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Desplome en la industria: arrastrada por la crisis del sector automotor, bajó 8,2 por ciento en junio

Desplome en la industria: arrastrada por la crisis automotriz, bajó 8,2% en junio
27/07/2016 - 19:45hs
Desplome en la industria: arrastrada por la crisis del sector automotor, bajó 8,2 por ciento en junio

La actividad industrial registró en junio una baja del 8,2 por ciento en relación a igual mes del año pasado, y acumuló en el semestre una contracción del 3,6 por ciento, estimó la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (FIEL).

"En el segundo trimestre de 2016, y en la comparación interanual la actividad industrial se redujo 6,7 por ciento, mientras que en relación al primer trimestre de 2016 la producción industrial corregida por estacionalidad cayó 2,3 por ciento", señaló FIEL en su último informe.

La entidad señaló que "en el acumulado para los primeros seis meses del año y en la comparación interanual, dos sectores registran un crecimiento de la producción, Insumos Químicos y Plásticos (2) e Insumos Textiles (0,3)".

En tanto, la producción de Papel y Celulosa cayó 0,2 por ciento y la de Alimentos y Bebidas 0,5 y registran una contracción más moderada en el semestre que el promedio de la industria".

"Las restantes actividades industriales presentaron en el acumulado para los primeros seis meses del año y en la comparación interanual, caídas de la producción superiores a la del promedio", explicó la entidad. Según sus estimaciones, el Petróleo Procesado bajó 4 por ciento; Minerales No Metálicos 4,1; Metalmecánica, 6,9, Cigarrillos, 8,7 y la producción siderúrgica 11,5 por ciento.

La industria automotriz continúa siendo el sector con mayor caída de la producción, acumulando 13,9 por ciento en los primeros seis meses.

De acuerdo con la clasificación de la actividad industrial por el tipo de bienes, en el primer semestre y en la comparación con igual periodo del año anterior, "todos los tipos de bienes muestran una caída de la actividad".

FIEL señala que "La producción de Bienes de Uso Intermedio se redujo 1,5 por ciento en el semestre, seguido de la producción de Bienes de Consumo No Durable que muestra un retroceso del 1,8 por ciento".

En tanto, la producción de Bienes de Capital mostró una caída del 5,7 por ciento en los primeros seis meses del año, seguida del retroceso del 10,8 por ciento registrado en la producción de Bienes de Consumo Durable en la comparación interanual.

Semanas atrás, el ministro de Producción, Francisco Cabrera, reconoció que el motor de la industria no verá la luz al final del tunel este año. "El 2017 será el año de la recuperación del sector automotor, debido en parte al repunte que se espera en la economía de Brasil", dijo el funcionario.

En tanto, el último informe disponible de la Unión Industrial Argentina (UIA) mostró una contracción interanual del 5% en mayo a partir de una baja generalizada de los rubros analizados y un aumento del 0,3 por ciento respecto de abril, de acuerdo al reporte de la 

"La caída en la actividad se observó en la mayoría de los rubros del sector industrial, tanto en mayo como en el acumulado de los primeros cinco meses del año", destacó el informe difundido en el que se precisó que en lo que va del 2016, diez de los doce bloques analizados presentaron una retracción en su producción.

Los dos sectores que crecieron fueron sustancias y productos químicos, como consecuencia de "una baja base de comparación" y el bloque de alimentos y bebidas, sector que si se excluye la molienda de oleaginosas también presentó una contracción.

El informe de la UIA reseñó que en mayo, la caída del nivel de actividad industrial fue liderada por el sector de minerales no metálicos (-12,1%), en línea con las bajas registradas en la actividad de la construcción desde febrero.

Otros sectores que presentaron caídas significativas fueron metales básicos (-9,8%); automotriz (-9,6%); sustancias y productos químicos (-8,4%); papel y cartón (-7,7%); metalmecánica (-6,9%); entre las bajas más pronunciadas.

Arrastre automotorLa industria autopartista es un claro reflejo del arrastre que produce el golpeado sector automotriz. Su producción registra un 10% de desplome en lo que va del año.

 “El segmento de autopartes para la producción local automotriz registró en lo que va del año una caída del 10% respecto de 2015”, dijo a Télam Juan Cantarella, gerente general de la Asociación de Fábricas Argentinas de Componentes (AFAC), quien lamentó que “ante un mercado interno de venta de vehículos que se mantiene y crece, la producción local no lo pudo aprovechar”.

