Los rumores de aumento del aceite provocaron un incremento de la demanda en los supermercados y varios pusieron carteles limitando la compra y otros venden aceite sólo si se compra un segundo producto, lo cual es ilegal.

El asunto llegó tan lejos que la Dirección Nacional de Defensa del Consumidor confirmó que realizará controles en todo el país orientados específicamente a detectar y sancionar prácticas comerciales ilegales en la comercialización de aceite en comercios minoristas.

Según apuntó esa oficina, los controles obedecen a que “se han identificado comercios en distintos puntos del país que ofrecen productos con venta supeditada a la compra de otro producto”.

Costumbres Argentinas

El anuncio anticipado de un fuerte incremento en los valores de los aceites comestibles modificó las costumbres de los consumidores argentinos durante el fin de semana en los sumera el producto más buscado en los supermercados. Y de hecho, uno de los más adquiridos.

El viernes se conoció la posibilidad de que Gobierno quitara el beneficio al sector productivo de un fideicomiso, que regulaba el precio desde el año 2008, por lo cual se estimaba a partir del mes de agosto un incremento abrupto del 300 por ciento, pasando de $32 a $95.

Esta información generó un cierre en la venta del producto a los supermercadistas, que se tradujo en una clara falta de stock, por lo cual ayer el insumo se vendía con fuertes restricciones.

Desde la Cámara de Aceiteros le reclaman al Gobierno que mantenga el fideicomiso que desde 2008 a través de un subsidio, permite mantener el precio.

Desde el Ministerio de Producción se ratificó que, por ahora, el fideicomiso se mantiene. "A largo plazo, el objetivo es cuidar el poder adquisitivo de los consumidores y al mismo tiempo normalizar el mercado del aceite, que tiene un rol fundamental en la sociedad, asegurando miles de fuentes de trabajo a lo largo de una cadena de valor que va del campo a la mesa de los consumidores".