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Nelson Remolina revela la importancia de educar a los jóvenes desde pequeños en el cuidado de la intimidad, en el contexto de Internet y redes sociales
05/10/2016 - 18:16hs

La responsabilidad social digital no tiene fronteras. Es una causa universal, que atraviesa a las sociedades alrededor del planeta. El profesor colombiano Nelson Remolina Angarita es una palabra autorizada a la hora de hablar sobre el impacto de las tecnologías digitales en nuestra sociedad, fundamentalmente en lo referido al derecho que tenemos los ciudadanos a cuidar nuestra privacidad e intimidad.

Un tema que genera arduos y dinámicos debates en todas partes del mundo, y que tiene como centro a las personas, y a los cambios devenidos del uso que le damos a las TIC y el impacto sobre nuestros derechos humanos.

Director del GECTI (Grupo de Estudios en Internet, Comercio electrónico, Telecomunicaciones e Informática) de la Facultad de Derecho de la Universidad de Los Andes, Bogotá, Remolina sostiene que todavía estamos lejos en materia de educación y concientización sobre los conflictos o las problemáticas que devienen del uso, principalmente, de redes sociales.

"Mi percepción es negativa sobre el tema. Creo que la privacidad con los jóvenes debe trabajarse desde muy pequeños, en los colegios. Es necesario modificar los programas académicos para que nuestros hijos aprendan a convivir en el ciberespacio".

Privacidad e intimidad en el contexto de Internet

En Argentina la privacidad es un derecho incluído en nuestra Constitución Nacional, y también protegido en leyes como la 25.326 de Protección de datos personales.

Todos los ciudadanos tienen derecho a conocer quién posee sus datos personales, y esto incluye a Internet y las redes sociales. Por supuesto que el mundo digital trae aparejado un sinfín de desafíos para quienes se encargan de velar por este tipo de derechos. Los datos personales no solo se han multiplicado, sino que también lo han hecho los espacios donde esos datos circulan.

Por ende, el derecho a la privacidad y a la intimidad entra en una gran encrucijada. Más todavía en las nuevas generaciones, donde se nota una clara diferencia en la concepción de lo privado y lo público.

En referencia a todo ésto, Remolina Angarita sostiene que los chicos no deben estar solos en los espacios digitales. Deben estar acompañados y aconsejados por sus padres, ya que, según el autor, "debemos principalmente, acompañarlos en ese proceso y estar pendiente de sus hijos respecto de lo que hacen en la red, y con quiénes interactúan. No dejarlos solos porque otros pueden aprovecharse de ello para hacerles daño. Es crucial hablar con los hijos sobre los aspectos positivos y negativos de internet, redes sociales digitales, juegos online, etc".

Al igual que en el mundo offline, quienes están a cargo de la crianza de niños, niñas y adolescentes, deben interiorizarse sobre las distintas problemáticas a las que se enfrentan los usuarios del mundo web.

En estos espacios suceden o se reflejan muchos conflictos que suelen suceder en la calle, en los colegios, en los barrios, y demás ámbitos. Es decir, padres, tutores, mediadores, docentes deben empatar los consejos que dan a los chicos y chicas en el mundo offline, en el mundo digital.

"Uno o varios consejos de los padres son muy valiosos para que sus hijos aprendan a convivir en el ciberespacio, sin que sean víctimas de engaños o de la delincuencia", sostiene el especialista colombiano.

Estrategias para poder crear un mundo digital seguro

Reconociendo a la escuela y a la familia como dos instituciones centrales para trabajar el uso seguro y responsable de la web, es que se pueden pensar distintas maneras de encarar el tema.

Las nuevas tecnologías han llegado para quedarse, y negar estos espacios como adultos no hace más que dejar en soledad a los chicos y chicas, y, en suma, a las futuras generaciones que necesitan del apoyo, la educación y el acompañamiento por parte de sus mayores.

Remolina sostiene que para poder estar al día respecto a las tendencias que existen en el mundo web, una tarea que según el profesor es ardua y complicada, existen dos canales fundamentales para empezar: "Campañas en medios de comunicación (publicidad en TV, radio, periódico, internet, etc.) por un lado, y que los colegios promuevan charlas de formación de los padres en nuevas tendencias de las TIC, y padres educados para educar a nuestros hijos en temas de vida cotidiana y tecnología".

Creando canales de comunicación e información, directamente dirigidos al público que lo necesita es que se podrá achicar la brecha generacional existente, y así mitigar las grandes barreras que hoy separan a distintas generaciones. Esto es fundamental para lograr un acercamiento, y a la vez "hablar todos en el mismo idioma".

Remolina va más allá, y ve como necesaria la introducción de una materia específica en la currícula de todas las escuelas (privadas y públicas), donde se trabaje en los cuidados en la web. A propósito, sostiene que "debe crearse una materia nueva que se denomine ‘Vida cotidiana y sociedad: como convivir pacífica y seguramente en el ciberespacio'.

"Este debe ser un curso obligatorio y permanente como los son, por ejemplo, las matemáticas. Es clave reformular los programas de educación de los colegios. Muchos siguen formando niños para el siglo XX y no tienen en cuenta la realidad socio-tecnológica del siglo XXI".