caso era de $40.000 mensuales, entonces no recibía ningún incremento en los montos que pueden considerar al momento de liquidar Ganancias y si era menor a $15.000 se liberaba del pago del impuesto.

"Ahora se le da una nueva oportunidad, al permitirle reencuadrarse con las remuneraciones percibas a partir del 1 enero de 2015; si estas fueron menores a $25.000 cuenta con los beneficios otorgados en 2013", puntualizó.

Sin embargo, si bien a primera vista parece ser una medida positiva, Álvarez asegura que el grupo beneficiado por estos cambios es muy acotado y, en definitiva, se los está "subsidiando" con los niveles de deducciones que se les quita a los otros dependientes.Un "engendro" que renaceConsultado sobre las últimas medidas, Mario Buedo, socio del estudio Montero & Asociados, indicó que "hemos retrocedido en el tiempo y perdido la memoria" ya que "el núcleo central de la resolución general 3770, no es otra cosa que una versión atenuada de la misma metodología prevista en la tablita de Machinea".

El especialista indicó que en diciembre de 2008 el Senado aprobó la eliminación de la llamada "Tablita de Machinea", que no era otra cosa más que un método para reducir progresivamente el cómputo de las deducciones personales.

Buedo recordó que "en aquella sesión el entonces jefe del bloque del Frente para la Victoria, Miguel Ángel Pichetto, consideró que 'la creación de este engendro se enmarcó en el marco de una crisis fiscal profunda y hasta tiene patente intelectual', en referencia a su creador (el por entonces ministro de Economía, José Luis Machinea)".

Y concluyó: "En las mismas palabras del senador Pichetto, volvimos a recrear el engendro".Para pagar menos... no hay que ir al surDesde el momento en que se instrumentó el decreto 1242, era fácil pensar que los que se encontraban trabajando en la región patagónica quedaban mejor parados que el resto de los dependientes. Ocurre que las deducciones se incrementaron un 30% para aquellos cuyos ingresos superaron los $15.000 brutos. Y ahora también se suma el beneficio de la nueva resolución.

No obstante, la realidad parece mostrar otra cosa. Al menos así lo manifestó Malena Romito, consultora tributaria del estudio Avedissian & Singh, quien destacó que "es manifiesta la injusticia de estas modificaciones para la región".

"Mientras que para el resto del país el determinante del incremento es la renta que percibían hace dos años (enero - agosto 2013), para la Patagonia sólo importa el monto de los ingresos del año en curso", sostuvo y añadió: "En un contexto inflacionario como el nuestro, este requisito destruye cualquier expectativa de aumento".

La especialista explicó que el segmento de contribuyentes que de enero a agosto 2013 tenía ingresos superiores a $15.000 (en la Patagonia no tenían tope superior) continúa gozando del incremento del 30% en las deducciones personales dispuesto por el decreto 1242 y aclaró que, con la resolución general 3770, se plantea que aquellos que están en el segmento $15.000 a $25.000 obtendrán un nuevo incremento.

"Lo cuestionable, es que dicho monto dependerá de los ingresos que hayan percibido a partir del 1 de enero de 2015. A tal efecto, dispone 6 segmentos de aumento (25% a 5%) según el monto de su renta obtenida en 2015 haya operado entre $15.000 y $25.000", resaltó.

"Como aquí (en Bariloche y en muchas otras ciudades) los sueldos son superiores en un 20% respecto del resto del país (por el adicional de zona fría) quienes en su momento (año 2013) obtenían rentas gravadas hoy en día obtienen ingresos por encima de los $25.000, quedando fuera del alcance del beneficio de la nueva norma". Más costos para las empresasUno de los aspectos que no pueden quedar fuera del análisis es el mayor costo que representa para las empresas llevar adelante el cálculo de las retenciones que deben realizar a sus empleados.

En este sentido, desde IDESA indicaron que la Argentina se encuentra en la posición 124 del índice Doing Business, sobre un total de 189 países.

Desde la entidad remarcaron que el indicador "es una conocida herramienta que apunta a medir las características del contexto regulatorio bajo el cual operan las pequeñas y medianas empresas de cada país".

Y aclaró que, precisamente, "uno de los aspectos que contribuye a esta mala posición es la cantidad de horas anuales que requiere cumplir con los trámites para pagar los impuestos".

Según el análisis realizado, en la Argentina se demandan 405 horas al año para llevar adelante estas tareas. Una cifra que está por encima de países vecinos, como Chile (donde son necesarios 291) o Uruguay (312 horas).

Incluso, tal como surge del informe citado por IDESA, la complejidad para pagar los impuestos consume mucho más esfuerzos administrativos que en las naciones de la OCDE, que tienen un promedio de 175 horas al año.

Esto, sin dudas, termina reflejándose en una suba de los costos asociados a estas tareas. Gastos que, en definitiva, son soportados por las empresas que deben hacer frente a las obligaciones tributarias.

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