El ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, aseguró que votará por su ex rival en las internas, el prencandidato presidencial kirchnerista Daniel Scioli, y aclaró que su relación con la presidenta Cristina Kirchner es "excelente".

Además, dijo que no se sintió "defraudado" por haber tenido que declinar su postulación a la Casa Rosada.

"Por supuesto", destacó el funcionario al ser consultado si va a votar a Scioli en los próximos comicios generales, y subrayó: "Yo apoyo las candidaturas del Frente para la Victoria".

En un acto en el puerto de Buenos Aires donde presentó nuevos trenes, Randazzo minimizó las declaraciones de su madre, Gladys Campagnon, quien sostuvo que a su hijo "le cortaron las piernas" al no dejarlo competir con Scioli en una interna, al puntualizar: "Es mi madre, le mando un beso".

Asimismo, tras recorrer los nuevos vagones, el funcionario de la cartera de Transporte manifestó que "después del 10 de diciembre será un militante más" y aunque aseguró que no pretende ningún cargo, manifestó que "nunca se renuncia a la política".

"Soy un hombre que cree en la política como instrumento de cambio y en estos años lo he podido demostrar", dijo en diálogo a la prensa.

El funcionario kirchnerista se llamó a silencio luego de que la presidenta Cristina Kirchner decidiera que su secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini, fuera el compañero de fórmula de Daniel Scioli para las elecciones presidenciales y bajara a Randazzo de la  interna del Frente para la Victoria, forzándolo a que se postulara en la provincia de Buenos.

El ministro abandonó la carrera hacia la Casa Rosada a regañadientes y no aceptó la propuesta de pelear por la sucesión de Scioli en territorio bonaerense. Desde ese momento, no volvió a hablar y apenas se mostró junto a la jefa de Estado en el acto por el Día de la Bandera en Rosario, Santa Fe.