iProfesional

Un ex policía condenado por el homicidio de Forza, Bina y Ferrón, aseguró que trabajó para Aníbal Fernández y lo vinculó con el tráfico de efedrina
03/08/2015 - 10:24hs

A siete años de la muerte de Sebastián Forza, Leopoldo Bina y Damián Ferrón, cuyos cuerpos fueron encontrados en un zanjón a unos 650 metros de la ruta 24 en General Rodríguez (hecho conocido como el "Triple crimen"), el programa "Periodismo para Todos" (PPT) que conduce Jorge Lanata emitió un informe que vincula al jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, con la causa que investiga la muerte de estas personas por el negocio del tráfico de efedrina y lo señala como el "autor intelectual" del asesinato de los tres hombres.

Los testimonios de Martín Lanatta, uno de los condenados por el crimen, así como el de la viuda de Sebastián Forza y Diego Ferrón (hermano de otra de las víctimas, Damián Ferrón), vinculan a Aníbal Fernández y un agente de la ex SIDE, "Máximo", con las operaciones que se adelantaban para proteger el negocio.

"El vínculo con Aníbal era por medio de Sebastián Forza", dijo Lanatta. "Él me comenta que lo estaban persiguiendo y que en cualquier momento entra en cana. En ese momento tenía un socio que era comisario general, y le comenté, y a través de él me reuní con Aníbal".

"Aníbal me dijo: 'Ese tipo está muy complicado, sólo para hablar de ese caso me tienen que dar 250.000 dólares'. En esa reunión solo estábamos tres personas. Luego hablo con Forza y a los tres o cuatro días me dice que tiene la plata", agregó Lanatta, quien además asegura que la viuda de Forza, Solange Bellone, "lo sabe".

En las imágenes de archivo en la que se escucha el testimonio de Bellone, la viuda de Forza asegura que "a Sebastián lo seguían, no sé si la Policía o quién, pero le pedían información y plata. Él (por Sebastián Forza), me dice que arregló para que no lo molestaran más con alguien que le decían 'La Morsa', alguien que tenía bigote. La persona con la que trató para el pago".

Continuando con su testimonio, Lanatta ofreció detalles de otras reuniones en las que el actual jefe de Gabinete interactúa con Sebastián Forza para comenzar a tomar el control del negocio. "Le dice que se manejen juntos en el negocio de la efedrina. Empieza a encaminarlo para tener el control del negocio. Pero en ese momento no sé cuál contacto tenía Elisa Carrió, pero tenía la información y me empezó a pegar con ese tema".

"El ex agente de la SIDE que trabajaba con Aníbal era de su confianza", continuó. "Y quien dio la orden de la muerte fue Aníbal. El negocio del tráfico de efedrina se lo queda él con la gente de inteligencia. Forza llegó a ser un estorbo porque sus clientes no llegaban a los carteles de México. Llegó otra gente vinculada a los carteles, de origen mexicano. Había uno que aportaba el dinero, uno recibía el producto, coordinaban la entrega con el de inteligencia y pagaba otro por Capital Federal. Llevo el dinero del depto del mexicano hacia el domicilio de Aníbal Fernández con "Máximo" (el ex agente de la SIDE). Fueron dos millones de dólares.Tengo la dirección y los nombres", sentenció.

Por su parte, Diego Ferrón declaró que la muerte de su hermano Damián "destapo otras causas, se descubrió lo que es la efedrina, la cocina de Maschwitz, la mafia de los medicamentos y los aportes a la campaña" presidencial del primer mandato de Cristina Kirchner. "Forza hizo aportes a la campaña por 200.000 pesos".

"Yo estuve en las audiencias y allí se nombraron personajes que pueden estar involucrados. 'La Morsa' supuestamente tenía bigotes, era la protección. Hay registros de 600 llamadas a Aníbal, pero cuando fui a hablar con él nunca me recibió, me rechazó siempre. Mi hermano murió y espero que no haya sido en vano todo esto, porque esto lo hizo gente profesional que se confundió en muy pocas cosas. ¿Aníbal era el jefe? No sé, no lo puedo probar, pero sí lo escuché, sí lo mencionaron", declaró Ferrón.

José Luis Salerno, ex policía y farmacéutico socio de Sebastián Ferrón investigado en la causa de la efedrina, declaró que Aníbal Fernández está "muy involucrado en el juicio de la efedrina" y era parte de la banda "oficial" del negocio.

"Yo tenía un socio - continúa Salerno - que se llamaba Damián Ferrón, y le vendíamos medicamentos a un hombre llamado Esteban Pérez Corradi (hoy prófugo), quien dijo tener una cadena de gimnasios y me compraba productos, entre ellos efedrina, en cantidades normales. En varias oportunidades me pidió comprar la farmacia, o asociarse conmigo. Yo siempre dije que no".

"A medida que la relación con Corradi avanzaba, él dijo que necesitaba más cantidades, específicamente de efedrina. Me preguntó en dos o tres oportunidades si lo podía contactar con alguien. Comentaba la cantidad de efedrina que necesitaba para cubrir todos los gimnasios, decía que su red estaba en todo el país. Yo lo contacté con la directora de una farmacia y ellos siguieron haciendo trabajos. En agradecimiento, me regaló un auto", agrega Salerno.

Según el relato, en algún momento, Pérez Corradi supo que Ferrón se quería abrir y fundar su propio negocio, con Forza y Bina.

"Pérez Corradi me dijo que iba a matar a Ferrón, le dije que lo hiciera. No le creíamos. Lo charlé con mi socio. Ferrón negó estar haciendo algo que yo no supiera", explica Salerno.

"Pero no era así, estaba haciendo una sociedad con Forza y Bina. Planeaban ir con la efedrina a Panamá y de ahí a Mexico. Y Esteban Pérez Corradi estaba vinculado a Aníbal Fernández, en la banda que yo llamo 'oficial'. La otra era la que se estaba armando, que quería quitarle el negocio a la banda 'oficial'. Corradi no daba nombres personales, pero me habló de Aníbal Fernández. Para mí, la mano de obra del asesinato está en la cárcel. Y la parte intelectual está más que clara, son los que están por arriba de Pérez Corradi.