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En la reunión se dialogó sobre la "hoja de ruta" para el bloque. La funcionaria dio un espaldarazo a Temer al asegurar que se respetó la institucionalidad
23/05/2016 - 22:44hs

El encuentro entre la canciller argentina, Susana Malcorra, y su par brasileño, José Serra, generó una fuerte expectativa por tratarse de la primera cumbre de alto nivel tras la salida temporal de Dilma Rousseff de la presidencia y la llegada de Michel Temer

A menos de dos semanas de haberse hecho cargo de la diplomacia brasileña, el funcionario eligió a la Argentina como primer destino en reconocimiento del gobierno de Mauricio Macri al proceso institucional dispuesto en Brasil para resolver la crisis política que desembocó en la suspensión por 180 días de la presidenta Rousseff.

En el marco de una conferencia de prensa brindada en Casa de Gobierno, la funcionaria le dio un fuerte espaldarazo a la nueva gestión, al asegurar que el proceso de juicio político en contra de Dilma había respetado todos los procesos institucionales

Malcorra explicó que “si en algún momento del proceso en lo que queda por delante nosotros encontráramos que no se respeta la institucionalidad que corresponde, entonces estaríamos allí en condiciones de mirar y revisar la cuestión. Por ahora y en este momento, no vemos que esto sea así y nos sentimos muy sólidos en ese sentido”.

No es responsabilidad de Argentina legitimar o no la gestión del presidente Michel Temer. La realidad es que hay un proceso interno en Brasil que se ha seguido a rajatabla y que nosotros hemos estado mirando muy de cerca”, agregó la ministra.

La canciller sostuvo además que la reunión fue “una señal clara de continuidad institucional y de trabajar con nuestro principal socio, como lo hemos dicho en múltiples ocasiones: Brasil es el socio de la Argentina y lo que pase en Brasil afecta a lo que pase en la Argentina. Como tal, no tenemos alternativa más que trabajar junto con ellos”.

Y agregó: “Tuvimos una primera reunión, que fue muy importante porque fijamos inventario de dónde veíamos que estábamos parados y hemos decidido una serie de pasos para seguir trabajando, así que es la naturalidad y lo que corresponde a un vecino y socio como Brasil”.

La importancia de la visita de Serra también quedó plasmada en que el propio Macri recibió a Serra en una audiencia privada. 

Compromiso a reducir el déficit bilateralLos ministros de Relaciones Exteriores de ambos países acordaron un nuevo mecanismo de diálogo bilateral que tendrá, entre sus principales objetivos, restaurar el retroceso de más de 40% registrado en el intercambio durante los últimos cinco años. 

Sin embargo, el punto más esperado por los funcionarios argentinos era obtener el compromiso de la contraparte brasileña de trabajar para revertir el creciente desbalance, que implicó un déficit para la Argentina de u$s1.300 millones en el primer cuatrimestre de 2016, con importaciones en alza y exportaciones en caída, producto de la crisis de la nación vecina.

El Mecanismo de Coordinación Política fue establecido en un memorando de entendimiento firmado en el Palacio San Martín.

La necesidad de reactivar el espacio de diálogo en materia de comercio bilateral era esperado por varios sectores productivos argentinos, preocupados ante una eventual apertura indiscriminada de las importaciones a partir del nuevo sistema de administración del comercio y a los excedentes exportables que generó la crisis en Brasil y que podrían tener como destino final a la Argentina.

Ese temor comenzó a cristalizar en la relación comercial que, marcada en los últimos años por la recesión y la falta de crecimiento en ambos países, adquirió una nueva tendencia a partir de la profundización de la crisis en Brasil que perjudicó a casi todos los rubros que Argentina exporta hacia ese mercado.

De los u$s39.600 millones que los países comerciaban en 2011, el intercambio se redujo a u$s23.083 millones.

El año pasado, la balanza fue deficitaria para Argentina por u$s2.515 millones, muy por debajo del comercio casi equilibrado de u$s139 millones a favor de Brasil que se había alcanzado en el 2014.

En el primer cuatrimestre del año -según informó la agencia Télam-, las exportaciones continuaron en retroceso pero las importaciones aumentaron y determinaron un déficit para Argentina de u$s1.388 millones.

Las ventas al país vecino disminuyeron en el período 25% y las compras aumentaron 0,8%, pero en abril la brecha se amplió, al caer las exportaciones 17% y crecer las importaciones 4%, en términos interanuales. 

En diálogo con iProfesional, Miguel Ponce, director del Centro de Estudios para el Comercio Exterior, afirmó que "todo lo que tienda a mejorar el vínculo entre la Argentina y Brasil, así como la coordinación de políticas comerciales que tiendan a aumentar el intercambio, es positivo". 

Replantear el Mercosur A través de un comunicado, Cancillería argentina destacó la necesidad de "perfeccionar el Mercosur e incorporarle nuevas disciplinas en línea con los procesos de integración más modernos y dando mayor dinamismo a su relacionamiento externo, tanto a nivel regional como extra-regional, particularmente en el contexto de la negociación con la Unión Europea y otros procesos negociadores en curso". 

Fuentes cercanas a la diplomacia argentina aseguraron a iProfesional bajo estricto off the record que efectivamente el futuro del bloque fue otro de los puntos clave de la reunión. 

"Se dialogó sobre el Mercosur y, sin que se estableciera una hoja de ruta o un programa de trabajo, sí hubo coincidencias en la necesidad de flexibilizar el Mercosur, para que los socios puedan avanzar en negociaciones bilaterales", amplió la fuente. 

"Hoy preocupa y mucho la crisis política que se vive en Venezuela. Y ambos gobiernos entienden que la administración de Maduro hoy representa un problema para el futuro del bloque", agregó. 

Cuando Serra se había anotado hace unos años por la carrera presidencial, sus declaraciones en contra del Mercosur –al que consideraba un “lastre” para la economía brasileña- le ganaron la antipatía del kirchnerismo

Al asumir, Serra afirmó que “junto con los demás socios, necesitamos renovar el Mercosur”. 

Welber Barral, ex secretario de Comercio Internacional de Lula, había asegurado a este medio que “Serra está planteando la idea de que el bloque tiene que ser más dinámico y dar más libertad a sus socios, para centrarse en temas más comerciales y menos políticos”.