El sector inmobiliario fue uno de los más afectados por el cepo al dólar que durante estos años marcó el rumbo del mercado.

Las políticas que se tomaron fueron clave para que se paralicen las inversiones y se termine de frustar el sueño de muchos argentinos que pensaron en su casa propia.

Ahora, con el cambio de gobierno, las expectativas de los empresarios se incrementan.

"El domingo marcó el fin de un gobierno después de 12 años en el que se acumuló poder y se intervino la economía", afirmó Eduardo Costantini, CEO de Consultatio, en un encuentro con referentes del sector.

Según Costantini, "ahora los privados tendrán mayor libertad. Además, es importante que haya en el gobierno equipos más profesionales que abran la posibilidad de que el país se abra al exterior. Si se hacen las cosas bien se podrá enderezar todo lo que hace falta, como el dólar o las tarifas, aunque estimo que todo se irá dando con cierto gradualismo".

El empresario compartió un panel de Real Estate con Santiago Tarasido, CEO de Criba; Federico Weil, fundador y CEO de TGLT, y Miguel Camps, presidente de Argencons.

Tarasido, por su parte, coincidió con la visión positiva. "Se nota un cambio de tendencia; mayor optimismo tanto para la obra pública como para la privada. Lo noté en el alto valor que alcanzó la acción de la empresa durante las últimas semanas, que demuestra que el mercado descuenta una mejora para el sector", apuntó.

Weil también destacó las buenas perspectivas, aunque hizo hincapié en el menor movimiento que mostró la actividad. "No fue el año de mayores lanzamientos debido al fuerte proceso político que se vivió y las oscilaciones del dólar. Pero es algo que apuntamos a cambiar", destacó el empresario.

Camps se refirió al cambio que generarán las buenas expectativas. "Durante la última década nos basamos sobre todo en el negocio de los fideicomisos, porque es lo que permitía el mercado. Para 2016 podremos encarar la estrategia desde otro ángulo ya que se estima que se daría una mejora en el acceso al crédito. Esto nos permitiría llegar de mejor forma a la clase media, que sin financiamiento no tiene opciones", dijo.

Costantini también se refirió al crédito. "Se dará en el mediano y largo plazo, no podemos esperar que sea antes por los altos índices de inflación. Para llegar a un dígito pueden llegar a pasar tres años", aseveró.

Respecto de lo que significa trabajar con alta inflación, Tarasido precisó que "uno ya se acostumbra a operar así. Nos amoldamos. Hace 10 años que convivimos con esto, por lo que no nos puede sorprender".

Eduardo Costantini sostuvo que "el momento de comprar es ahora" ya que, a su entender "si todas las variables económicas se dan como se espera, los precios van a subir", aunque no ofreció precisiones.

Federico Weil precisó que "siempre que hay una devaluación termina afectando, incluso los que se venden en pesos, ya que tienen un correlato en dólares.