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Según una encuesta de Management & Fit, Scioli, recibiría si se votara hoy la misma proporción de sufragios que consiguió en las PASO
04/10/2015 - 12:15hs

A 21 días de la elección que definirá la herencia del kirchnerismo, no hay una perspectiva clara sobre lo que ocurrirá en la elección presidencial del próximo 25 de octubre.

Según una encuesta de la consultora Management & Fit, Daniel Scioli, el candidato del Frente para la Victoria, recibiría si se votara hoy la misma proporción de sufragios que consiguió en las PASO: un 38,6 por ciento. 

Sus dos perseguidores más inmediatos, Mauricio Macri y Sergio Massa, están frente a situaciones opuestas.Macri tiene una intención de voto de 27,9% -lo cual refleja una pérdida respecto de los 30,12% que consiguieron en conjunto los tres candidatos de la alianza Cambiemos en las PASO.Massa, en tanto, muestra un 21,5%, un número que confirma un crecimiento sobre los 20,5% que había obtenido en total la coalición UNA.

Esos números surgen de la proyección de las respuestas de los encuestados y también revelan un repunte de Margarita Stolbizer, que de los 2,09% que consiguió en las PASO hoy obtendría 6 puntos. Los otros dos candidatos, Nicolás del Caño (del FIT) y Adolfo Rodríguez Saá, empatarían en 2,2%.

El escenario que muestran esas cifras deja certezas planteadas y misterios abiertos. - Entre las primeras se cuenta la muy clara y consolidada ventaja de Scioli sobre el resto. También se pueden percibir el golpe que produjo en la imagen de Macri el escándalo por las denuncias contra el ex candidato a diputado Fernando Niembro y el fruto que generaron los esfuerzos de Massa por sellar los votos que optaron en las PASO por su contrincante y aliado José Manuel De la Sota. La hiperactiva campaña de Massa le permitió incluso convencer a personas que en agosto no votaron por UNA. Stolbizer también puede celebrar: todo indica que buena parte de quienes se inclinaron por Ernesto Sanz y Elisa Carrió -los aliados que derrotó Macri- hoy se inclinarían por ella y no por el jefe de gobierno porteño.

- Entre las incógnitas, se destaca: ¿La clara ventaja de Scioli le alcanzará para ganar en primera vuelta, o deberá enfrentar al segundo en un ballottage el 22 de noviembre? La encuesta indica que habrá segunda vuelta, ya que Scioli no llegaría al piso del 40% con una ventaja de 10 puntos sobre el segundo que exige la normativa para ganar en un sólo comicio. Esa foto es la que resisten Scioli y sus dirigentes más cercanos, que insisten en que podrán ganar en el primer turno.

Del estudio de M&F, terminado el 30 de septiembre y en el que se consultó a 2.400 personas en todo el país, también surge que Massa tiene la mejor imagen entre los encuestados. Un 37,3% cree que el jefe del Frente Renovador tiene una imagen “muy buena” o “buena” y un 21,8% la considera “mala”.

El diferencial entre esas dos magnitudes -el número que suelen mirar políticos y encuestadores– llega en el caso de Massa a 15,5%. Stolbizer, la segunda candidata con mejor desempeño en ese rubro, tiene un diferencial entre imagen positiva y negativa de 13,2%, mientras que Scioli obtiene un 11, 1% y Macri un 2,7 por ciento.

Fuera de los candidatos, la presidenta Cristina Kirchner muestra un diferencial de imagen de 8,3%, según la misma encuesta. La gestión de la funcionaria que conduce el país desde hace ocho años, por su parte, consigue un 39,2% de aprobación y un 53,1% de desaprobación, lo cual implica una leve mejora por sobre las cifras que había conseguido Cristina en agosto, la última medición que había hecho M&F consignada por Clarín.

Casi dos tercios de la gente dice que no cambiará su voto

Según la encuesta, un 64,5 % de los votantes “tienen decidido su voto y no hay posibilidad de que lo cambien”. A pesar de que son muchos menos, sin embargo, los que determinarán la suerte de los candidatos son el tercio restante. En ese grupo se cuentan el 20,9% que dice tener “decidido el voto pero todavía puede cambiarlo” y el 13,9% que “aún duda entre dos candidatos”.

El estudio de M&F marca que esa situación no varió mucho desde las PASO. En la primera quincena de agosto, un 62,9% de los encuestados decía que no veía ninguna posibilidad de cambiar su voto, una cifra que trepó al 66,1% de la segunda quincena de ese mismo mes. Por su parte, tras las Primarias, un 19,5% decían que tenían una opción pensada por un candidato pero aún podían modificarla, y esa cifra trepaba al 18,9% quince días más tarde. Por último, a principios de agosto el 16,5% admitía que dudaba entre dos postulantes y ese porcentaje subió al 13,8% a fin de ese mismo mes.

La misma encuesta muestra un dato que, si se comprueba, podría ser inédito en la historia de las elecciones. Sólo la mitad de la gente asegura que votará la boleta completa, en un comicio que, por ejemplo, en la provincia de Buenos Aires, tiene nóminas de siete tramos distintos, ya que en ese distrito se elegirá presidente y vice, parlamentarios al Mercosur por distrito nacional, gobernador y vice, diputados nacionales, parlamentarios al Mercosur por la provincia, legisladores provinciales e intendentes y concejales. En rigor, el 49,2% de los consultados dice que tiene pensado poner en la urna la sábana sin cortarla, mientras que el 35,6% admite que planea combinar entre las categorías de distintas boletas o que pondrá algunos de los tramos en blanco.

El trabajo también explica cómo reaccionan los votantes de cada espacio con respecto a los cortes de boleta. Los más “fieles” son los de Scioli: un 63,7% de sus votantes dice que piensa botar la boleta del Frente Para la Victoria completa. Los de Macri quedan en segundo lugar en ese rubro: un 53,6%, asegura que no cortará la boleta de Cambiemos. La disciplina partidaria también se ve reflejada entre los apoyos del Frente de Izquierda, ya que el 52,8% de los votantes de Del Caño promete que no hará cortes en la lista. Entre los candidatos con mejores perspectivas, Massa recibe los votos menos disciplinados: sólo un 40,3% dice que votará completa la papeleta de UNA.

Con respecto a las preferencias de los votantes respecto del cambio del modelo de gobierno que impuso el kirchnerismo en esta última década, el 39 % de los encuestados sostiene que prefiere que cambie el modelo por completo, mientras que el 31,2% intentará con su sufragio que el próximo presidente combine cambio y continuidad. A su vez, el kirchnerismo mantiene un núcleo duro de 27,3% que quiere que se profundice el modelo. Esa división en tres tercios se mantiene desde las PASO y el dato saliente es que sólo un 40,4% de los votantes de Macri pretende que el modelo “se cambie por completo”. Más aún: un 5,5% de quienes anuncian que votarán al jefe de Gobierno porteño creen que el modelo del kirchnerismo debe profundizarse.

En referencia a la situación económica del país en los próximos meses, un 36,3% cree que estará “igual”, un 29,1% “peor” y un 19,8% “mejor”.

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