La Abogacía del Estado español pidió que Leo Messi sea condenado a 22 meses y medio de cárcel por tres delitos contra la Hacienda pública cometidos entre 2007 y 2009.

A diferencia de la Fiscalía, el organismo, que representa los intereses de la Hacienda española, sí acusa al delantero del Barça, además de a su padre, Jorge Horacio Messi.

La abogacía reconoce en su escrito que Messi es "profano" en temas tributarios, pero que "no puede ignorar" que buena parte de sus ingresos por la explotación de sus derechos de imagen llegaban a través de empresas ubicadas en paraísos fiscales, como Uruguay o Belice.

El juez ya inició el juicio oral contra Messi y su padre tras recibir el escrito de la Agencia Tributaria española que señala a ambos. La Fiscalía por el contrario sólo acusa a Jorge Horacio al considerar que fue él quien organizó el entramado societario que permitió defraudar a Hacienda 4,1 millones de euros.