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Marcas de autos "Made in China" desembarcan en la Argentina y crece el temor de empresarios locales
18/10/2016 - 16:05hs

Después del cerrojo a las importaciones que padeció la industria automotriz y con un mercado sin posibilidades de expansión, el negocio está completando un giro de 180 grados. 

Pese a que todavía hay compañías que padecen el bajón de la demanda por parte de Brasil y siguen recortando turnos, el mercado se prepara para asistir, después de mucho tiempo, a la llegada de nuevas marcas, especialmente chinas, que vienen a dar pelea. 

Los anuncios, que se formalizarán en breve, entusiasman al Gobierno -que necesita ratificar el desembarco de inversiones- pero preocupa a los responsables de automotrices, que hoy deben pelear por cada punto de share en el plano local frente al desplome exportador. 

"Estamos ante un aluvión que recién empieza", advierte un alto directivo de una terminal. 

Sin embargo, hay quienes se entusiasman con la ampliación de la oferta y el arribo de nuevos jugadores: "En la Argentina hay espacio para diversificar la cantidad de marcas de autos que se venden", afirma Gonzalo Dalmasso, experto en industria automotriz de Abeceb

Hoy, con nuevas condiciones político-económicas tras el cambio de Gobierno, aparecen diversas variables que juegan a favor de los importadores. Estas son: 

-Las nuevas reglas de juego y las expectativas de crecimiento de la industria

-El repunte automotriz de China y su necesidad de expansión

-El desarrollo industrial intra-regional

-La estabilidad del tipo de cambio

El primer factor que cambió el panorama automotriz tiene que ver con las medidas que regulan el mercado y las expectativas de la industria después de haber tocado un piso.

"Después de cuatro o cinco años de una política restrictiva con altos impuestos y las famosas Declaraciones Jurada de Importación -DJAI- que trababan las ventas, se liberaron las importaciones. El mercado, de hecho, está empezando a repuntar porque se normalizó la oferta", sostiene Dalmasso. 

Mientras que para 2016 se proyecta un repunte de las ventas del orden del 8%, de la mano de un volumen de 700.000 unidades patentadas, las perspectivas que trazan en la industria marcan una tasa promedio de variación del 6,5% hasta 2020

Este escenario de crecimiento, junto con el cambio de las reglas de juego, es algo tentador para muchas empresas. 

¿Quién es quién?

Las marcas que confirmaron su desembarco en el mercado son las siguientes:

-Geely

Es una firma china que comenzó en 1986 como fabricante de refrigeradores y equipos de aire acondicionado.

En 1994, empezó a desarrollar motocicletas y scooters. La producción de automóviles se inició en 1999.

El punto de inflexión de la compañía tuvo lugar en 2005, cuando Geely Automobile y Daewoo firmaron un acuerdo para desarrollar vehículos en Asia. 

Otro hecho clave tuvo lugar en diciembre de 2009, cuando anunció que había acordado la adquisición de la prestigiosa Volvo Cars a Ford Motor Company.

La compañía hace nueve años que está presente, a través de un importador, en Uruguay.

El desembarco en la Argentina con los primeros vehículos está pautado para el mes de diciembre, de la mano de los modelos LC 1.3 (foto anterior), LC Cross, 515 1.5 cinco puertas y cuatro puertas y el sedán Emgrand EC7 1.8 (foto siguiente). 

Si bien todavía no hay precios oficiales, la importadora Geely Argentina dejó entrever que los valores partirán de los $190.000 a los $350.000 y que todas las unidades contarán con garantía de tres años o por 100.000 kilómetros. 

-Borgward

La alemana Borgward anunció que regresará al país después de haber fabricado en la década del '60 el sedán Isabella y el camión B-611 en Córdoba.

El Isabella, en su versión sedán dos puertas y coupé, fue el auto que hizo famosa a la marca en el mundo y especialmente en la Argentina.

Los motores se producían en la planta que Borgward Argentina había construido en Isidro Casanova, provincia de Buenos Aires, mientras que los autos se armaban en el establecimiento de DINFIA, en Córdoba.

