En tres meses, el Gobierno despidió a 10.921 empleados de la administración nacional. Se trata de un 5% de los puestos en el Estado, sin contar provincias y municipios, y la gran mayoría habían sido creados entre 2013 y 2015.

El ministro de Modernización, Andrés Ibarra, confirmó este martes el total de despidos en una rueda de prensa en la sede de Saenz Peña al 551. El dato, que había adelantado iProfesional el fin de semana, fue presentado en una nueva jornada de protestas contra las cesantías.

El funcionario explicó que el criterio de las cesantías fue "el no trabajo, la no aparición en los lugares de trabajo o la constancia de muy pocas horas en las dependencias", además de la "superposición de tareas". 

De los 10.921 contratos no renovados, precisó que 7.311 contratos corresponden a los 64.039 renovados en diciembre último. Los 3.610 restantes integran el universo de 13.467 empleos tercerizados, asistencias técnicas con universidades y otras modalidades.

Según Modernización, el 90% de los despidos se desprenden de las designaciones de los últimos dos años, que sumaron 24.000. Mediante el decreto 254/15, Mauricio Macri renovó esos puestos hasta el 31 de marzo y extendió 40.000 incorporaciones previas al 2013 hasta diciembre de 2016.

El ránking del achique fue encabezado por el Ministerio del Interior, a cargo de Rogelio Frigerio, donde hubo 1.342 despidos. Le siguió Desarrollo Social, con 1.165; Cultura, con 1.124; Salud, con 837; y Energía, con 702, de un total de 23 dependencias.

En cuanto a los concursos, Ibarra anunció el pase a planta de 2.500 personas de la administración pública durante 2016, mediante un proceso de selección de "curso-concurso". Son parte de los 10.000 empleados que llevan más de 10 años contratados, sin estabilidad laboral.

Además, el Gobierno realizará concursos públicos para cubrir 100 puestos en el Centro Cultural Kirchner. La institución bajo la órbita de Hernán Lombardi se deshizo la semana pasada de 64 empleados del ex Ministerio de Planificación, tras eliminar en enero más de 500 contratos.

Por otra parte, Ibarra se comprometió a convocar a los dos principales sindicatos del sector, UPCN y ATE, para poner en marcha dos mesas de diálogo para trabajar en "la organización del Estado, la jerarquización del empleo público y los ingresos por concurso".

Mientras tanto, los empleados nucleados en ATE realizarán este miércoles un paro nacional en las delegaciones del Ministerio de Trabajo, en rechazo a 250 cesantías. En paralelo habrá asambleas y retención de tareas en otras dependencias, tal como ocurrió la semana pasada, durante el plan de lucha iniciado por ATE Capital.

En su quinta jornada de protesta, el personal de la cartera laboral ingresó masivamente a la sede de Alem al 600. El conflicto se agravó en las últimas horas con el despido de una embarazada y cuatro empleados con discapacidad, según denunció la junta interna de ATE. 

Desde el gremio aseguran que la cartera de Jorge Triaca dio de baja personal con hasta 20 años de antigüedad, al tiempo que contrató a 120 empleados con sueldos de hasta $50.000. Se trata de cargos con categoría A y B que, por normativa, exigen al menos 10 años de antigüedad.

El ministro admitió el viernes que iban a analizar "errores y omisiones", pero ratificó la decisión política de no renovar algunos contratos y rechazó que el nuevo plantel llegara al centenar. "Es lógico que vengamos con gestión", dijo a este medio el titular del área laboral.

Solo entre el miércoles y el viernes pasado, hubo más de 3.000 bajas en la administración pública. Las cesantías se repartieron entre Cancillería, Migraciones, Justicia, Tecnópolis, Agroindustria, Jefatura de Gabinete, Cultura, Justicia, Hacienda, Educación, Biblioteca Nacional y Lotería Nacional.