Miguel Vaca Narvaja, el juez que suspendió los aumentos de gas para las pymes en todo el país, asumió en el Juzgado Federal N° 3, de Córdoba, el 20 de noviembre de 2014. Un 20 de noviembre, pero de 1975, una patota secuestró a su padre, Miguel Hugo Vaca Narvaja, hermano de Fernando, uno de los líderes de Montoneros. La fecha de la asunción en el juzgado fue elegida especialmente por el magistrado.

Vaca Narvaja es abogado desde 1993 y posee un posgrado como especialista en Derecho Procesal Civil. Es coordinador letrado de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses), tiene larga militancia en la defensa de los derechos humanos, participa de manera activa de la agrupación kirchnerista Justicia Legítima y es miembro de una familia cordobesa devastada por el terrorismo de Estado.

En Córdoba, no había nombramientos de jueces federales desde la década de 1990. Cuando Vaca Narvaja asumió, hacía más de 19 años que no se cubría una vacante de tal relevancia en la Justicia Federal local.

El padre de Vaca Narvaja –también de nombre Miguel Hugo– fue una de las víctimas de los fusilamientos de la Penitenciaría de barrio San Martín (UP1), en 1976. 

El magistrado tuvo también una larga actuación como abogado del Estado provincial. En el año 2000, representando a la Provincia de Córdoba, ganó el juicio Conarg c/Provincia en el Tribunal Superior de Justicia, el más grande en la historia cordobesa. Eran 300 millones de dólares que había fijado la Cámara Cuarta de indemnización en contra de la Provincia.

Desde 2004, ocupó la jefatura de la Sala Civil de la Procuración del Tesoro de la Provincia de Córdoba, que en 2009 ganó el 50 por ciento de los juicios. Vaca Navaja también ganó una de las primeras medidas autosatisfactivas de la Justicia Federal, en contra de la Aduana Nacional, que tenía retenidos contenedores con aparatología médica, lo que permitió inaugurar el Hospital Provincial de Río Cuarto y el Oncológico.