Como secretario de Comercio, Guillermo Moreno se caracterizó por un estilo provocador, desafiante y confrontativo que comienza a pasarle factura en el ámbito judicial: el juez Claudio Bonadio ordenó procesarlo por incitación a la violencia colectiva y peculado.

Según adelantaron fuentes judiciales, se investiga la difusión de frases con contenido hostil contra el grupo Clarín, en el marco de distintos actos públicos: recordado es su merchandising contra el multimedios, que incluía globos, llaveros, pancartas y hasta indumentaria.

Además se investiga a Moreno por usar recursos del Estado por la adquisición de ese material de propaganda contra el Grupo Clarin. Por esa razón, el juez Bonadio dispuso un embargo sobre los bienes del ex funcionario hasta cubrir la suma de $350.000.

El juez cree que “para el despliegue del accionar descripto, Mario Guillermo Moreno contó con la colaboración del Directorio de la Corporación del Mercado Central de Buenos Aires, integrado por el Presidente Carlos Alberto Martínez; Vicepresidente Fabián Enrique Dragone y el Gerente General Guillermo Rubén Cosentino, quienes habrían utilizado recursos del erario público para la adquisición del material de propaganda contra dicho grupo empresarial”.