El diputado nacional y ex secretario General de la Presidencia, Eduardo "Wado" De Pedro, fue imputado por presuntos sobreprecios en los gastos de viajes de la ex mandataria Cristina Fernández de Kirchner al exterior en 2015.

Fuentes judiciales informaron que el fiscal federal Ramiro González requirió el inicio de la acción penal contra el dirigente de "La Cámpora" en el dictamen que elevó al juez federal Sebastián Casanello.

En la mira de la pesquisa propuesta por el agente del Ministerio Público están las facturas que supuestamente habrían sido adulteradas en las rendiciones de cuentas de los viáticos para viajes oficiales a Cuba, Estados Unidos y Brasil.

Según pudo saber Télam, González pidio a Casanello que investigue la rendición de gastos de viajes presidenciales a Paraguay y Estados Unidos en el último semestre de 2015, en base a una denuncia presentada por el abogado Santiago Dupuy de Lome.

"Pasaban facturas truchas con el doble del valor que realmente gastaban, hay algunas con más de 300.000 dólares", dijo el letrado denunciante este jueves a Radio El Mundo. "No estoy de acuerdo con el fiscal con la falta de imputación a la ex presidenta", añadió. 

La denuncia, basada en publicaciones periodísticas, fue apuntalada por un informe de la SIGEN incorporado a la causa, donde se denuncian irregularidades en la rendición de gastos. 

Para el fiscal pudo haber "incumplimiento de deberes de funcionario público, abuso de autoridad y defraudación contra la administración pública".

Las presuntas maniobras irregulares habrían provocado al fisco pérdidas cuantificadas en alrededor de u$s335.000, según consignaron las fuentes relevadas por la agencia DyN.

González le pidió a la vez a Casanello que libre oficios a la Secretaría General de Presidencia y a la Oficina Anticorrupción para conocer quiénes intervinierion en las rendiciones de cuentas y si tiene una investigación en curso, respectivamente.

En los informes de la auditoría de la Sigen que tiene la fiscalía se alude a viajes del 1 de julio al 9 de diciembre de 2015. En las conclusiones se advirtió sobre "rendiciones de gastos con comprobantes apócrifos o adulterados" en al menos un viaje con un "perjuicio fiscal comprobado de 201.903 dólares", según la Sigen.

También se aludió a la "ausencia de detalle pormenorizado de servicios facturados en alojamiento y traslado de personal" y a irregularidades entre lo facturado y lo rendido en hotelería, por ejemplo en el hotel Mandarín Oriental de Nueva York durante un viaje de la ex presidenta Kirchner.