El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, volvió a diferenciar al Gobierno de los ataques de la diputada Elisa Carrió contra el titular de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, y aseguró que desde la Casa Rosada "no nos podemos hacer cargo" de la opinión de cada uno de los "90" legisladores que integran el frente Cambiemos.

Frigerio razonó que así como "el Poder Judicial y el Poder Legislativo tienen que controlar al Poder Ejecutivo", también es "sano" que el Legislativo monitoree "de alguna manera al Poder Judicial" e insistió en apostar por la "división" de los tres estamentos del sistema democrático.

En declaraciones radiales, el funcionario nacional tomó distancia de los embates de Carrió a Lorenzetti, contra quien la líder de la Coalición Cívica-aliada del Gobierno nacional- viene lanzando sospechas sobre su patrimonio personal o por sus presuntas aspiraciones de ir por la Presidencia de la Nación y estar operando sobre distintos senadores.

"Carrió forma parte del Poder Legislativo; (en representación de Cambiemos) tenemos 90 diputados y varios senadores, no nos podemos hacer cargo" de lo que dice cada uno de ellos, aclaró Frigerio.

El ministro del Interior, Obra Pública y Vivienda ratificó que la Casa Rosada cree "profundamente en la división de poderes".

"El Poder Judicial y el Poder Legislativo tienen que controlar al Poder Ejecutivo, tienen que revisar el pasado, que por suerte lo están empezando a hacer los jueces, y también tienen que revisar el presente, a nosotros, a los funcionarios actuales", remarcó.

Añadió que, asimismo, "el Poder Legislativo tiene también que controlar de alguna manera al Poder Judicial".

"Es sano el control cruzado entre poderes si, efectivamente, son independientes como nosotros pretendemos que sea", destacó.

En el marco de la pelea que Carrió reflotó en los últimos días con Lorenzetti, el titular de la Corte rechazó con dureza algunas de las acusaciones de la legisladora, como estar supuestamente frenando el ingreso del candidato Horacio Rosatti al máximo tribunal de justicia.

En tal sentido, el juez comparó a Carrió con las practicas de kirchnerismo y con la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, quien había tratado de "chorros" a los integrantes de la Corte.

"Cambian las personas pero siguen las mismas prácticas agraviantes y, por eso, lo que antes nos parecía incorrecto también debe serlo ahora, porque debemos ser coherentes con nuestros principios", subrayó el magistrado a través de un reciente comunicado que difundió en la página web del Centro de Información Judicial (CIJ).