Empresas de peso a nivel internacional. Cientos de millones de dólares en juego. Ganas de invertir. Grandes expectativas en las licitaciones que realiza el Gobierno para ir asignando nuevos proyectos.  

Esta es la "foto" que se observa en el campo de las llamadas "energías limpias". Es decir, la que se genera a partir del aprovechamiento del sol, del viento o de otras fuentes como los residuos.

Es sabido que la riqueza del suelo argentino dinamiza el sector de los agronegocios, el de los alimentos, el de los hidrocarburos no convencionales, el del litio, el de la minería en general y la lista sigue.  

También el potencial de recursos que presenta la geografía nacional es un imán que atrae a las empresas "peso pesado" a nivel internacional que se desempeñan en el campo energético. En particular, en el de las "renovables".

Se trata de  una industria que ya se perfila como gran candidata a cambiar la fisonomía de las economías regionales.

Empresarios europeos, asiáticos y estadounidenses aterrizan en Ezeiza no sólo para comer un asado, bailar un tango o conocer la Ciudad de Buenos. 

Algunos vienen a interiorizarse sobre este negocio, que promete grandes beneficios y más a los que se suman ahora, ya que se encuentra en plena etapa de expansión.

Muchos de ellos ya cuentan con bastante "info" sobre las condiciones muy favorables que presenta el país y de los emprendimientos que han comenzado a gestarse tras la reciente sanción de la Ley 27.191.

Se trata de la normativa vinculada con el régimen de promoción de las energías renovables, que a su vez abrió el juego a la licitación para la producción de 1.000 MW de potencia. 

El entusiasmo de una industria jovenHoy en día, desde las oficinas linderas al obelisco se intensifican las gestiones orientadas al desarrollo de proyectos de largo plazo.

Varios de ellos se vinculan con los de generación de energía a partir de los vientos (eólica) que, en rigor de verdad, encuentran profundo sustento para sembrar sus cimientos en el país.   

Sucede que el mapa de renovables muestra a la Argentina como uno de los países que cuenta con los mejores vientos del mundo. 

Presentan una velocidad de entre 8 y 13 metros por segundo, lo que permite a los aerogeneradores operar los parques con un factor de capacidad o rendimiento por encima del 50%.

Para tomar dimensión de esta cifra, algunos países de Europa -líderes en la materia- festejan cuando las mediciones de viento les permiten un rinde del 23%. Es decir, de menos de la mitad que el de estas tierras.

El potencial de la geografía nacional se ubica en el podio a nivel mundial en todas las variantes tecnológicas: eólica(vientos), solar y biomasa (residuos).

En referencia a la primera, aparecen la Patagonia, Buenos Aires, Mendoza, Córdoba, La Rioja, San Luis y San Juan como relevantes.

En estas zonas el potencial de los vientos supera por lejos al de otras naciones desarrolladas en esta actividad.

Además, según la Asociación Argentina de Energía Eólica (AAEE), el 70% del territorio argentino resulta apto para generar energía a partir del viento.

Tal como señala Carlos Badano, titular de la consultora Saint Vincent (experto que trabajó en el desarrollo del primer parque en Uruguay), lo más positivo es que todo el potencial puede traducirse en inversiones.

Por cierto, Badano retornó entusiasmado al país luego de participar de la feria "Wind Energy Hamburg".

Una sola frase, compartida con iProfesional tras esa visita, sintetiza su vivencia en ese encuentro: "El interés de los inversores por la Argentina es bastante más grande del que se piensa".

Apunta que tanto fabricantes de equipos como financistas y desarrolladores de proyectos vienen dedicando buena parte de su tiempo para analizar el "caso argentino".

Y remarca que todos aquellos que se desarrollan en el ámbito de las energías limpias están atentos a las próximas subastas que lanzará el Gobierno.

Chubut, la "meca" eólicaEn la primera ronda del Programa "RenovAr" la provincia patagónica se quedó con tres parques.

Los proyectos adjudicados en este territorio fueron:

-  Chubut Norte (28MW): quedó en manos de la empresa Genneia y estará ubicado en la zona de Puerto Madryn.

