Los 2.500 habitantes del barrio Rodrigo Bueno, asentamiento pegado a la Reserva Ecológica, recibieron una oferta concreta del gobierno porteño para la urbanización de la villa más relegada por el Estado en la Ciudad.

Pese a que la UBA (Universidad de Buenos Aires) recomendó un plan de viviendas y la radicación definitiva, y una jueza ordenó al Gobierno porteño que la llevara a cabo, éste apeló cuando Mauricio Macri era jefe del Ejecutivo de la Ciudad.

Posteriormente, en septiembre de 2014, la Cámara porteña revocó el fallo que ordenaba a la administración comunal de implementar un plan de integración urbana y social del asentamiento de la Costanera Sur. En una decisión dividida, el voto de mayoría sostuvo que estas medidas no deben ser dispuestas por el Poder Judicial.

En tanto, en la Legislatura porteña hace tiempo 'duermen' 4 proyectos para urbanizar la villa. Uno de ellos fue presentado por los propios habitantes de Rodrigo Bueno, luego de haberse revocado el fallo. Ellos pidieron una "reurbanización con criterio de radicación definitiva" del predio.

"Nos tenemos que fortalecer y buscar el apoyo de organizaciones sociales y de más legisladores porque sabemos que vienen por el barrio Rodrigo Bueno, tal como hicieron en el barrio Papa Francisco", dijo en esa oportunidad Luis, uno de los delegados, en relación al asentamiento de Lugano que fue desalojado.

La Defensoría del Pueblo de la Ciudad, que tiene bastante influencia en el barrio, presentó otro proyecto en 2014, que regresó a escena en junio 2016, y contempla una mesa de participación integrada por 2 representantes de la Legislatura, 2 del Gobierno porteño, 1 de la Defensoría del Pueblo y el Ministerio Público de la Defensa, 2 del propio barrio Rodrigo Bueno y 1 para Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo de la UBA.

Buscaría establecer la delimitación definitiva del barrio, con denominación de calles y numeración de las viviendas, un diagnóstico de las problemáticas sociales, habitacionales y ambientales existentes, así como un relevamiento de las políticas públicas implementadas y de construcciones, infraestructuras y servicios públicos existentes. También prohibiría desalojos forzosos.

Otra iniciativa es del diputado Javier Gentilini, del Frente Renovador y vicepresidente 1ro. de la Comisión de Vivienda. "Era hora de que el oficialismo se decidiera a elaborar un proyecto de urbanización para Rodrigo Bueno. Esperamos que se trate de una urbanización en serio, que realmente le cambie la condición habitacional a los vecinos y no, como viene haciendo hasta ahora en todas las villas, de una intervención mínima, de carácter más bien superficial que otra cosa", planteó el legislador que responde a Sergio Massa.

El proyecto plantea la urbanización con radiación definitiva del barrio y su integración al tejido de la Ciudad, contemplando la construcción de la totalidad de viviendas nuevas y el correspondiente equipamiento con relación a las necesidades de su población, las características actuales del área y su proyectado desarrollo urbanístico.

Además, establece que el Gobierno porteño realizará las obras en 4 años y que el presupuesto no debe ser inferior al 0,5% de la partida general. Incluye desde la infraestructura instalar una red eléctrica, gas natural, agua potable y desagües fluviales y cloacales, una de los principales inconvenientes del barrio, que tiene pozos ciegos totalmente desbordados. Generan olores espantosos e insalubridad.

"Actualmente, la Villa Rodrigo Bueno cuenta con una infraestructura deficitaria y viviendas en condiciones de gran precariedad que, incluso, ponen en riesgo la vida de sus habitantes, como quedó demostrado con la muerte del niño Gastón Arispe Huamán en marzo de 2015", afirmó Gentilini.

Gastón Arispe Huamán (13 años) cayó en uno tratando de rescatar a su gato, y murió. Gentilini fue uno de los primeros en solidarizarse con Flora Huamán Ramos, madre de Gastón, que no llegó a recibir la atención necesaria por parte del SAME, según informa Urgente24.

El proyecto de IRSADesde el oficialismo, ahora apuestan a la urbanización. El propio jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, fue hace algunas semanas al Rodrigo Bueno a hablar con los delegados.

Según trascendió, les informó que avanzaría el demorado proyecto de un barrio residencial que planifica desarrollar IRSA en la vecina ex Ciudad Deportiva de Boca Juniors, y les propuso avanzar en una relocalización, que sería muy oportuna y a la que siempre adhirió Urgente24. Ante la negativa de los habitantes, Larreta propuso entonces avanzar con la urbanización y destrabar así el conflicto.

La Legislatura porteña trabó en varias ocasiones, y siempre todo fue muy bochornoso para la transparencia de los legisladores, el permiso para que la empresa IRSA concrete su proyecto Solares de Santa María. A cambio, la constructora aportaría u$s15 millones que se usarán para urbanizar la villa, según un proyecto que se presentó hace 3 años.

IRSA es la desarrolladora inmobiliaria de Eduardo Elsztain, dueño de los principales shoppings (Alto Palermo, Patio Bullrich, Paseo Alcorta, BA Design, DOT, Arcos y el Abasto), de hoteles de lujo como el Llao Llao, Intercontiental y Sheraton, de una gran cantidad de edificios y de la mayor parte de Puerto Madero.

Su empresa adquirió hace 15 años las 71,5 hectáreas de la ex Ciudad Deportiva, una de las últimas grandes reservas de tierra dentro de la Ciudad, a metros de Puerto Madero, invento de Alberto J. Armando en los años '70 porque pensaba construir ahí un nuevo estadio de fútbol.

En el año 2000, IRSA presentó un plan maestro para el predio Santa María del Plata que fue evaluado por el COPUA (Consejo del Plan Urbano Ambiental) y remitido a Procuración para su consideración. En el año 2002, el Gobierno efectuó la convocatoria a audiencia pública y en julio de 2006, el COPUA efectuó una serie de recomendaciones al proyecto.

En 2007, el Jefe de Gobierno aprobó el proyecto por decreto, que emitió ciertas normas para el desarrollo urbanístico, incluyendo tipos de construcciones permitidas y la obligación de ceder ciertos espacios para el uso y utilidad pública. Sin embargo, a raíz de un amparo, la Jueza Elena Liberatori sentenció la nulidad del decreto y ordenó al Gobierno de la Ciudad que urbanice.

Según la empresa, "la legalidad y validez que para la empresa tiene el citado decreto, alternativamente se suscribió el Convenio 5/10 con el GCBA, el que ha sido enviado con un Proyecto de Ley a la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires bajo el número 976 - J - 2010, para su aprobación parlamentaria". La iniciativa volvió a presentarse en 2012 por el Gobierno porteño, luego de un nuevo convenio con la empresa, pero se frustró sin apoyo de la oposición.

El 30/09/2014 un fallo de 2da. instancia revocó la sentencia de Liberatori."El argumento formal es que el barrio está ubicado en la Reserva Ecológica. Entonces como es una zonificación donde no hay vivienda no puede haber una urbanización" explicó Horacio Corti, Defensor General de la Ciudad, quien participó de la audiencia pública del TSJ. Sin embargo, para avanzar con la construcción, IRSA necesita que la Legislatura le apruebe la rezonificación del predio.