La caída de actividad es la principal preocupación de los empresarios del sector a partir del impacto que viene generando la fuerte retracción de la demanda brasileña, la cual tiene una importancia tal que los esfuerzos en desarrollar otros destinos de exportación o el sostenimiento de ventas de 0 km del mercado interno no llega a compensar.

La referencia de Cantarella responde a que mientras los patentamientos de unidades 0 kilómetro en lo que va de 2016 aumentaron un 6,5%, la producción local de vehículos cayó un 13,4%.

A esa diferencia la explica por el incremento de las importaciones en torno al 40%, en su mayoría de productos de origen brasileño.

“El crecimiento del mercado interno no significó un acompañamiento de la producción local, sino que fue cubierto por un aumento muy importante de importación, lo cual repercute en el sector autopartista”, dijo a Télam el directivo de AFAC.

A pesar del incremento de las importaciones de vehículos brasileños -cuyo mercado interno en retracción genera una sobreoferta de unidades y una baja de costos difícil de equiparar por la producción nacional-, Cantarella entendió que este desequilibrio se explica, en parte, por “la complementación en los perfiles productivos en los dos países”.

“Además de que Brasil ofrece al mercado local precios bajísimos por una cuestión cambiaria y la fuerte capacidad ociosa que tiene, hay otra realidad vinculada a la especialización del vecino país en vehículos chicos y económicos, que son los que dinamizan el sector, mientras que la Argentina se está caracterizando por un perfil de pick ups y vehículos comerciales”, explicó.

El segundo sector en que se divide el negocio autopartista es el mercado de reposición, con una fuerte presencia de empresas pymes que están observando un resultado incierto dado por un factor positivo que es el incremento de manera importante del parque automotor, pero que al mismo tiempo se ve golpeado por el fuerte incremento de las importaciones de piezas.

“Si bien el parque automotor aumentó de manera importante en los últimos años, lo que implica más reparaciones y mayor demanda de autopartes, al mismo tiempo la gran aprobación de DJAIs -registradas en diciembre- hizo sentir su efecto durante todo el primer semestre, y recién en julio se estaría por revertir en las estadísticas una adecuación del mercado”, detalló Cantarella.

El tercer segmento es la exportación directa de autopartes, las cuales registraron en el primer semestre una caída del 20% respecto a 2015, nuevamente asociado a la caída de la demanda brasileña, mercado que representa para el sector el 65% de sus ventas externas.

Si bien las autopartes tienen una menor concentración de sus exportaciones hacia Brasil respecto a los vehículos terminados que ubican históricamente allí el 85% de sus ventas, la crisis del vecino país impacta de igual manera en el segmento.

Cantarella identificó que, además de la baja de la demanda externa, la industria autopartista enfrenta problemas de competitividad a la hora de exportar en temas vinculados con la mejora de la productividad de los procesos; los costos laborales no salariales -por ejemplo tasas de ausentismos, costos de las ART y conflictividad judicial- como también por la carga impositiva.

El directivo de AFAC admitió que las dificultades que atraviesa el sector en sus distintas ramas de negocios, “hace muy difícil mantener la totalidad de los puestos de trabajo ante la continuidad de esta situación de caída fuerte del nivel de actividad”.

“Las empresas han hecho esfuerzos para mantener dotaciones. No hay despidos masivos. Hay muchas situaciones consensuadas con los empleados, con lo cual no hay una situación de alerta pero que esto tiene su impacto en el empleo”, afirmó el empresario autopartista.

AFAC difundió esta semana una encuesta de expectativas entre sus asociados en la que se destacó que para el 35% de las empresas la mayor preocupación la constituyó la reducción en el nivel de actividad (frente al 28,5% de 2015), y en segundo lugar ubicaron las restricciones por la falta de competitividad en el 22,2% de las respuestas.

El cuestionario fue respondido por 76 empresas de todos los rubros productivos; grandes, medianas y pequeñas, ubicó en tercer lugar la negociación de precios con clientes, problemática que afecta al 14,6% de los casos en 2016, mientras que la conflictividad laboral es la preocupación de 7,9% de los encuestados, y la falta de financiamiento para el 7,3%.

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