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El Plan de Acceso a la Internet Móvil, que había nacido como plan canje, ofrecerá celulares a un costo promedio de $2.000. Ya se eligieron las marcas
01/07/2016 - 09:27hs

El Gobierno avanza en los últimos detalles del llamado plan canje de celulares -oficialmente denominado Plan de Acceso a la Internet Móvil- que lanzará oficialmente en los próximos días.

Habrá al menos media docena de marcas que ofrecerán sus smartphones 4G en un valor que promediará los $2.000, pero que podrá resultar un poco más barato de acuerdo a la promoción que cada operador decida impulsar en el marco del plan.

Tal como viene informando iProfesional, los teléfonos 4G de bajo precio serán financiados a través del programa Ahora 12 que, en este caso en particular, aplicaría de lunes a domingo y no sólo de jueves a domingo, tal como ocurre con todos los productos alcanzados por el plan.

Las marcas que tendrán modelos de celulares de bajo precio son Huawei, Noblex, BGH, Samsung, LG, Hyundai y Microsoft, según detallaron a este medio distintas fuentes relacionadas con las conversaciones que, desde marzo pasado, entablaron los ministerios de Producción y de Comunicaciones, además de las operadoras de telefonía móvil y los fabricantes de electrónica de Tierra del Fuego.

Cada una de estas marcas tendrá al menos un modelo de smartphone 4G barato para ofrecer. La cantidad dependerá, asimismo, de los pedidos que realicen las compañías Personal, Claro y Movistar.

La idea del Plan de Acceso a la Internet Móvil surgió a finales de febrero pasado, luego de que el ministro de Comunicaciones, Oscar Aguad, y un grupo de funcionarios de esa cartera viajaran a Barcelona en el marco del Congreso Mundial de Móviles.

Allí, el jefe del MinCom advirtió la importancia de la infraestructura digital de telecomunicaciones en la economía en general y su capacidad para acelerar las inversiones en la materia, una necesidad prioritaria y urgente del Gobierno. Y propuso avanzar con un plan que permitiera acelerar el recambio de teléfonos de vieja tecnología por los de 4G.

Por esa razón, el anuncio del inicio del plan correrá por cuenta del Gobierno que, si bien terminó de acordar los puntos más gruesos del convenio el miércoles a última hora, decidió darse un tiempo más para que ningún detalle quedara librado al azar.

Mucho menos cuando se está a la víspera del inicio del segundo semestre, anunciado como el del comienzo de la buena racha económica para la Argentina por parte del Gobierno nacional. De hecho, la intención de los ministerios involucrados en la iniciativa era lanzar el plan en junio, pero no se llegó a tiempo.

Con esta medida, el Gobierno imita algunas de las tomadas por la gestión de Cristina Kirchner en los últimos años, cuando echaba mano a medidas vinculadas con la demanda de consumo para impactar a nivel de mercado interno.

El recambio de terminales de tecnología anterior a la 4G, si bien se acompañará con planes accesibles para los usuarios, tanto en modalidad abono como prepago, termina teniendo un impacto positivo a nivel de consumo: todo aquello que comienza a hacerse de manera eficiente desde un dispositivo móvil no se abandona más.

Si bien los usuarios que decidan optar por adquirir alguno de los teléfonos ofrecidos en el marco del plan notará fuertemente la diferencia de utilizar un equipo 2G o 3G por uno 4G, el secreto para el buen funcionamiento de las telecomunicaciones pasa por la mejora de la infraestructura de red.

Las tres empresas de telecomunicaciones que, actualmente, explotan el servicio de telefonía móvil 4G en el país están encarando inversiones por más de $25.000 millones. De ese total, al primer trimestre se habían ejecutado unos $7.000 millones, aunque es característica del país que el grueso de los desembolsos se realicen, en sintonía con las intenciones de la administración Macri, durante el segundo semestre.

Si a estos aportes se suman las inversiones que encaran Cablevisión y Telecentro, los compromisos totales para 2016 superan los $30.000 millones, mientras que los aportes ejecutados hasta el primer trimestre superan los $8.000 millones.