En 2008, el nieto del fundador, Christian Borgward, relanzó la compañía estableciéndose en Suiza.

La empresa anunció su desembarco de manera oficial en la Argentina con un evento en Puerto Madero. 

Sus nuevos productos tienen tecnología alemana pero son fabricados en China en alianza con la asiática Foton Motor, principal accionista. 

Entre las novedades más recientes se encuentran el Borgward BX7, un SUV del Segmento D, para el cual ya iniciaron la homologación para el mercado argentino. 

En diálogo con la prensa, Ulrich Walker, CEO Global de Borgward, afirmó que "somos una marca alemana, con diseño, desarrollo alemán y con producción china".

La compañía encaró este desembarco de la mano de un apoderado que conoce muy bien la industria local: Alberto García Carmona, ex Relaciones Institucionales de General Motors en la Argentina.

En paralelo, la empresa china Foton Motor -principal accionista de Borgward- también tiene planes para el mercado doméstico. 

Según trascendió, su desembarco oficial tendrá lugar en los próximos meses y su objetivo es comenzar a ofrecer su pick-up mediana Tunland, uno de los modelos más difundidos en América latina, principalmente en Chile y Colombia, que tiene capacidad para transportar una tonelada. 

La compañía ya había protagonizado un desembarco fallido en 2008, cuando el gobierno de San Luis firmó un convenio a través de la licenciataria HP Global SA para comenzar a ensamblar utilitarios en una zona franca de esa provincia. Sin embargo, el proyecto no terminó prosperando

-Lifan

Es una de las últimas marcas en arribar al mercado argentino

Establecida en Chongqing desde 1992, se dedica a la producción de automóviles y motos. Además es una empresa financiera e inmobiliaria. Exporta a 50 países y tiene siete fábricas de montaje en el mundo.

Desde 2007 aumentó sus exportaciones más de 10 veces.

Empezó a analizar el mercado argentino en 2011, adjudicando la representación a Lifcar S.A.

En octubre de 2012, con el objetivo de cumplir con los requerimientos locales y con intenciones de continuar con su proyecto en el Mercosur, estableció su planta en Uruguay y comenzó un trabajo junto a LIFCAR S.A. desarrollando nuevas piezas con proveedores argentinos.

Su lanzamiento oficial en el país tuvo lugar a fines de 2015. Hoy comercializa tres modelos: X60 (foto arriba) un utilitario deportivo mediano; X50, un crossover del segmento B; y Foison (foto abajo), un minitruck con caja de carga y capacidad para transportar dos pasajeros.

China: protagonista de un cambio globalLa llegada de marcas chinas es un fenómeno bastante nuevo en la Argentina. Los únicos antecedentes recientes son los de Lifan y los de Chery

En América latina hace tiempo que están presentes. Y prometen ir por más. 

Según analistas de la industria, el crecimiento de las marcas asiáticas está provocando un cambio de mercado a nivel mundial.

Se estima que para el año próximo habrá en funcionamiento 140 plantas de producción de automóviles en ese país. 

Una demanda doméstica en recuperación, como se observa en la Argentina, es un anzuelo que no pasa por alto para estas empresas. 

"Si bien en el país las marcas tienen que aplicar el arancel externo del 35%, que es una restricción, tienen margen para pelear por un lugar entre los consumidores con precios bajos", afirmó Dalmasso.

Esto se debe a que los costos de producción en el gigante asiático resultan mucho más bajos que los que se observan en el Mercosur

"El 35% de arancel extra-zona es un problema, pero estamos trabajando para llegar con precios competitivos", explicó García Carmona, apoderado de Borgward. 

Las desventajas que enfrenta el "Made in China" Junto a los alicientes para desembarcar en el país, muchas de las firmas que tienen planes de aterrizar juegan con algunos factores en contra. 

Por un lado, la situación de la industria en Brasil, que todavía no repunta. El mercado vecino es el más importante de la región para las automotrices, y su evolución es clave para pensar en crecer también en la Argentina.

Sin embargo, hay confianza en que la crisis del país vecino tocó su piso y que a partir de 2017 comenzará la recuperación.

