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Las cableoperadoras incorporan a Netflix en sus combos de triple o cuádruple play para ganar o fidelizar clientes. Pero el secreto pasa por la banda ancha
29/06/2016 - 09:45hs

Las películas y series online se presentan como la carnada para que las empresas de telecomunicaciones retengan o puedan sumar clientes en un escenario que promete mayor competencia.

Telecentro ya ofrece Netflix gratuito durante tres meses para quienes están suscriptos al abono premium.

En tanto, Cablevisión incorporará la oferta del producto de House of Cards a finales de este año, cuando lance a nivel masivo su plataforma de servicios online.

Lo mismo acaba de resolver Telecom que, a través de Personal y Arnet, también sumaron a Netflix en un combo de manera gratuita durante tres meses para tentar a los clientes de adherir a su propuesta.

Ya sea a través de Netflix, Qubit o cualquier otro proveedor de películas en formato de videoclub, las proveedoras de TV paga buscarán que aquellos clientes que cuentan con abonos básicos se tienten a pasarse a los premium, un cambio que le garantiza mayores ingresos.

Pero, ¿será fácil esa migración? Quiénes están suscriptos a esos paquetes básicos, ¿optarán por una prestación más cara? ¿O, más bien, les resultará más conveniente permanecer en el servicio más económico y adquirir otros por fuera?

Por lo pronto, la respuesta no parece residir sólo en la oferta de contenidos, sino en la calidad de la conectividad.

Es verdad que ese contenido es el rey. Pero también es cierto que ante tanta oferta -a la que se puede acceder de distintas maneras- el secreto vuelve a estar en el acceso.

Otro aspecto central viene por el lado del universo de hogares, que es por demás variado. No es lo mismo uno en donde vivan mayores de 45 que aquellos en los que haya niños o adolescentes.

Hay algunos en los que la TV paga sigue teniendo valor, mientras que en otros surge el replanteo sobre si vale la pena seguir manteniendo el abono ya que "nunca hay nada para ver".

Distinta es la situación en aquellos casos en los que hay chicos de cualquier edad. Concretamente, los llamados "millennials", que son los que toman las decisiones respecto de los consumos de servicios tecnológicos. Y cuidado con que a algún padre se le ocurra pensar en cortar el acceso a Internet o a Netflix.

Por lo pronto, aquí parece residir la clave de cómo se irán planteando las estrategias comerciales de los prestadores de servicios convergentes.

Efectivamente, quien produce los contenidos se lleva gran parte de los ingresos. Pero la diversidad y la forma de acceder a ellos es cada vez más amplia y variada.

Todos, en definitiva, apuntan ofrecer variedad de propuestas a sus usuarios. Pero resulta fundamental el hecho de contar con una buena conexión a Internet.

En este contexto, aparece un proceso de reformulación, al menos desde el punto de vista de los consumidores.

La mayoría priorizará el acceso a través de banda ancha por sobre cualquier otra cosa. La conexión parecería volver a ser la vedette del sector, en sus dos formas: fija e inalámbrica.

Esto pasa ahoraCablevisión ya anticipó que entre octubre y noviembre, lanzará a nivel masivo su plataforma de acceso a contenidos y entretenimiento, tal como consignara iProfesional.

Es decir, banda ancha y televisión HD a través de un decodificador que permitirá grabar, retroceder, retomar un programa iniciado hasta 24 horas antes, Netflix incluido.

Este último ya representa el 28% del tráfico de video que Fibertel soporta en su red, según señaló Gonzalo Hita, gerente comercial de Cablevisión/Fibertel.

A esta fuerte penetración se le suma otro aspecto no menor: donde entra Netflix baja la piratería. Justamente, el otro gran objetivo que persigue cualquier operador de TV paga.

En este contexto, el anticipo de Cablevisión provocó un remezón en la competencia.

A modo de ejemplo, Telecentro apuró el paso y comenzó a brindar un servicio de características idénticas hace un mes.

La compañía ofrece un combo de banda ancha (20 MB), televisión, pack HD gratis (seis meses) y Netflix sin cargo (noventa días), a lo que se le suma telefonía ilimitada.

La promoción cuesta $849 por mes. El precio por el paquete completo superará ese valor una vez que finalice el beneficio propuesto por la empresa a sus usuarios.

Por su parte, el combo actual de Cablevisión cuenta con banda ancha (25 MB) y televisión en HD por $960 mensuales por un año. Si el acceso es de 6 MB, baja a $845.

No obstante, al combinar un servicio con otro es posible que el cliente obtenga descuentos importantes, del orden del 20%.

Todo indica que cuando inicie la comercialización masiva de su nueva plataforma, tendrá que salir al mercado con promociones muy agresivas.

¿Por qué? Básicamente porque el objetivo central pasa por seducir a sus clientes a que se pasen al sistema premium. Y, desde ahí, proponerles Netflix.

Quienes hoy disponen de un paquete básico -es decir, sin HD- y acceso de banda ancha no menor a 6MB, ¿tomarán la decisión de contratar la propuesta premium para acceder a Netflix?

Asociado a ese interrogante, ¿pueden cancelar el servicio, quedarse con banda ancha y aparte sumar Netflix?

Estas son las inquietudes del momento para la industria de las comunicaciones.

Calculadora en mano

Con las empresas todavía en etapa de definición de sus estrategias comerciales, la respuesta deambula en el terreno de las especulaciones.

Sin embargo, si uno advierte que, en términos mensuales:

- Un acceso a Internet de 6 MB cuesta unos $445

- Contar con Netflix implica desembolsar $109

- Entonces, con menos de $600 se resuelve conectividad y acceso a un servicio muy valorado

Aun si se tratara del:

- Plan premium de Netflix, que vale $189 (permite ver en cuatro pantallas a la vez)

- Se le suma un acceso de 10 o 12 MB (menos velocidad no es posible para esa cantidad de pantallas) por $500 promedio

- Entonces el costo por contratarlos ambos por separado no supera los $700.

