La Cámara Federal de Casación Penal confirmó este viernes una condena a un año de prisión para un programador por manipular los datos bancarios de una persona a través del sistema "home banking" y transferir dinero sin autorización a la cuenta de un compañero de trabajo.

Se trata de una de las primeras condenas por la maniobra conocida como "phishing", en donde el propio banco involucrado confirmó la maniobra y devolvió el dinero faltante.

Tras la condena a un año de prisión, el programador apeló ante Casación, pero ahora la Sala III de esa instancia ratificó la decisión por entender que "no existe elemento de prueba alguna que otorgue verosimilitud al descargo efectuado" por el acusado, P.A.C.

La causa investiga "la manipulación indebida de datos informáticos" que "obtuvo el usuario y contraseña de Marcelo Carlos Bianchi", titular de una cuenta en el "Banco Francés, para luego efectuar una transferencia de capitales mediante el sistema de home banking por 3 mil pesos hacia una cuenta que" D.O.A. "poseía en la misma entidad bancaria, desde la cual el dinero fue retirado".

"La captación de datos ocurrió el 18 de noviembre de 2011, entre las 5 a 19 horas, en tanto que el dinero fue extraído por el nombrado D.O.A. de la siguiente forma: $2.000 el mismo día en horas de la tarde desde el cajero automático" ubicado sobre la avenida Corrientes al 500, en el microcentro porteño, y dos días después retiró los mil restantes desde otro cajero en la calle San Martín al 400, detalla el fallo.

El dinero, se detalló, luego le fue entregado a P.A.C., según determinó el tribunal.

En el juicio los magistrados escucharon a la víctima y al hombre que recibió el dinero y destacaron que la documentación aportada por el Banco Francés dio cuenta de la ruta que siguió el dinero y de la manipulación indebida de los datos informáticos que permitían acceder a esa cuenta.

"La entidad bancaria referida explicó que el fraude fue detectado en virtud de que la cuenta corriente fue operada desde la ciudad de Guadalajara, México, y a raíz de ello, el titular de la cuenta corriente tuvo que modificar sus datos de usuario y la contraseña", señala el fallo.

Los jueces también señalaron que "luego de reconocer la manipulación informática referida, el Banco Francés asumió la pérdida y acreditó el monto defraudado en la cuenta corriente de Carlos Marcelo Bianchi", según informó DyN.

En el juicio también declaró el dueño de la cuenta a la que se hizo la transferencia: dijo que al momento del hecho "mantenía una relación laboral y de amistad" con el imputado, y precisó que le dio a P.A.C. sus datos bancarios para que depositara allí el dinero por un trabajo previo.

P.A.C. admitió esos hechos pero insistió en que ese dinero respondía a un trabajo "free lance" que le había encargado otra persona, y que le pidió la cuenta a su compañero de trabajo para ahorrarse la comisión de una transferencia entre bancos.

El imputado "se ha manifestado en forma mendaz, brindando una mera excusa como para intentar una posición más favorable en su comprometida situación procesal", dijo el tribunal al condenarlo.

Pero la defensa se quejó ante Casación de la pena: dijo que el hecho de que su cliente fuera programador "no implican el manejo o la capacidad de realizar la maniobra" y afirmó que "durante todo el proceso se trató de invertir la carga probatoria y poner a cargo de su defendido la obligación de brindar todo tipo de pruebas para demostrar su inocencia".

No obstante, los jueces Liliana Catucci, Eduardo Riggi y Mariano Borinsky ratificaron la condena: "A fin de justificar el origen de las sumas de dinero depositadas en la cuenta bancaria de su amigo y compañero laboral, (el acusado) alegó haber vendido un software a una persona que no pudo ser ubicada, ni tampoco se hallaron registros de comunicaciones telefónicas del imputado con el teléfono de contacto que aportó en la etapa instructoria", se señaló.