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¿Bein o Batakis? ¿Melconian o Frigerio?: los equipos de los candidatos juegan sus propias internas

Los comités de campaña de Daniel Scioli y Mauricio Macri han visto generarse silenciosas luchas internas por  posicionarse el 10 de diciembre
21/09/2015 - 10:03hs
¿Bein o Batakis? ¿Melconian o Frigerio?: los equipos de los candidatos juegan sus propias internas

Una cosa es lo que los candidatos y sus equipos reflejan en público, cuando van a los actos o a los estudios de televisión. En plena campaña, todo son sonrisas y discursos guionados. Nada tiene que salirse del libreto.

Pero detrás de cámara, la escena es bien distinta. Los mismos que en público se abrazan y elogian, en la intimidad se pechan y hasta puede haber algún que otro codazo.

Incluso, dentro de un mismo equipo, hay peleas por los lugares que van a repartirse en caso de que el candidato llegue a Presidente. Las internas no tienen color político. Existen en las filas de Macri y en las de Scioli. Y son cada vez más intensas, a medida que se acerca el domingo 25 de octubre.

Los Macri's Boys

Desde antes de las PASO, el jefe de Gobierno de la Ciudad y líder del PRO dio la orden que sus economistas se mostrasen en público como un bloque homogéneo, con un plan creíble para desplegar.

Les pidió a Carlos Melconian y a Francisco "Pancho" Cabrera -sus máximos hombres de confianza en materia económica- un armado para darles rigurosidad técnica a sus postulados políticos.

Cabrera, ministro de Desarrollo Económico de la Ciudad de Buenos Aires desde la llegada de Macri a la Jefatura, es ingeniero, como su jefe, y su amigo desde hace años.

La relación de estrecha confianza entre ambos hizo que el funcionario se pusiera al frente de la Fundación Pensar -think-tank del PRO- desde donde se elaboran políticas de gobierno e informes sobre temas variados de interés público: desde el análisis del presupuesto nacional al funcionamiento de Aerolíneas Argentinas.

Junto con Cabrera trabajan unas 55 personas. Su más estrecho colaborador es Miguel Braun, director ejecutivo de Pensar.

"La Fundación Pensar es la usina de ideas del PRO. Nuestro fin es armar los planes de acción y preparar a los equipos técnicos del partido para el gobierno de Mauricio Macri en el 2015", postula la Fundación desde su página web.

A los técnicos de siempre, a este equipo se sumaron varios economistas "estrella", más mediáticos que el staff estable.

Miguel Kiguel, ex subsecretario de Financiamiento en la época de Carlos Menem-Domingo Cavallo, ya se incorporó. Experto en cuestiones financieras y con buenos contactos con bancos de Wall Street, trabaja sobre temas tales como un programa monetario y cambiario.

El diputado y ex titular del Banco Ciudad, Federico Sturzenegger, también se enroló en este equipo.

Lo mismo que el flamante ex presidente de Shell, Juan José Aranguren, dedicado al capítulo energético que llevaría Macri en caso de ganar las elecciones. El líder del PRO, se sabe, dejaría a Miguel Galuccio al frente de YPF ya que valora su trabajo en la petrolera.

Otro que se acercó a estas filas es Rogelio Frigerio, actual titular del Banco Ciudad, aunque su actividad hoy lo encuentra más metido en la campaña, junto con Macri, explicando los planes crediticios que el banco desplegó en Buenos Aires, uno de los pocos que presta líneas hipotecarias.

Este equipo está trabajando en lo que podría ser un "Plan de Gobierno Macri 2015-2019", con propuestas que incluyen a las dependencias económicas (Banco Central, Anses, YPF, Aerolíneas, Energía e infraestructura).

¿Melconian está pre-designado?Del otro lado están los técnicos coordinados por Carlos Melconian, la figura que hoy más cerca está de ocupar el Ministerio de Economía bajo una administración PRO. 

"Eso es lo que dicen y lo que yo leo en los diarios. Yo trabajo; Mauricio no me oficializó nada. Lo único que me pidieron es que restrinja mis apariciones mediáticas", se sincera Melconian ante un economista amigo.

Este es un grupo reducido. No más de 15 personas. Están Carlos Santángelo (socio histórico de Melconian en la consultora); Nicolás Dujovne (habitualmente ligado al radicalismo; ex funcionario de la Alianza); Hernán Lacunza (ex gerente general del BCRA en la época de Redrado y actual gerente general del Banco Ciudad); Nicolás Gadano (experto en petróleo; asesor de Galuccio en YPF); Luis Secco y el periodista-economista Enrique Szewach.

El equipo tiene a su cargo la evaluación de varios temas calientes, que seguramente regirán la agenda del próximo Presidente: las tarifas de los servicios públicos; las necesidades de financiamiento y la estrategia para la deuda externa. Nada menos.

"Todos se creen que son la mano derecha de Macri", describe uno de los economistas. El candidato les pide a sus colaboradores un esfuerzo para lograr una propuesta electoral sólida. Aunque los propios expertos saben que si difundieran algunos de los papers que vienen armando, seguramente serían "piantavotos".

A diferencia de Scioli, que optó por darle un primer plano a Miguel Bein, Macri mantiene en secreto a su equipo preferido. Por ahora plantea una estrategia radial, donde distribuye poder y responsabilidades a dos grupos bien definidos.

El problema es que esa estrategia fomenta la competencia pero, al mismo tiempo, le pone límites a lo que cada economista puede brindarle al espacio político. Dicho por uno de ellos: "No puedo invertir la mayor parte de mi tiempo si desconozco el lugar que tendrá mi equipo en caso de que Mauricio gane las elecciones".

