La Secretaría General de la Presidencia informó que tanto Mauricio Macri como todos los funcionarios dentro de Casa Rosada dejarán de acceder a la comida de forma gratuita.

Desde el 22 de febrero, el Presidente y los ministros sólo tendrán agua, té o café sin costo.

La circular de la Secretaría aclara que si desean consumir "gaseosas, medialunas, tostados y galletitas (dulces y saladas)", deberán pagar.

El Gobierno ya había demostrado gestos respecto de no gozar de privilegios en las comidas.

En la lujosa ciudad de Davos, la delegación argentina eligió un restaurante económico en el que hay un menú de almuerzo por 18 dólares.

Hasta el día de hoy, el almuerzo en la Casa Rosada mantiene el precio que en su momento fijó el kirchnerismo en 2013 y que está lejos de la realidad del resto de los argentinos.

Los funcionarios gozan de un menú por apenas 3 pesos.

La Secretaría General de la Presidencia evaluaba darle la concesión del comedor a una empresa con trayectoria en el rubro y que cobrará precios acordes a la actualidad.