- Garayalde (24 MW): es impulsado a través de una alianza entre Pan American Energy y la firma 3-Gal.

- Kosten: intervienen Enat, SEG, Otamendi y Nuevo Cerro Dragón, en la zona de Pampa del Castillo, en el sur.

Mario Das Neves, gobernador chubutense (quien ya dejó atrás sus intenciones de cobrar regalías a la generación de energía eólica) hizo pública su alegría.

"Resulta trascendental el impulso de políticas energéticas de largo plazo. Especialmente teniendo en cuenta la distribución federal de esta primera etapa de la licitación nacional e internacional", expresó luego de conocer los resultados.

Un sol para la energíaEstas buenas perspectivas de la eólica son extensivas a la energía solar.

Salta, Jujuy, Catamarca, Mendoza, Córdoba, San Juan, San Luis y hasta Santa Fe gozan de una radiación óptima para el desarrollo de esta fuente renovable.

"Desde Mendoza hasta Jujuy los parámetros son muy altos, comparables con los que  existen  en  zonas  favorables  de  España,  por  ejemplo", destacan los expertos Raúl Righini y Hugo Grossi Gallegos.

"El resto del país tiene valores apreciables de irradiación  anual en casi  toda su  extensión, salvo sitios puntuales    como  la provincia de Tucumán, parte de Buenos Aires, el sur de Santa Cruz y Tierra del Fuego", amplían.

En la reciente subasta lanzada por el Ministerio de Energía y Minería el gran ganador de esta categoría fue Jujuy.

A través de su empresa estatal JEMSE logró la adjudicación del parque que será el más grande de Latinoamérica, por 300 MW.

La compañía participa junto con las chinas Talesun, fabricante de paneles fotovoltaicos; Shanghai Electric Power Construction, perteneciente al conglomerado de empresas de Power China junto con los bancos Exim Bank e ICBC. 

Se trata de los proyectos Cauchari 1, 2 y 3, cada uno de 100 MW, sobre los cuales JEMSE ofertó un precio de u$s60 por MWh.

Otra que resultó ganador fue Fieldfare, que junto a Isolux se adjudicaron el "Proyecto Solar La Puna", en Salta, por 100 MW. 

Ofrecieron un precio de u$s58,98 dólares el MWh, calificando por detrás de JEMSE por cuestiones de plazo e integración de industria nacional.

Del agro a las bioenergíasPor el carácter agropecuario que presenta la economía local y los diversos recursos naturales del país, prácticamente en todo el país se puede sacar rédito de la biomasa.

¿De qué se trata esta tecnología? Permite aprovechar materia orgánica de origen vegetal o animal, incluyendo los residuos y desechos orgánicos, para la generación de energía. 

A priori, las provincias privilegiadas son Corrientes, Chaco, Río Negro, Formosa, Misiones, Santa Fe y Córdoba.

En estas zonas existe materia prima suficiente como para generar calor y energía eléctrica a partir de pellets, excremento animal, residuos forestales, urbanos y del agro, materia orgánica en sus distintas formas, maíz, soja, sorgo, pasto elefante, ray grass, entre otras.

Industria próspera y federalEl Ministerio de Energía que dirige Juan José Aranguren espera sumar 10.000 MW de potencia renovable en los próximos nueve años.

Esto implica que se construirán nuevas centrales eólicas, solares y de biomasa, que permitirán potenciar a las economías regionales y dotarlas de un recurso clave como lo es el energético. 

Para Marcelo Álvarez, presidente de la Cámara Argentina de Energías Renovables (CADER) esta es precisamente una de las principales virtudes del sector.

En contacto con iProfesional, el empresario destaca "el espíritu federal que tienen las energías limpias".

De alcanzarse las metas planteadas en la ley 27.191, el dirigente aseguró que el país "potenciará la dinámica del mercado interno, desarrollará las economías regionales y podrá sustituir importaciones de combustibles fósiles".

"A la vez reducir las emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera, generando un importante ahorro de divisas a la macroeconomía", concluye.