Con el propósito de apuntalar las ventas en el sector y generar oportunidades más favorables a los ahorristas, el Banco Central recomendó en las últimas semanas a algunas terminales automotrices que evalúen la posibilidad de lanzar créditos para autos 0 km atados a UVI, la nueva unidad de cuenta que pretende replicar la inflación y que fue ideada inicialmente para financiar viviendas.

La propuesta oficial, según pudo reconstruir este diario de diversas fuentes del sector, es incluir en el menú de financiaciones que ofrecen a sus clientes nuevas líneas que permitan a los particulares llevarse el auto desde el primer día y pagar cuotas más bajas que las actuales, con un ajuste que estará determinado por la UVI más un interés adicional.

Desde al menos dos terminales se mostraron interesadas y prometieron evaluar la medida. En el sector reconocen que, actualmente, sólo 40% de los planes de ahorro tiene un final feliz: en el 60% restante de los casos, quienes lo suscriben no llegan a adjudicar el auto por diferentes razones.

A través de sus propias entidades de crédito y en sus concesionarias, las compañías otorgan financiaciones con cuotas que no son fijas -que evolucionan con el valor del auto- y suman gastos en el otorgamiento (administrativos, seguros de vida, entre otros) que elevan el costo financiero total al 10% anual.

Los clientes quedan de esta manera expuestos a cualquier evento que suceda en el sector, como una devaluación o un shock en los costos de las unidades. El ajuste con UVI, en cambio, incorporaría la ventaja de que las cuotas acompañarían la evolución del promedio de todos los precios de toda la economía, y no puntualmente lo que suceda en el sector automotor. Esto porque, en general, los salarios de quienes toman un crédito están más atados a la inflación que al valor de los vehículos.

Según datos de la asociación de concesionarios de automotores (Acara), hubo 113 suscripciones de planes de ahorro en los primeros tres meses del año, un 10,5% más que en igual período del año pasado. Y hoy el 74% de los créditos para la compra de autos es otorgado por las terminales y las financieras de estas compañías.

La propuesta del Central, conversada en reuniones que mantuvieron sus autoridades con automotrices, pretende complementar y no competir con las líneas de crédito que ya lanzaron el Banco Nación y el Provincia para autos 0 km, según consigna Ambito.

Los préstamos ya acordados por Juan Curutchet y Carlos Melconian con Volkswagen, Ford y Fiat son a tasa fija del 25% y a 36 meses de plazo, pero suponen cuotas mensuales inicialmente más altas que las de un crédito atado a UVI.

Así y todo, un obstáculo para que esta propuesta sea bien recibida por las automotrices podría ser la decisión de considerar el índice de la construcción (el ICC), para ajustar la UVI, en lugar de la inflación (el CER). Este cambio se dará si prospera en la Cámara de Diputados un proyecto de ley que ya recibió media sanción en el Senado nacional.