El ex vicepresidente Carlos Ruckauf sufrió el lunes un intento de asalto cuando ingresaba a su vivienda en el barrio porteño de Palermo. 

El ex funcionario fue víctima de una "salidera" bancaria, ya que dos motochorros lo sorprendieron al regresar a su vivienda y sus custodios abatieron a uno de los delincuentes.

Como saldo del hecho, Ruckauf recibió un culatazo en la cabeza que le provocó lesiones, en tanto su guardaespaldas mató a uno de los ladrones. Otro de ellos logró escapar.

"Nos pasó lo que le pasa a tanta gente en la Argentina, lo que pasa es que como yo tengo cierta notoriedad y terminó con la muerte de un delincuente, se convirtió en una noticia", reflexionó este martes Ruckauf, en diálogo con Radio Mitre. 

"Estábamos entrando al edificio donde vivimos con mujer, se tira encima de mí un muchacho y me grita 'dame la plata'. Yo me doy vuelta creyendo que es un amigo de mi hijo porque además no tenía plata encima. Sin decirme una cosa más, me pegó con el arma en la frente", relató

"Yo me caí por el impacto. Por suerte, como me decía el médico del Otamendi, no me afectó la masa encefálica. Solamente tengo la contusión y un poco de dolor de cabeza", agregó, y descartó que el incidente tenga detrás alguna motivación política. 

Salidera

El hecho se inició poco después de las 13 del lunes, cuando Ruckauf y su esposa habían ido a hacer un trámite a un banco ubicado en avenida Las Heras y Salguero, en Palermo.

Cuando la pareja regresaba a su casa, en un complejo de dos torres ubicado en Salguero y Las Heras, a una cuadra de la sucursal bancaria, fueron sorprendidos por un delincuente que había llegado junto a un cómplice en una moto.

De acuerdo a testigos consultados por la agencia DyN, el ladrón golpeó en la cabeza a Ruckauf con un "culatazo", mientras le arrancó la cartera a la esposa del ex vicepresidente.

El ataque fue advertido por uno de los custodios de Ruckauf, que se encontraba en una camioneta afuera del edificio, y de inmediato intervino. El custodio dio la voz de alto y disparó contra el delincuente, que murió en el lugar, mientras su cómplice escapó.

Ruckauf, en tanto, tuvo un corte profundo en la cabeza como consecuencia del golpe, fue asistido por una ambulancia del SAME y se encontraba en buen estado.

No es la primera vez que un custodio de Ruckauf debió intervenir en un intento de robo. En el 2002 Adrián Falduto, de 40 años, perdió la vida cuando esperaba al entonces canciller, en un bar de Palermo mientras el funcionario visitaba a su hija.

En ese momento un ladrón entró al negocio a robar y el policía, que estaba de traje y desayunando, intentó evitar el asalto. Fue entonces que el ladrón disparó y el policía respondió con un tiro mortal, sin ver que un segundo ladrón estaba detrás de él: le pegó un tiro en la espalda y, cuando cayó, lo remató con un disparo en la nuca, tras lo cual escapó.