"LA Argentina es un país raro en comparación con la región, porque sigue segmentando los precios por tecnología analógica, digital y HD", remarcó a iProfesional Carlos Blanco, analista de Dataxis.

En su visión, "el servicio analógico continuará vigente unos cinco años más, de modo que los operadores de TV paga tendrán que esforzarse para convencer a los clientes a que se queden en la modalidad premium".

"Seguramente -añade- tendrán que brindar más prestaciones y una mayor velocidad de Internet".

Para este especialista, si Netflix u otro proveedor de contenido bajo esta modalidad OTT (over the top, por su sigla en inglés) tiende a formar parte de una oferta completa, entonces habrá que definir cómo se integra para que el cliente la valore lo suficiente y opte por contar con una propuesta premium.

El hecho de retener a los usuarios forma parte del folclore cotidiano de cualquier proveedor de televisión paga o de Internet.

¿Cuántas veces alguien llamó para cancelar un servicio y, del otro lado, buscaron la manera de acomodarle el precio y de persuadirlo para que no tome esa decisión?

En Argentina, los proveedores de cable tienen una resistencia significativa y capacidad para retener a los usuarios.

"Quise cortar la TV paga y es casi imposible. Estuve horas en el teléfono y con operadores tratando de convencerme de que optara por un triple paquete -por sólo $2 más al mes- en comparación con un contrato sólo de Internet", indicó un informe de Vindicia sobre Perspectivas de Premium OTT en América latina.

Según Blanco, "está claro que hoy Netflix es la puerta de entrada obligada a los paquetes premium. Pero si la cuestión se plantea en términos de combos, lo gravitante será la banda ancha, no tanto la televisión. Lo convergente va a pasar por la banda ancha".

Por lo pronto, es donde las firmas deberán poner mayor énfasis.

"La banda ancha se percibe como un obstáculo importante para la adopción de los servicios de OTT. Mejorará en los próximos años, tanto desde la penetración y desde el punto de vista de la calidad", consignó el reporte de Vindicia.

Además, dio cuenta de que "muchos consumidores no tienen acceso a una banda ancha lo suficientemente rápida como para transmitir videos largos y de alta calidad".

La necesidad por mejorar los accesos queda evidenciada hasta del lado de las operadoras telefónicas.

Si bien arman combos donde el video es parte fundamental, el anzuelo parece ser la velocidad de conexión. Los de Speedy, de Telefónica, ofrecen 10 MB con llamadas ilimitadas.

A ello se puede sumar on-video en su versión reducida o completa. Las promociones arrancan en los $300 por mes durante noventa días en su modalidad más económica.

Sin embargo, cuando se analiza el precio completo, se observa que asciende a por lo menos $630 mensuales. Esto, sin propuestas de TV o de decodificador, tal como ofrecen las prestadoras.

En el caso de Telecom, su plan de convergencia arranca desde la banda ancha, que es la condición sine qua non para acceder a servicios de valor, sea video, música en streaming (vía Spotify) o kits de seguridad.

"El acuerdo con Netflix forma parte de la continuidad de nuestra plataforma de alianzas e innovación en servicios de entretenimiento digital. Contar con un socio estratégico y líder mundial en el mercado de streaming de video a demanda es un diferencial que nos permite complementar la oferta y potenciar la experiencia de nuestros clientes" aseguró Manuel Correa Cuenca, director de marketing del Grupo Telecom.

Aquí se advierte claramente el énfasis puesto en el acceso a la web.

Para contar con esas prestaciones de valor, hay un direccionamiento implícito a contratar conexiones de mayor velocidad (20, 30 y 50 MB). Por ejemplo, el acceso de 20 MB cuesta, en promoción, $595 por tres meses.

¿Qué pasa con la empresa Claro? En principio, no tiene desplegada la misma infraestructura de red fija que sí poseen Telefónica y Telecom, pero viene invirtiendo desde hace ya varios años directamente en fibra óptica.

La compañía no está en condiciones de ofrecer banda ancha como sus competidoras más que por la vía móvil (3G y 4G). Pero sí está mejor preparada para el negocio del video.

Esto, a través de Clarovideo ($89 por mes), al que se puede acceder desde cualquier dispositivo -móvil o fijo-, como una notebook, un smartphone, un smart TV o una PC.

En el mercado, hay quienes aseguran que esta propuesta está sumando cada vez más adherentes.

Se trata de una manera de brindar una oferta convergente pero desde otro lugar, el mundo móvil, que es también la vedette, aunque cada vez más dependiente de las capacidades de la fibra óptica.

De ahí, que resulten tan lógicos los rumores que indican que la compañía ya tendría avanzado un acuerdo de compra sobre un operador de TV paga.

Adquirir una empresa de estas características le permitiría contar con una red que ingresa al hogar, más allá de la tecnología utilizada, como cablemódem o fibra óptica.

La convergencia es un hecho. Las empresas vienen ofreciendo combos desde que comenzaron a integrar sus redes.

No obstante, en momentos en los que anticipan una mayor combinación de servicios, se aceleran los tiempos de los privados, producto de las tendencias mundiales y de las regulaciones futuras en las que ya está trabajando el Gobierno.

Las compañías comenzarán a mostrar propuestas cada vez más agresivas para mantener a sus clientes y atraer a los de la competencia.

Pero serán los usuarios los que sacarán sus propias cuentas y tomarán la decisión final. Especialmente en tiempos en los que cualquier factura de pago de servicios tiene un peso importante en los bolsillos de muchos argentinos.