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Las novedades continúan llegando a las vinotecas. En esta producción, te presentamos cinco ejemplares tintos: tres Malbec, un Cabernet Franc y un blend
18/10/2016 - 06:00hs

Tres Malbec, un Cabernet Franc y un blend forman parte de esta producción de vinos recomendados, dedicada a los nuevos ejemplares que llegaron a los estantes de las vinotecas en los últimos días.

Lo interesante es que se trata de ejemplares que se adaptan a distintos estilos y presupuestos, con precios que parten desde los $184 y llegan a los $540.

Enterate por qué vale la pena tenerlos en casa: 

Solocontigo Affaire Malbec 2014 – Bodega Solocontigo – Precio sugerido: $270

¿Qué ofrece?: el proyecto recién está dando sus primeros pasos en el mercado interno. Los impulsores son una pareja de empresarios canadienses que se enamoraron de Mendoza y decidieron encarar su propia bodega en el complejo The Vines, en Valle de Uco. A partir de viñedos de Los Chacayes, Altamira y La Consulta,  alumbraron un tinto complejo, en el que surgen notas de frutas rojas maduras, té negro, toques florales y notas clásicas de madera bien amalgamadas. Al paladar se luce con un excelente balance entre la fluidez y su estructura.

Conclusión: un tinto que no cansa. Actual pero sin forzar frescura ni tensión.

El Renegado Cabernet Sauvignon 2014 – Bodega Vicentín Family Wines – Precio sugerido: $299

¿Qué ofrece?: esta etiqueta forma parte de la nueva línea alumbrada por la enóloga Carola Tizio, bautizada “La banda de los tres sucios”, conformada además por un Cabernet Franc y un Petit Verdot. ¿Por qué? Según explicaron desde la bodega, estos ejemplares la principio se mostraron “terrosos, salvajes, rebeldes en cierta manera, y sin mostrar ganas de salir. Ahí comenzaron sus nombres y su forma de expresarlos: los sucios, los impuros, los que no querían salir”. Lo más interesante de este Cabernet Sauvignon es  su buena tipicidad, con una madera bien integrada. Aparecen notas de fruta negra, los clásicos y esperados trazos de pirazinas, que recuerdan al pimiento rojo, y dejos especiados. Suma además una leve nota a hoja de tomate. En boca es un vino de marcada textura, taninos rugosos que se agarran del paladar y un pulso apenas sucroso.

Conclusión: pese a su nombre “rudo” y al desafío que supuso elaborar estos tintos alumbrados en el marco de una cosecha complicada, la realidad es que es un tinto muy disfrutable. Pero con bastante carácter como para acompañar carnes rojas grilladas.

Pulenta Estate Malbec – Bodega Pulenta Estate – Precio sugerido: $540 

¿Qué ofrece?: esta etiqueta forma parte de la nueva tanda de lanzamientos de la bodega, que incluye además un espumante de la línea La Flor y un Gran Cabernet Sauvignon. Lo destacable de este ejemplar es la pureza de la materia prima, con notas de fruta roja, apenas maduras. Suma además, un recuerdo a mina de lápiz y una delicada atmósfera floral. Es un vino que pasó más de un año y medio en barricas, pero la madera está definitivamente integrada. Al paladar presenta una textura granulosa, que marca presencia, con un fluir apenas tenso. Pero no es de esos vinos delgados: tiene volumen, amplitud y estructura. Eso sí: la frescura se manifiesta y esto evita que sea un vino cansador.

Conclusión: muestra lo brioso que puede llegar a ser un tinto de Gualtallary, pero de manera absolutamente “civilizada”.

Alta Vista Red Blend 2015 – Bodega Alta Vista – Precio sugerido: $184

¿Qué ofrece?: este blend que conjuga Malbec, Cabernet Franc y Shyrah, es una clara apuesta por la fruta roja fresca y crujiente en primerísimo plano, sumando luego un dejo a especias dulces, bien tenues y ligeras, en parte provenientes de la madera. En boca, la propuesta se define desde el primer instante: cuerpo medio, paso ágil y una frescura que se prolonga en el paladar, con un recuerdo intenso a fruta roja y negra y un dejo a hierbas aromáticas. Claro que el juego entre lo tradicional y lo moderno -entendido esto como una “vuelta a las raíces” y a la producción de vinos menos intervenidos en bodega- está presente y se palpa en el producto final: esa frescura y esa labilidad que exhibe este blend en el paladar, se termina apoyando en un estilo bastante clásico, más propio del Viejo Mundo.

Conclusión: no es un vino pretencioso o demasiado complejo. Tampoco la juega de “hipster”. Es decir, los enólogos no forzaron la acidez volviéndola artificial y tampoco buscaron un filo donde la fruta no lo ofrecía.

Cadus Gualtallary Appellation Malbec – Bodega Cadus – Precio sugerido: $350 

¿Qué ofrece?: Sin artificios ni giros forzados, este ejemplar de Gualtallary logra explorar el costado más amable de ese terroir, presentándose elegante y con muy buena estructura. En nariz, premia con fruta roja y negra, toques de enebro, un recuerdo lejano a mina de lápiz y suaves especias dulces, resultado de una madera bien integrada. En boca es un vino bien balanceado en cuanto a volumen, sucrosidad y frescura. Tiene su esperado y clásico fluir por el centro del paladar, tiene cierta tensión, tiene una rica textura. Es cierto. Pero todo en dosis equilibradas.

Conclusión: tras una “carrera armamentista” en pos de los vinos filosos, es grato encontrar nuevos vinos de Gualtallary pensados para paladares universales.

© Por Juan Diego Wasilevsky

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