Martín Yeza, el intendente electo de Pinamar por Cambiemos, definió sin muchas vueltas la situación de la Comuna: “Esto es un quilombo”. 

“Es una situación lamentable que no debe escapar a ninguna municipalidad bonaerense en general. Acá hay una situación de desidia importante. En una reunión por ejemplo el funcionario saliente estaba tomando cerveza en el despacho municipal, eran las 11 de la mañana y era una reunión pactada”, dijo Yeza.

“En el inventario de tránsito hay un inventario con 24 vehículos y solo funcionan tres. El 10 de diciembre tengo que llevar 21 vehículos al taller. En Pinamar en el verano tenemos un quilombo terrible con los cuatriciclos, y voy a tener que controlar todo ese quilombo con una moto y un auto”, sostuvo.

“Hace un año la provincia de Buenos Aires creó una ley con fiscalías especiales. En Pinamar tenemos problemas con las usurpaciones. Acá no se consiguió un lugar para la fiscalía, y en los últimos seis meses no se consiguió wifi”, agregó.

“La Municipalidad tenía una deuda en ese momento con la cooperativa. Toda la Municipalidad funciona con 3 megas de Internet, a esto con un agravante porque en el hospital hay diagnóstico por imagen a distancia”, sostuvo.

Destacó, además, que la municipalidad no puede garantizar una comunicación telefónica entre Pinamar y Cariló porque “es considerada como llamada de larga distancia”, y por deudas ese servicio no está habilitado.

Bajo el hashtag #anecdotasdetransición, vía Twitter el funcionario electo hizo un listado de la cantidad de irregularidades con las que se encontró no bien cruzó el umbral del Municipio.

En una transición, el inventario sobre los activos del municipio es clave. En el desarrollo de esta tarea también aparecieron algunas particularidades. "En un área administrativa figuran 27 sillas, pero faltan 25", agregó.

La situación económica es preocupante. En 6 días el intendente tiene que pagar 13 millones de pesos en sueldos, pero sólo tiene 6 en la cuenta.

Esta circunstancia alarma a Yeza, quien manifestó tener una solución a corto plazo: "Pinamar tiene la particularidad de que en los primeros 3 meses del año se recauda cerca del 50% del ingreso anual; no nos preocupa el pago salarial de enero sino más bien el de junio y julio, ya que queda una deuda flotante cercana a los 60 millones y un déficit operativo cercano a los 33 millones".