El jefe de la CGT Azopardo, Hugo Moyano, pronosticó este miércoles un escenario cargado de dificultades económicas, a pocas semanas de las elecciones y en medio de las gestiones de Daniel Scioli por alcanzar un pacto social con los sindicatos oficialistas y empresarios aliados.

El camionero advirtió que el país requiere un "sinceramiento en la economía", aunque alertó que eso "va a traer una secuela de situaciones complicadas". Y en esa línea, dijo que hay una "trama social muy complicada", con "suspensiones y algunos despidos" de trabajadores.

"Acá, se utilizan algunos términos que atemorizan, por ejemplo, devaluación, pero acá lo que hay que hacer es un ordenamiento en la economía, un sinceramiento en la economía, y esto va a traer una secuela de situaciones complicadas", enfatizó Moyano en diálogo con radio Rivadavia.

Y amplió: "Lo que sí somos conscientes es que queda una trama social muy complicada con este tema de la economía, todo el mundo sabe que no estamos en el mejor momento, y esto seguramente se va a ver reflejado en el futuro Gobierno".

"Yo creo que es lo que va a ocurrir, que se van a vivir situaciones difíciles porque la economía no está en lo mejor y el futuro Gobierno va a tener que enfrentar situaciones difíciles porque hay un entramado económico-social que deja el gobierno que se va que es bastante complicado", resaltó.

Las advertencias del sindicalista llegan en momentos que Scioli intenta impulsar un acuerdo social, en caso de ganar las elecciones del 25 de octubre, para generar un ámbito de "consenso" que le permita llevar adelante sus medidas económicas sin mayores cuestionamientos.

El candidato oficialista se reunirá el domingo 20 o el lunes 21 de septiembre con sindicalistas que lo respaldan y empresarios afines a la Casa de Gobierno en una suerte de adelanto del eventual Consejo Económico y Social que el gobernador bonaerense negocia con la CGT de Antonio Caló.

El "Encuentro Social de Concertación" le servirá al postulante presidencial del Frente para la Victoria para mostrarse como líder de un espacio multisectorial, del cual por ahora Moyano no fue convocado.

Según trascendió, además de la CGT oficialista, participarían cámaras patronales afines como ADIMRA (metalúrgicos), de Juan Carlos Lascurain, la Confederación General Empresaria (CGERA) de Marcelo Fernández o la Federación Industrial de Santa Fe (FISFE) de Guillermo Moretti, entre otras.

También se prevé la participación de organizaciones académicas y de la sociedad civil, siempre identificadas con el Gobierno.

En ese marco, el líder de la central opositora intenta mostrarse como el mejor candidato a controlar la conflictividad laboral, luego de que en los últimos años su central se convirtiera en una de las principales detractoras del Gobierno, con el lanzamiento de varios paros generales.

Por ello, el también jefe del Sindicato de Camioneros alertó este miércoles que, en su actividad, "hay suspensiones y algunos despidos" y añadió: "Me imagino que la industria está sufriendo estas consecuencias".

Suspensiones y despidos

Los dichos de Moyano sobre la crítica situación que atraviesa la economía coinciden con los datos difundidos este martes que muestran un deterioro del mercado laboral.

En la industria, gigantes como Techint, Acindar y Fate anunciaron nuevas medidas de ajuste que van desde la extensión de las suspensiones hasta la reducción de puestos laborales, tal como lo adelantó este martes iProfesional.

Los industriales comenzaron a aplicar recortes a raíz de la menor demanda y la pérdida de mercados externos, en lugar de "sustituir exportaciones" y apostar al mercado interno, como les pidió la Presidenta el 2 de septiembre pasado, durante el acto por el Día de la Industria.

En tanto, la comisión interna gremial de la planta de envasado de Coca Cola Femsa denunció este martes "una decena de despidos" en la embotelladora ubicada en el barrio porteño de Pompeya.

Cristian Durán, uno de los trabajadores despedidos, dijo que la compañía de capitales mexicanos está "dejando en la calle a muchos trabajadores, la mayoría con más de diez años de fábrica e incluso a otros que tienen 20 años de servicio".

Por otra parte, las empresas autopartistas planean reducir su plantilla de personal este año en un 2,2 por ciento, lo que equivale a unos 1.300 puestos de trabajo, cifra que se sumará al 7,3 por ciento que ya se habían achicado en 2014.

Así lo reflejó una encuesta dada a conocer este martes por la Asociación de Fabricantes de Autopartes y Componentes (AFAC), realizada entre sus empresas socias.

"Durante 2014 el sector experimentó una caída del empleo directo del 7,3 por ciento debido al fuerte impacto de la caída en la producción de vehículos de ese año. Para 2015 se espera una reducción adicional del 2,2 por ciento", indicó el estudio.