En el plano doméstico, otro problema son las largas esperas para conseguir las homologaciones

Hay empresas que se quejan de que la Secretaría de Industria está demorando más de un año para aprobar un modelo, lo que atrasa todos los planes de negocios. 

En este sentido, desde Borgward se refirieron a los contratiempos, pero afirman ser optimista: "Confiamos en que el Gobierno irá agilizando los trámites para que no lleven tanto tiempo".

El otro factor que todavía hay que pulir es el concepto de las marcas chinas en el país y la relación con el consumidor.

"Todavía no tienen una buena imagen en la Argentina. Además, tan importante como la venta de un vehículo es el servicio de post-venta, y para ello se requiere del desarrollo de una amplia red de concesionarios y talleres oficiales", afirmó Dalmasso.

Sin embargo, los autos chinos seguirán compitiendo por precio y eso es un factor que les juega a favor.

"Actualmente, una marca china tiene el auto más barato de la Argentina: el Chery QQ. Esta variable será importante para las compañías que arriben próximamente", agregó. 

Paralelamente, aseguró que las empresas del gigante asiático tienen chances de recorrer el camino que hicieron las automotrices de Corea. 

"Hace diez años, ese país no era un gran productor de vehículos pero hoy tiene marcas como Hyundai y Kia que tienen muy buena aceptación en el mercado", afirmó Dalmasso. 

"China está invirtiendo en innovación y en el mediano plazo se perfila para ser un fabricante de calidad", recalcó. 

Camiones: nuevos jugadores

Dentro del combo de marcas que acaban de desembarcar o están delineando su arribo a la Argentina, hay compañías de otros orígenes. Tal es el caso de: 

-Hino

Es un fabricante de camiones diesel, autobuses y otros vehículos con sede en Tokio, Japón.

Hoy forma parte del grupo Toyota y, si bien no es muy conocido en la Argentina, está comenzando a ganar presencia en la región. 

Hino posee plantas de producción en Colombia y México, además de Japón, Estados Unidos y Canadá.

La marca arrancó comercializando en el país el Serie 300 pero hay planes para ampliar los modelos. 

-Isuzu

La japonesa operó en la Argentina de manos de General Motors, de quien se desvinculó tras la crisis de 2008. Después de un impasse, volvió al mercado con Hugo Belcastro y Diego Sánchez Navarro como importadores.

  

Isuzu es líder en ventas de camiones livianos en 36 países, incluyendo a los Estados Unidos. Y es el primer fabricante de ese segmento en Japón.

Las ventas arrancarán en 2017 con la comercialización de los camiones Isuzu NPR. Vendrán importados y competirán de manera directa contra los Mercedes-Benz 815 brasileños, entre otros.

Las buenas perspectivas que se abren dan lugar a la llegada de otro estilo de compañías: tal es el caso de Morgan Motor Company, una inglesa fundada en 1910 por Henry Frederick Stanley Morgan.
Todos sus modelos son fabricados a mano, con un proceso artesanal que se conserva desde hace décadas.

Desembarca en el país de manos de Shimisa, importador de motos, cuatriciclos, motos de agua y UTVs.

Venderá tres modelos exclusivos, uno de ellos el 3 Wheeler, una unidad carrozada de tres ruedas.

"Apenas supimos que ganó Mauricio Macri, inmediatamente pensamos en desembarcar en el país. En julio ya estábamos viajando a Inglaterra y sellamos el acuerdo", explicó Leonardo Gadaleta, CEO de Shimisa S.A, importador de Morgan y la marca de motos Norton.

En una segunda etapa, la idea de la empresa es homologar el Morgan Classic y el Aero. Se trata de modelos exclusivos de alta gama, con un valor que arrancan en los 50.000 dólares.

"Las automotrices que empiezan a estudiar el mercado tienen planes a cinco años o más. Recién en ese período esperan que sus ventas despeguen", comentó Dalmasso.

El economista destacó que un contexto en el que el tipo de cambio tiende a apreciarse favorecerá la llegada de marcas importadas

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