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Jeb Bush, precandidato a la presidencia de EEUU por el partido republicano, dijo al ejecutivo que "siga pidiendo" por las garantías personales en Internet
12/02/2016 - 11:40hs

Tim Cook, CEO de Apple, pidió al presidente estadounidense Barack Obama que garantice el derecho al cifrado y la mensajería segura.

Cook también reclamó que que los agentes del orden y la ley dejen de referirse a la encriptación como una "herramienta de terroristas", porque se trata de una forma básica de privacidad que tendría que poder ser legalmente disfrutada por todos los ciudadanos.

A algunas de las compañías proveedoras de Internet parece no haberles sentado bien las declaraciones de Apple, lo que hace pensar que también estarían de acuerdo con las puertas traseras.

"No creo que sea decisión de Silicon Valley", dijo Randall Stephenson, consejero delegado de AT&T.

"Es una tontería decir que hay algún tipo de conspiración entre el gobierno estadounidense y AT & T", concluyó, a pesar de que los documentos filtrados por el ex contratista de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA), Edward Snowden, en los que se puede ver una "gran colaboración" entre ellos.

Algunos políticos también entraron al debate y animaron a Apple a seguir peleando.

Jeb Bush, precandidato a la presidencia de Estados Unidos por el partido republicano, dijo a Cook que "siga pidiendo", porque se trata de "un tema muy importante", ya que el argumento de que los terroristas están utilizando cada vez más el cifrado para evitar su detección está "viciado".

Algunos criptógrafos del Centro Berkman de Harvard han realizado un informe en el que sugieren que las leyes estadounidenses sólo llegarán a una pequeña parte de los productos.

"Lo que esto demuestra es que las leyes nacionales relativas a las puertas traseras de cifrado no funcionarán", explicó Bruce Schneier, uno de los autores del informe.

"El mercado es muy internacional, y los 'malos' pueden cambiar fácilmente a los productos con cifrado extranjero y sin puertas traseras... Cualquier ley que obligue a los Estados Unidos a tener puertas traseras afectará principalmente a personas que no están preocupadas por la vigilancia del gobierno, o por lo menos a personas lo suficientemente indiferentes como para no comprar otros productos seguros", afirmó.

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