Se encuentra en plena discusión en la Cámara de Diputados el proyecto de la Ley de Emprendedores que promete, entre sus novedades, la reducciòn de los plazos administrativos para formar una empresa, llevar una contabilidad on line, acceder a nuevas fuentes de financiamiento y un fondo conformado por el Estado y privados. 

Entre los puntos más destacables, se habilita abrir una empresa en 24 horas, obtener el CUIT o CDI también en 24 horas y el emprendedor podrá tener el CUIT dando un domicilio temporal (tendrà entre 6 y 12 meses para modificarlo y dar uno definitivo).

En cuanto al flujo del dinero necesario para crecer, el proyecto de ley permite financiarse colectivamente mediante el crowdfunding público.

Hoy esa forma de buscar nuevos fondos está prohibida para los emprendedores. Si se aprueba la ley se crearán plataformas on line -por ejemplo, cada banco podría tener la propia- para que un emprendedor pueda subir su proyecto y ofrecer hasta el 10% de su empresa en forma de cuota-parte. Entonces un inversor compra cuota-partes y una vez que se llega a la totalidad del dinero, se le gira al emprendedor que recibe ese dinero. El emprendedor emite el 10% de sus acciones.

Apalancar la primera etapa de crecimiento del emprendedor en términos financieros, también está contemplado en la futura normativa y establece un fondo compuesto por un 40% por parte del Estado y un 60% por privados. 

En cuanto a los emprendimientos que buscan la sustentabilidad, la futura ley establece para sus inversores desgravaciones impositivas. Sin embargo aún no se ha determinado porcentajes de bajas, ni el tipo de impuestos que incluiría. 

Juan Pablo Bustos, de la incubadora de empresas de la UNCuyo, afirmó que más allá de las promesas y su inminente implementación, lo cierto es que llevará un tiempo de ajuste por parte de ciertos organismos para adecuarse a los tiempos más acelerados para las gestiones administrativas. 

“Habrá que ver cómo reaccionan las capacidades operativas de los organismos públicos tanto nacionales como provinciales. En Chile tener una personería jurídica demanda 72 horas. Si bien de esos modelos se ha inspirado la futura normativa, también es cierto que habrá que ver cómo reaccionan y cómo lo implementan los diferentes organismos”, reflexionó Juan Pablo Bustos. 

Desde Endeavor, Pablo Aquistapace también se encolumnó junto a otras voces y calificó la iniciativa como benéfica. 

“De implementarse será de gran ayuda para los emprendedores regionales. De cualquier manera llevará un tiempo reglamentarla. Por ejemplo a la hora de determinar una sociedad qué requisitos debería tener, cuáles serán las excepciones, reglas y demás. Hay que ver cómo se implementa en la práctica. Aún es algo prematuro para emitir un análisis”, apuntó Aquistapace. 

Francisco Torres Vidal, de la Asociación de Emprendedores de Argentina (Asea) es uno de los dirigentes que está llevando a cabo el tratamiento del proyecto de la ley de emprendedores en el Congreso y es uno de los responsables a cargo del diseño de la futura normativa.

Con respecto al estado legislativo del proyecto de ley y su tratamiento, al presente está en discusión en tres comisiones de diputados de la Nación.

“En éstos momentos el proyecto es tratado en tres comisiones que son presupuesto y hacienda, legislación general y la de pequeñas y medianas empresas. Los legisladores por dos semanas tendrán la visión de emprendedores, especialistas, profesores y todos los responsables que conforman el sistema emprendedor del país. Una vez tratada en las comisiones a fin de setiembre pasará a ser votada en Senadores, en octubre calculamos que se sancione para luego ser promulgada por el Poder Ejecutivo y pase a tener el estatus de ley. Calculamos que  antes de fin de año tendremos la normativa”, concluyó Torres Vidal en el informe del diario Los Andes.