La moneda brasileña completó ayer su racha alcista más larga en dos años y fracción como resultado de la respuesta positiva de los inversores a las señales del candidato a banquero central de Brasil respecto a una nueva etapa menos intervencionista en el mercado cambiario.

La moneda avanzó 2,4% a 3,3622 por dólar ayer, su mayor nivel desde julio pasado. La mayoría de las monedas emergentes avanzaron ayer luego de que se publicara información sobre comercio de China, el principal socio comercial de Brasil, que superaron las expectativas del mercado.

El real se disparó cuando Ilan Goldfajn, el ex economista jefe de Unibanco Holding, dijo durante su audiencia de confirmación en el Senado del martes pasado que está comprometido con un tipo de cambio flotante y que la política monetaria –no el precio del dólar– debería ser usada para combatir a una inflación que está por encima de las metas.

Un mercado que había cuestionado la autonomía de la autoridad monetaria bajo la presidencia de Alexandre Tombini tomó los comentarios como una señal de que la nueva conducción del banco reducirá el programa de venta de swaps que tienden a debilitar al real.

"Goldfajn envió un mensaje al mercado respeto a que no tienen la intención de intervenir tanto como Tombini", dijo a Bloomberg Jefferson Rugik, un operadora cambiario de Correparti Corretora de Cambio de Curitiba, Brasil. "Eso es bien visto por el mercado y es un factor alcista para el real."

Goldfajn, un economista que tiene un doctorado en el Massachusetts Institute of Technology fue director de política económica del Banco Central de Brasil entre 2000 y 2003, reemplazará a Tombini como presidente de la autoridad monetaria de Brasil. Los senadores votaron 56 a 13 en favor de su designación, lo que fue visto como un fuerte respaldo político