Clarito. A medida que se acercan los comicios, este estilo promueve los celos y las internas entre los profesionales.

Scioli: Todo muy BeinEl gobernador de la provincia de Buenos Aires también tomó la decisión de dividir sus equipos de asesores económicos.

Entre ellos se chicanean. Tienen muy poca comunicación interna. Es más, ha habido oportunidades en que los representantes de una de estas líneas han salido a "desmentir" en público alguna declaración políticamente incorrecta de un economista del otro lado.

En grandes líneas, se puede dividir los "bandos" de esta manera:

• De un lado, los técnicos que vienen acompañando su gestión. A ese equipo los coordina Sergio Woyecheszen (subsecretario de Industria), un hombre que impregna la visión política además de la estrictamente operativa. Está liderado por Silvina Batakis (actual ministra de Economía); Rafael Perelmiter (Hacienda); Gustavo Marangoni (Banco Provincia); Santiago Montoya (Grupo Bapro) y Alejandro Arlía (Infraestructura).

• El otro grupo está liderado por Miguel Bein, el hombre fuerte en materia macroeconómica. El propio Scioli lo dijo: "Si quieren conocer mi propuesta, hablen con Miguel". Los datos duros que el economista muestra en público, y sus proyecciones, son elaborados por Marina dal Poggetto, su socia en la consultora.

Este segundo equipo no funciona con reuniones semanales, como el otro, sino que son individualidades con acceso directo al candidato. Entre sus principales expertos resaltan:

Miguel Peirano, ex asesor de Massa, quiere ser el responsable de un futuro banco desarrollista, que se especialice en créditos productivos. La idea es reflotar el BICE, que tuvo un perfil alto durante la administración de Néstor Kirchner pero que se ocultó en los últimos años.

Mario Blejer. Experto en finanzas (ex titular BCRA), en las últimas jornadas circuló la versión de que ya contactó a los fondos buitres con los cuales el próximo gobierno se sentará a negociar, un rumor que fue desmentido desde Wall Street a iProfesional. De todas formas, está claro que es la mejor opción que vio Scioli para acercarse a los inversores.

Imagina un rol clave para Blejer en los primeros meses de mandato, cuando haya que normalizar las relaciones con el mercado financiero global.

Diego Bossio. El actual titular de la Anses es valorado por Scioli: aparece fortalecido tras manejar la millonaria caja del organismo, que incluyó no sólo el pago a jubilados y pensionados sino también el reparto de computadoras y el otorgamiento de créditos para viviendas populares. Se lo menciona para Infraestructura.

También se hace referencia a una nueva cartera dedicada exclusivamente a la construcción y financiamiento de viviendas.

La guerra por la agenda sciolista

Las chicanas tienen que ver con la apreciación que cada grupo tiene del otro.

Los economistas coordinados por Bein, los del último grupo, se ven a sí mismos como quienes prestigian la candidatura del gobernador. Los que tienen más para perder porque tienen un recorrido político.

Los actuales colaboradores de Scioli en la provincia critican por lo bajo: "Daniel los puso para dar señales a los mercados. Pero los ideólogos de la estructura del próximo plan seremos nosotros", confía uno de ellos, que frecuenta al mandatario desde hace una década y media.

Quienes lo conocen aseguran que Scioli se siente cómodo navegando en esa ambigüedad: la de contar con funcionarios que siguen sus instrucciones sin fisuras, ideologizados, y también con expertos de alto perfil en los medios y que son un canal directo con bancos locales y extranjeros (Blejer) y también con el sector productivo (Peirano).

En el tramo final de la campaña, Scioli le dio un espaldarazo a Bein sin descuidar a los hombres y mujeres que vienen acompañándolo en la Provincia. Por eso, hace dos semanas les pidió que levantaran ellos también el perfil en los medios.Batakis, Woyecheszen, Arlía y Marangoni fueron los elegidos.

En el caso del presidente del Banco Provincia, tiene la responsabilidad -junto con Bein- de atender a los fondos de inversión de Wall Street que quieren conocer al detalle la propuesta del actual gobernador.

El destino de Bein

¿Ministro de Economía? ¿Presidente del Banco Central? ¿Un asesor outsider?

La información que se ha filtrado desde el ámbito político es que Bein ya le manifestó a Scioli que él no quiere ser ministro de Economía y que preferiría evitar un cargo de primera línea. El economista busca alejarse del estrés y de las tomas de decisión cotidianas.

"Nadie sabe el despacho que ocupará. Sólo que será el líder del equipo económico de Scioli presidente", refiere un miembro del círculo íntimo.

Ese liderazgo sobre la economía podría darse de diferentes maneras. Una de ellas sería la de formalizar un cargo de "asesor personal del presidente", como existe en otros países.

Se trataría de un "consigliere" sin obligaciones formales, pero con acceso directo al oído presidencial y una especie de jefe informal de todo el equipo.

La otra posibilidad es que Bein ocupe un cargo relevante pero con menos estrés diario que el de ministro de Economía.

En este sentido, las miradas apuntan al Banco Central. Pese a que Scioli lo respaldó públicamente, en su entorno creen que Vanoli podría dejar el cargo a fin de año. Y que Bein recalaría como próximo jefe del BCRA.

En todo caso, suponiendo que finalmente Scioli se alce con la victoria electoral, a lo que se apunta es a que Bein se convierta en el coordinador de la política económica que se lance el próximo 10 de diciembre.

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